Capítulo nueve: en mi constelación

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Había atardecido apenas un poco, el cielo estaba llenándose de nubes y estás se pintaban de tonos rojizos y anaranjados debido al atardecer. Lyra se encontraba terminando de lavar los trastes que Dany y ella habían ocupado en la comida, el menor estaba dormido en el sofá luego de hacer la tarea.

Al terminar de secarse las manos Lyra tomo su celular y se percató de un mensaje de Fred.

Fredo:

• ¿Puedes venir a mi casa?
  Tengo algo que contarte

Lyra medito por un momento, miro a su pequeño hermano dormido.

Fredo:

• No puedo ir ahora, Dany se durmió y no puedo dejarlo solo

• Está bien, será después

• Tal vez pueda ir cuando lleguen mis padres

• Entonces te espero

Lyra bloqueo su teléfono y siguió viendo la televisión, cambiaba los canales constantemente buscando algo que la entretubiese en ese rato que pasaría hasta la llegada de sus padres. Finalmente llegó su madre a casa, siendo a penas las ocho de la noche.

- Ya llegué - hablo desde la entrada - ¿Como están mis niños? - pregunto alegremente llegando al sofá.

- Bien, Dany acabo la tarea y se quedó dormido - comento Lyra haciendo un lugar para que su madre se sentará.

- ¿Comió antes de dormirse? - Lyra asintió y se recargo en el hombro de su madre.

- ¿Me das permiso de ir a la casa de Fred?.

- ¿No estaban peleados? - le pregunto mirándola algo preocupada.

- Hablamos las cosas y lo arreglamos todo - la menor sonrió recordando la charla que tuvo con Fred en la cafetería.

- Puedes ir, pero regresa antes de las diez - Lyra se paró rápidamente y corrió a su cuarto para buscar una sudadera negra con gorro.

- Regreso al rato - se despidió saliendo alegremente de casa, brincando escalón por escalón esos tres niveles que se encontraban en la entrada de su casa.

Camino rodeando la cerca y atravesó el jardín de la casa de Fred, en ese momento los árboles y plantas que habían se veían marchitos, sin embargo solo era por el invierno, en primavera esas plantas se verían completamente hermosas y una de las actividades favoritas de Lyra era cuidar de ellas junto con Fred y su padre. Al llegar a la puerta arreglo el cuello de su sudadera y tocó el timbre.

- Lyra - exclamó Kurt - Que bueno verte.

- Buenas noches - saludo Lyra amablemente.

- Pasa, Fred está en su cuarto - la castaña asintió entrando a la casa, cruzo la estancia que tenía más de un año que no había visto, memorias de ella con Fred en ese sillón jugando videojuegos, los viernes en los que jugaban Monopoly y comían pizza.

Movió un poco la cabeza despejando su mente de esos recuerdos y subió las escaleras hasta el segundo piso, la puerta del fondo, aquella puerta de madera blanca con algunos stickers de equipos de básquetbol y un par de manchas de algunos otros que el tiempo se encargo de desprender.

- Toc toc - dijo Lyra al mismo tiempo que tocaba la puerta.

- Pasa - respondió el divertido - Fred guardo algunas cosas debajo de la cama, y encontré esto - le mostró un telescopio color celeste, un poco más pequeño que el blanco que tenía en casa, en el costado tenía una estampa de la vía láctea.

- Fue el primer telescopio que le compraron a Fred, con el vimos por primera vez las estrellas y esa primera noche logramos ver a Venus - dijo Lyra tomando entre sus manos a el objeto, pasando sus dedos por el ahora desteñido sticker.

- Lo intenté - hablo el chico llamando la atención de Lyra - Pero mi galaxia está muy lejos de este lugar, no se puede ver con ese objeto - suspiro sentándose en l asilla frente a su escritorio.

- ¿Ibas a contarme sobre tu planeta? - Fred asintió - Tal vez con un mapa - sugirió Lyra.

- ¿Tienes mapas de las estrellas? - pregunto está vez Fred.

- Si, mira - Lyra prendió su teléfono y busco una imagen de La vía láctea y Andrómeda - Está es la galaxia vecina, aquí le decimos Andrómeda.

- Bien, mi planeta está... - Fred amplio la imagen - Casi al centro de la  constelación - apunto un lugar muy cercano al centro.

- ¿Como es? - Lyra se veía bastante emocionada con forme avanzaba el relato.

- Mmm - pensó por un momento la forma correcta para describirle su planeta de origen de la mejor manera - El cielo no es como el de aquí, tu cielo es azul, el mío es completamente naranja, las nubes se ven amarillas y la tierra siempre es negra, nuestras casas son de formas diferentes, los edificios son todos de metal, son blancos y con formas circulares.

- ¿Tienen plantas o animales?.

- Tenemos algo parecido a los árboles, pero estos se mueven desenterrando sus raíces para busar agua... Y tenemos mascotas como las de ustedes, pero se parecen a lo que ustedes llaman escarabajos.

- Ya veo - Lyra estaba tratando de imaginar todo lo que Fred le contaba - ¿Tenían océano?

- Si, pero el agua no era azul, era un poco menos naranja que el cielo, pero no nos podíamos acercar a la orilla.

- ¿Osea que no pueden nadar? - pregunto ella casi horrorizada.

- No, en las aguas hay un ainfestacion de algo que llamamos Kritesl, son criaturas como calamares, bastante grandes - Fred intentaba comparar con cosas que Lyra conociera - Son paracitos, si te tocan terminarían entrando a tu mente y controlarían tu cuerpo.

- Que miedo - un escalofrío le recorrió la espalda - Cerca de aquí no hay mar, pero podemos ir y nadar, si nos quedamos cerca de la orilla no pasa nada.

- No se nadar, nadie de mi especie sabe. Nuestra composición nos hace demasiado pesados para flotar - agrego - Pero supongo que ahora que cuando tenga un cuerpo humano podré nadar.

- ¿Como que tendrás un cuerpo humano?.

- Si no regreso a mi forma después de dos meses, mi cuerpo empezará a cambiar y mi transformación se hará permanente.

- ¿Por qué no me lo dijiste antes? - inquirio Lyra casi en un grito.

- Hasta hace apenas un día no querías ni hablarme, ¿Como esperabas que te contara algo más sobre mi? - repuso.

- Buen punto - Lyra se recostó en la cama golpeando su cabeza contra algo, al tomarlo se dio cuenta que era un diario.

- Es de Fred, te lo quería entregar antes, pero quise leerlo primero antes de dártelo... Para conocer más de el y de la vida que debo continuar en su cuerpo, espero no te moleste - Lyra negó tomando el diario más cerca de su cuerpo.

- ¿Por qué escapaste? - le pregunto de nuevo haciendo que Fred se pusiera serio de golpe.

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⏰ Última actualización: Jun 04, 2023 ⏰

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