Capitulo 2: Garp visita Foosha.

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Resumen:

L

a tristeza abunda.

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Garp estaba de pie en medio de la destrucción. Se paró en lo que queda de Foosha Village. Escuchó algo caer en el fondo, pero se quedó quieto. No quedaban aldeanos vivos. Encontró el pañuelo de Makino en las ruinas del Party Bar, junto con los lentes de Woop Slap. No tuvo el corazón para buscar sus cuerpos.

Caminó a través de los edificios destruidos con el corazón apesadumbrado. El resto de la isla estaba en la misma forma. Todo destruido, sin vida a la vista. Garp salió de las ruinas destruidas y se dirigió a lo que debería haber sido el bosque. Todo lo que quedó fueron los troncos carbonizados de los árboles. Caminó por el camino que solía ser familiar hasta la casa de Dadan, y cuando llegó, era solo una cáscara de lo que solía ser. Entró en el edificio, crujiendo peligrosamente bajo sus pies. Había cuerpos volados por todo el comedor principal. El culpable fue una bala de cañón que atravesó el techo y golpeó el centro de la habitación.

La bota de Garp golpeó algo y miró hacia abajo. Había una sola bola roja chamuscada rodando por el suelo. El rostro de Garp cayó, aún más ante la vista. Salió del edificio, sin tener la fortaleza para seguir buscando algo que nunca sucederá.

El anciano buscó en el bosque quemado algo que Dadan le contó en su última carta.

Se detuvo frente a un árbol, derribado por una explosión. Podía ver los restos de una casa del árbol. Vio algo en el suelo, a una buena distancia del árbol. Caminó hacia él y lo sacó de la ceniza. Fue un jolly roger. ASL delante de las tibias cruzadas.

Garp sintió que se le caían las lágrimas de los ojos, incapaz de reprimirlas. Se apoyó en un árbol quemado y abrazó la bandera con todo su valor. Una pobre imitación de los abrazos de su nieto y se sintió destrozado.

Lloró en medio de un bosque destruido, de luto por los nietos que crió, que no podra ver convertirse en adultos. Nunca los verá llegar a la adolescencia. No puedo verlos convertirse en los buenos hombres que él sabía que serían.

Lloró por lo que debería haber sido. Lloró por sus nietos.























"¡Capitán! ¡El barco del vicealmirante Garp fue avistado!".


Shanks gimió, con la mano en la cabeza. Tenía una resaca mortal y no la estaba disfrutando. Sin embargo, eso no impedirá que beba. Él inclinó la cabeza. ¿Garp esta aquí? Él nunca visita. Solo visita al anciano Barbablanca cuando quiere recordar los viejos tiempos. La única vez que Garo visitó a Shanks fue cuando descubrió que Shanks estuvo en Foosha Village durante un año. Shanks todavía puede sentir el dolor que le causó su puño.

Shanks gimió pero despidió a su tripulación.

"Déjalo subir. Escuchemos lo que tiene que decir".

Su tripulación asintió pero no se relajó. Seguía siendo de la Marina, por mucho que lo respetaran. Dejaron que su barco se acercara hasta que vieron una forma que volaba sobre el agua. Shanks sacudió la cabeza con alegría, nunca cambia.

El golpe en la cubierta lo alertó de quién había aterrizado. A Garp nunca le gusta hacer las cosas de la manera normal. Shanks iba a gritar un saludo cuando se detuvo y miró.

Garp se veía como una mierda, por decir lo menos. Su pelo era un nido de ratas. Su ropa no parecía haber sido lavada en una semana. Tenía bolsas pesadas debajo de los ojos y sus ojos estaban inyectados en sangre. Shanks nunca había visto a Garp así.

El mundo no te merece.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora