Cada día se convirtió en un combate interno, una batalla entre el deseo de aferrarse a los recuerdos y el dolor punzante de dejar ir a quien ya no podía estar a su lado, como si el destino se burlara de su amor con el cruel regalo del adiós
Bye
Cada día se convirtió en un combate interno, una batalla entre el deseo de aferrarse a los recuerdos y el dolor punzante de dejar ir a quien ya no podía estar a su lado, como si el destino se burlara de su amor con el cruel regalo del adiós