Odio Amarte ©Kookmin©

Capítulo 9

-Y bien?- cuestionó odette ansiosa por la respuesta

El doctor dejó de examinar a Jimin y viendo a la mujer asintió.

-Jimin está en cinta- musito el hombre sonriente

-De verdad?- chillo park sentandose enseguida luciendo emocionado

La mujer respiro aliviada y agradeciendo al cielo sonrió ampliamente.

-Que cuidades deberá tener?- pregunto la mayor

-Le dejaré todo por escrito aunque debe evitar el esforzarse o estresarse, no queremos que tal vez pase una catastrofe- comentó el mayor escribiendo

Park asintió, claramente se cuidaría, su madre le habia preparado para todo así que no era necesario tanto protocolo, era joven pero no un tonto.

Moría por decirselo a jungkook, se preguntaba cual sería su reacción, esperaba que una buena sin duda.

Acomodando sus prendas se levantó acariciando así su vientre y mordiendo su labio inferior se sintió ansioso por traerlo ya mismo al mundo.

-Jimin, no te gustaría quedarte aquí? Conmigo, yo podría cuidarte mejor- comento la mujer

Quedarse en el palacio con la reina durante su embarazo? Pero y Jungkook, él quería estar con su esposo.

Negando levemente vio su ceño fruncido y suspirando se dirigió a ella.

-Quisiera pasar mis días en casa, con Jungkook tal vez semanas antes de mi parto podría venir aquí para que se sienta más seguro- comento el rubio con tranquilidad

La mujer asintió un tanto insatisfecha y viendolo irse bufó.
Aquel muchacho ahora mismo llevaba la vida del mismisimo futuro rey de la nación, esperaba que se cuidará como se debía o tendría problemas.

-Estoy tan feliz por usted mi rey- dijo kim emocionado al haber recibido la confirmación de lo que ya especulaban

Tras llegar al palacio kim dio el aviso a los demás para que así le cuidasen con mas rigurosidad que antes.

-Ya quiero decirselo a él...- susurro el rubio viendo a traves de la ventana

Jeon habia estado de viaje durante tres días y esperaba su regreso cuanto antes para darle la noticia.

Su milagro habia sido escuchado por los Dioses y estaba más que agradecido.

A la mañana siguiente levantandose para sus tareas de siempre observó el cuadro nuevo siendo puesto en la pared de la sala.

Era aquel cuadro pintado por el artista, el retrato de su boda, habia quedado sin duda espectacular.

Aunque claramente jeon no habia posado junto a él, aun así le daba credito al pintor por haberlos retratado a la perfección.

Sonriendo con suavidad escucho los pasos fuertes del alfa y viendo hacia el final del pasillo lo reconoció.

El castaño se acercó y sonriendole le beso deslizando así sus manos por su cuerpo.

-Te extrañé- admitió el castaño frotando su nariz con la del rubio

Un olor peculiar en Jimin le llamó la atención, en su esencia habian pequeños toques a leche.

Olfateando su cuello lo sintió con mas fuerza y viendolo notó sus mejillas rojizas.

-De verdad?- balbuceo jungkook al darse cuenta

-Estoy en cinta, alfa- susurro timidamente

Las mejillas del castaño se sonrojaron y abrazandolo con cuidado hizo que los pies del omega ya no tocasen el suelo.