Pero se durmió.
Esa fue la cosa.
Christian no se preocupaba mucho por dormir, pero sabías que en realidad nunca se tiraba a la cama antes del amanecer y no importaba cuánto lo reprendieras por eso, lo volvería a hacer después de dos días, así que verlo desplomado entre tus piernas, con la cabeza Descansar pacíficamente en tu pecho te hizo sentir a la vez cálido y arrepentido. Después de todo, se quedó despierto porque su cerebro funciona mejor por la noche y lo ayudó con sus tareas.
Miraste hacia abajo, observando los rasgos de su rostro que estaba profundamente dormido. Sus brazos estaban tratando de seguir aferrándote. Su mejilla estaba aplastada contra tu pecho, no se había cortado el cabello, así que era obvio por qué cubría casi toda su cara si no lo apartabas. Tarareaste, finalmente renunciaste a intentar ver la película y te inclinaste hacia tu almohada grande y sofocante. Christian todavía acurrucado de forma segura en tus brazos. Nunca admitiría ante nadie que le gustaba ser la cucharita y nunca admitiría que duerme mejor cuando lo tocas.
Contuviste una sonrisa, aunque dejaste que floreciera en tu pecho mientras cerrabas los ojos. Christian era muy vulnerable en ese momento, algo que se negaba a mostrarle al mundo, pero para ser el que vea esto, debes haber estado loco esta mañana cuando intercambiaste palabras insignificantes con él por tus celos de adolescente (aunque él lo manejó todo). bueno, gracias a él por ser del tipo que no está tan enojado en primer lugar). Porque después de todo, no había ninguna razón para que estuvieras tan celoso de nadie de todos modos.
