14. con que es tuyo.

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Ya estaba a punto de sufrir de un ataque de ansiedad, avía pasado un buen rato y ya casi termina el reseso pero no avía rastro de a–yao por ninguna parte, lo cual me era preocupante.

No tenía el lan nada más en su cabeza en esos momento que la preocupación de que el jing no llegaba y no podía escuchar lo que murmuraban los demás estudiantes a su alrededor.

Ya cuando estaba parandome del banco en donde estaba sentado para ir a buscar lo, mis ojos dibisaron a a–yao y a–cheng siendo escoltado por mi tío a dirección, no se me ocurría otro lugar mas, a lo que me quedé estático en mi lugar con muchas dudas en mi cabeza ¿que isiero esta vez para que lo llevarán a la dirección? ¿Y lo otro que paso con el ramo de rosas?

...

Una media hora antes.

Nar. Jing guangyao.

Jing guangyao estaba de camino en buscar la flores que "amablemente guardo de su amigo para que se la dé a él jiang menor", en la mente del jing no tendría porqué se estaba interesando el temperamental de jiang cheng, el nisiquiera hera bonito y su figura era mediocre. Además de que su personalidad era una mierda, gruñón, se enfada pro todo, y...

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando deslumbró a una persona a la distancia, era jiang cheng que estaba de camino a el cuántico donde se guardaban las cosas para la limpieza, para comenzar a cumplir con su castigo.

A lo que guangyao, se asercaba discretamente quería estar en el momento en que el jiang viera las flores que oculto en ese lugar, se le abia ocurrido que no iba a permitir que lan xichen le diera las flores el en persona.

Iba a aser que el jiang menor las destruyera y así le daría una mala impresión a él lan del menor, su plan era simple pero sin fallas, bueno si no se contaba que el mintió en el proceso todo iba a ir bien.

Jiang cheng después de que abrió la puerta del armario se dio cuenta del gran ramo de rosas que tenía alfrente de el y como no darse cuenta era muy estrambotico y absurdamente grande, lo cual pensó que idiota se le ocurrió regalar algo tan exagerado cuando no era San Valentín, talvez lo ignoraria si ese fuera el caso pero no lo era así que hará lo que su instinto le diga.

Así que agarro el ramo posisionandolo erriba de su cabeza para tirarlo directamente al bote de basura, cuando el jin se dio cuenta de lo que iba aser lo detuvo.

— ¡hey, que crees que ases con mi regalo! — grito la frase claro y fuerte para todo aquel que pasara lo escuchara lo cual funcionó a lo cual lo llenaba de satisfacción.

El jiang se detuvo y comenzó a mirar a la persona y más le desagradaba.

— Ah con que es tuyo.

—si si lo es, así que devuelvemelo.

— claro. — la respuesta de jiang le sorprendió mucho porque pensó que talvez le diría alguna grosería, o se negaría pero no fue así, asta que vio el ramo en el aire y resibiendolo directamente en la cara callando al piso.

¡¡SIGO VIVA!!

Aprendiendo A Enamorarte (Jiang&Lan) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora