Una historia de Amor

RECUERDOS

Se encontraban juntos, acurrucados a la sombra de los árboles, Naruto abrazaba a Hinata como si tuviera miedo a que desapareciera, olía su cabello y acariciaba sus mejillas con sus manos, besaba su frente y nariz y deslizaba su nariz hasta su cuello para sentir su olor... -Mmm Hinata como no pude darme cuenta, estoy completamente enamorado de ti- le decía al oído provocándole a Hinata que se erizara su piel -Comenzó a besarla en el cuello y entrelazaba sus dedos en el sedoso cabello de Hinata-
Hinata: Aahhhhh Naruto kun qué haces -le preguntó nerviosa-
Naruto: quiero sentirte mía mi amor, deseo inhalar cada centímetro de tu piel -le dice mientras se acerca a sus labios- deseo estar contigo y ya no creo poder contenerme -le dice excitado-
Hinata: Amor mío yo también quiero estar contigo plenamente, quiero ser tuya pero...
Naruto: qué pasa Hinata no estás segura? O es que vamos muy rápido -preocupado-
Hinata: A a amor es que... tú eres mi primer novio -le dice avergonzada- nunca he estado con nadie
Naruto se queda perplejo al escuchar semejante noticia de su novia... aunque no le extrañaba Hinata no es del tipo de mujer de estar con cualquiera -Amor entonces eres...- dijo sin terminar la frase
Hinata: Si Naruto kun soy virgen, por favor no te rías de mi -le suplica avergonzada bajando la mirada-
Naruto: Hinata mírame -le pide mientras su mano le toma de la barbilla- cariño estar con una persona es cierto que es placentero, excitante, incluso divertido pero esperar a estar con una persona especial, la persona que amas es maravilloso -le dice con una sonrisa-
Hinata: Na Na Naruto kun nunca pensé que me dirías algo así, en tu lugar cualquier hombre se burlaría, soy una mujer completamente adulta de 20 años y aún mantengo mi castidad
Naruto: Hinata se muy bien que por mucho tiempo actúe como un tonto pero más tonto es pensar que es un error esperar a la persona indicada y te juro que adoraría ser el indicado, solo cuando tú estés lista sucederá -le dice mientras se acerca y le da un beso en la frente símbolo de respeto y amor puro-
Hinata: Amor yo quiero que sea contigo, cada día he soñado con una relación contigo desde que éramos niños -le dice-
Naruto: Si recuerdo que tu cara se ponía roja cuando hablaba contigo y muchas veces te desmayabas, era tan tonto que no me daba cuenta -le dice sonriendo-
Hinata: Yo también recuerdo que una vez en una misión Kiba kun y tú estaban atados, y cuando logré encontrarlos me puse tan cerca de ti que me desmaye, Jajaj era muy insegura, quiero cambiar esa parte de mi.
Naruto: No quiero que cambies nada, si eres perfecta así como eres.
Hinata: Naruto kun quiero confesarte algo -le dice con una sonrisa pícara- No sé si recuerdas una misión que hicimos juntos que le contabas a Kiba kun sobre una mujer hermosa que danzaba en el lago de una cascada.
Naruto: Si mi amor, qué pasa con eso? -le pregunta extrañado-
Hinata se sonríe y le dice -esa mujer era yo-
Naruto se queda paralizado, no lo podía creer, tanto tiempo soñando con esa mujer y era la persona que tenía justo a su lado -Con razón estoy tan enamorado, Me has hechizado cariño- le dice mientras se muerde el labio inferior, se besan y se recuestan a la sombra de los árboles quedándose dormidos.
Había pasado buen tiempo y estaba comenzando a anochecer, Naruto se despierta y ve que ha pasado mucho tiempo desde que se quedaron dormidos -Mi amor ya es muy tarde, tu padre me va a matar- la despierta preocupado
Hinata: A a a amor qué hora es? -le pregunta media dormida-
Naruto: Es tardísimo -exaltado-
Hinata: Bueno vámonos si nos apuramos podremos llegar -le dice mientras bosteza-
Comienzan a caminar mientras se va volviendo más oscuro y después de un rato logran llegar a la aldea. -Amor falta mucho para llegar a tu casa- dice Naruto preocupado por la reacción de Hiashi.
Naruto: quieres pasar a mi departamento está aquí al doblar y tomemos algo de agua para seguir y llevarte a tu casa
Hinata aciente con la cabeza y van camino al apartamento de Naruto, este lo había limpiado y recogido por si Hinata pasaba un día no lo viera sucio. -Pasa amor, quieres tomar algo- Le pregunta Naruto.
Hinata estaba adormilada, estaba muy cansada del viaje.
Naruto: Amor te pasa algo, te sientes mal? 
Hinata: No amor es que estoy cansada y tengo sueño. Crees que me pueda quedar contigo -le dice un poco avergonzada-
Naruto se sonroja puesto que no se esperaba la propuesta -He he he si claroo- le responde nervioso
Hinata: tienes un teléfono por aquí, para llamar a mi padre y decirle que me quedo contigo
Naruto: Si toma aquí está -le da el teléfono-
Hinata llama a su padre para decirle que no se preocupara que estaba bien y que se quedaba en casa de Naruto ya que era muy oscuro y no quería correr el riesgo de comenzar la guerra en ese momento puesto que Madara estaba asechando la aldea. Hiashi es un hombre comprensivo y sabe que los tiempos en los que está viviendo no son iguales a los de cuando era joven así que no tuvo problemas a la petición de su hija.
Naruto se encontraba algo nervioso, quien iba a decir que su novia le pediría quedarse con él esa misma noche.
Naruto: A a amor quieres tomar una ducha? -le pregunta-
Hinata: Si cariño sería genial.
Naruto: Te voy a dar una polera mía para que te pongas cuando termines de bañarte y un par de calzones
Hinata: Está bien amor -sonrojada-
Naruto le prepara el baño a su novia para que se relaje mientras él espera en la cocina preparando la cena (ramen).
Hinata al salir del baño le dice -ya termine amor puedes bañarte-
Naruto: Voy amor estoy terminannn... do de ca len tar esto.... -Volteándose- -mira a Hinata de arriba a bajo y nota lo sexy que se ve con su polera puesta.
Hinata: Te toca bañarte amor -le dice con voz juguetona-
Naruto entra al baño para poder enfriar su cuerpo más que para otra cosa... estaba realmente excitado. Logra terminar su baño y sale -Hinataaa ya termine- Hinata lo mira de arriba a abajo ya que este lucia un escultural cuerpo, traía solo unos shorts de dormir y su pecho descubierto aún un poco mojado, unos abdominales de infarto y algunas cicatrices por los duros entrenamientos, una espalda ancha y unos brazos bien marcados.
Hinata observaba a su novio diciéndose a ella misma -Dios Naruto kun es bien apuesto- -es mi novio- Se decía una y otra vez
Naruto: Nos sentamos a comer corazón -le dice con una sonrisa
Ambos se sientan a comer mientras charlaban y reían recordando momentos que habían vivido juntos hasta que se disponen a ir a acostarse para descansar del viaje.