Esto NO es la bella y la bestia

Capítulo 2: El elegido maldito

Narra Zamasu

Mientras el dormía, yo salí a vigilar. Subí a mi mirador y observé el bosque, iluminado por la luna. Allí me quedé hasta el amanecer, vigilando el bosque, para alejar a quienes pudieran hacerle daño. En cuanto el sol se hizo evidente, regrese pero el aun no había despertado. Era joven, y un buen descanso era justo lo que necesitaba. Perder la virginidad de esa manera era realmente agotador.

Mientras tanto, necesitaba tomar algo que me hiciera recuperar mis energías. Tome algunas hierbas, de la cuales sabía que contenían sustancias estimulante s como la cafeína y me hice un té

Noté que comenzaba a despertar, y comencé a preparar el desayuno. Agarre algunos huevos y tocino y los cocí en la sartén. El olor hizo que abriera los ojos

-Me duele todo... pero valió la pena- dijo el.

-No lo niegues, acepta que te gustó- le contesté, mientras tomaba una taza de té

-Y yo que no quera admitirlo- respondió mi prisionero - Eres el puto amo en esto. ¿Crees que me puedas ayudar a levantarme? Tengo hambre y eso huele bien-

-Si, por supuesto- dije. Me levanté y con cierta dificultad debido al cansancio, me apoye sobre mi mano derecha para ponerme a su altura. Aquello fue algo doloroso, y no pude evitar quejarme un poco. Sus ojos me miraron con lástima, pero intentaba mantener su expresión neutral. Me sentí un tanto incómodo, y para romper el silencio dije:

-De hecho, esa comida es para ti-

-¿En serio?- pregunto en voz baja, como incómodo, mientras tomaba mi mano. -gracias- agregó

Lo ayude a a acomodarse en la silla, y comenzó a comer. Yo me volví a sentar, pensativo. Había secuestrado a muchos, pero, por alguna razón, sentía que él era especial.Negué con la cabeza,era evidente que por la simple razón de que prefería a los varones humanos solía pensar eso cada vez que secuestraba a uno.

-¿No vas a comer?- me pregunto Trunks, sacándome de mis pensamientos- necesitas mantener ese gran cuerpo- dijo en tono pícaro.

-No tengo hambre- le respondí con burla. -Los dioses no necesitamos comer tan seguido- y aquello era verdad

-Menuda forma de decir que le metiste algo extraño al té- respondió, y no pude evitar reír un poco. El también sonrió de esa forma que me volvía loco

-No lo había pensando de esa manera- admití

Iba a decir algo más, pero su expresión cambió rápidamente a una de nauseas.

-no te muevas demasiado- le alerté

-Que hiciste- dijo con un hilo de voz- no me digas que ayer.. con esa pomada- se detuvo, shockeado - estoy embarazado- dijo hiperventilando y tocando su vientre

-Así es - confirmé - estoy sinceramente sorprendido, eres de los pocos que se da cuenta tan pronto-

-Pero, por qué lo haces- pregunto Trunks, intentando recuperar la compostura.

-No puedo decirtelo ahora, es demasiado estrés- dije, tocando su estomago con suavidad-

El respiró para calmarse, y unas lágrimas salieron de sus ojos

-No se que pensar- admitió- voy a acostarme un rato-

Se levantó y se acostó dándome la espalda. Escuché su llanto silencioso. Aquello pasaba siempre al enterarse de su condición, y eso me habia desensibilizado