Coralaine había salvado a todos. Había salvado a sus padres, a los tres niños... Pero no tomo en cuenta que la otra madre tenía a un cuarto niño en sus golosas garras. Este niño esperó, esperó, esperó, y esperó... pero nunca nadie llego.
La otra mad...
-Tenemos información de una casa abandonada a las afueras de musufatu, en la cual según los hogareños se escuchan ruidos extraños
-¿Qué tipo de ruidos? -pregunto mont Lady con su conciencia sucia
-No ese tipo de ruidos-dijo Nezu con una sonrisa, pero con un tic en el ojo-hablo de sonidos infantiles.
Todos se sorprendieron y pusieron más atención.
-Al parecer es un niño,se han escuchado gritos y llantos provenientes de la casa-dijo Nezu preocupando a los presentes-creo que puede ser víctima de abuso de sus padres pero el casa abandonada preocupa. Así que os pido que vayan.
-Bien iremos ahora-dijeron inclinándose y yendose con la idea del niño en sus cabezas
(...)
El pequeño niño de cabello verde estaba triste, se sentía solo, a lo qué tomo su peluche y volvió a intentar irse de esa casa qué sólo le trajo desgracia.
Este intentaba abrir la puerta o traspasar la pared, pero esta era más sólida qué cualquier cosa que hubiera visto, este empezo a asotarse contrá de la puerta, la cual no se inmutaba, parecía que le gustaba verlo sufrir, a lo qué se propuso a llorar en la puerta mientras la golpeaba y gritaba pidiendo ayuda.
Al día siguiente en UA
Aizawa sensei estaba en su salón dando las clases comunes, nadie le prestaba atención, esto lo molestaba pero al intentar repartir orden la campana sonó, a lo, qué todo el mundo se fue dejándolo sólito, así que se dirijio a su misión para no parecer un hombre sin compañia.
En la misión de reconocimiento estaban Present Mic, Aizawa,Mirko y Ryuko, estos durante el camino hablaron de temas variados como el clima, la sociedad, sus debuts, el niño, libros y sobre cómo Aizawa lograba dormir en un salón de clases hasta que al fin llegaron dejando a Aizawa al fin.
Estos al bajarse vieron lo que era una casa efectivamente abandonada, con un tono rosa grisaseo qué espantaba y el jardín muerto.
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Estos al principio no querían entrar, recordaron qué la curiosidad mató al gato pero si ya estaba muerto no había mucho que hacer así que entraron.
