Betsu no sekai kara kita kurutta eiyū

parte 4

Sin dinero y en quiebra, me encuentro en un mundo desconocido, totalmente ajeno a todo. ¿Cómo diablos llegué a parar aquí? ¡Grito de frustración! Todo, absolutamente todo, es culpa de esa maldita diosa. Si alguna vez se presenta la oportunidad de vengarme, no dudaré en tomarla.

Mientras Kaito Kimura se lamentaba, algo llamó su atención. Una multitud se aglomeraba frente a una mesa donde se encontraban dos nobles. Por pura curiosidad, Kaito se acercó para ver qué estaba sucediendo. Fue entonces cuando se percató de que estaban en medio de un juego de cartas. "¿Esto es póker?" pensó para sí. "Definitivamente es una partida de póker de mesa". Pero algo más captó su atención: el adversario del anciano estaba haciendo trampas descaradamente. Las trampas eran evidentes para todos.

En ese momento, escuchó un murmullo entre los espectadores. "Son dos nobles que han apostado muchas tierras. Es Lord Bartran y el Conde Clauder. Ese bastardo se está aprovechando del anciano. No podemos hacer nada al respecto".

"¿Acaso quieres morir? Todos saben que el Conde Clauder está senil y ni siquiera se da cuenta de lo que sucede a su alrededor", dijo uno de los presentes. Al escuchar esos rumores, Kaito vio una oportunidad. Decidió interrumpir deliberadamente el juego. "¡Oh, querido padre! Te he estado buscando por todas partes", habló de forma exagerada. "Vengo a llevarte de vuelta a casa".

"¿Quién eres tú?", cuestionó el noble obeso, mostrando su descontento. "Jaaaaaa, ¿por qué te diriges así hacia mi persona? ¿Quieres morir, bastardo?" amenazó Kaito. El ambiente se volvió tenso ante sus palabras. "¿Qué está haciendo? ¿Está amenazando al Barón Bartran? Maldito plebeyo, ¿te atreves a dirigirte de ese modo a un noble?", comentaron entre ellos.

Kaito, mostrando desinterés mientras se rascaba la oreja, contradijo: "Yo me refiero a la basura como tal". La cara del noble se deformó de ira. "¡Ya es suficiente! ¡Guardias, hagan que este bastardo se disculpe y luego desháganse de él y den sus restos a los perros!".

"Wow, espera, relájate", intervino Kaito mientras abrazaba al anciano. "¿Planeas ejecutar al hijo de un noble? Eso podría traerte muchos problemas, ¿no lo crees?" exclamó con seguridad. "Espera, ¿dices que el Conde Clauder es tu padre?", preguntó sorprendido.

"Así es, no me refiero a él como mi padre biológico. Soy adoptado", inventó rápidamente una historia. "En serio, no puedo creer eso sin más pruebas", respondió el noble, dejando a todos desilusionados. "Oye, Clauder, ¿ese bastardo es realmente tu hijo?", preguntó Kaito empezó a sudar frío ante la situación. "A quién dijo que yo era su hijo de sangre. Soy adoptado", respondió tratando de mantener la compostura.

"En serio, no puedo aceptar eso sin más pruebas", replicó el noble, dejando a todos desilusionados. Kaito sintió la presión aumentar. "Bien, oye, criada, responde: ¿es o no es el hijo de Clauder?", preguntó con determinación, esperando que la joven siguiera el juego.

La sirvienta miró a Kaito, juntó las manos y suplicó con la mirada que siguiera el juego. Después de un profundo suspiro, finalmente respondió: "Sí, es cierto, el joven amo es hijo de mi señor Clauder". Kaito sonrió victoriosamente, mostrando una expresión falsa pero brillante. "Ahí lo tienes", dijo triunfante. "Así que todas las apuestas quedan canceladas. Ahora me llevaré a mi padre".

"Pero espera, bastardo", intervino el noble imponente. "Tu padre apostó varias tierras, ¿y planeas llevártelo sin resolver cuentas?". El noble miraba desafiante a Kaito, esperando una respuesta.

"Recuerda esto, estábamos en medio de una partida", respondió Kaito con una sonrisa falsa pero decidida. "Entonces, ¿qué harás?", preguntó el noble retadoramente.

"¿Esooooo? ¿Debiste haberlo dicho antes? Qué tal una partida más", respondió Kaito con una sonrisa fingida. "Dado que mi padre está indispuesto, tomaré su lugar. ¿No hay ningún problema con eso, verdad?".

"¿Qué está diciendo este chico? ¿Qué pasó con tu valentía? ¿Ya te arrepentiste?", dijo el noble, dejándose provocar deliberadamente por Kaito.

Continuará...