𝐀𝐦𝐨𝐫 𝐞𝐧 𝐭𝐢𝐞𝐦𝐩𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐢𝐧𝐬𝐭𝐢𝐭𝐮𝐭𝐨 || 𝗢𝗗𝗘𝗛𝗔𝗡 ||

• 𝐂𝐚𝐩. 𝐈 •

(Hyeonjun / mañana )

Era temprano por la mañana, Hyeongjun estaba realmente cómodo, puedo decir que la cama lo estaba abrazando, para él era tan acogedor, su cuarto siendo iluminado por pocos rayos de sol ya que a penas estaba amaneciendo, perfecto para se quedara recostado todo el día, hasta que escuchó el molesto ruido de su alarma.

Apagó a duras penas aquel reloj, su brazo era tan pesado como para poder levantarlo, lentamente fué abriendo sus ojos y se sentó en su cama para ver la hora del reloj, este marcaba las 5:30 a.m, solo pensó en cuan tedioso es vivir al otro lado de la ciudad.

Tomó una ducha de 5 minutos para después cambiarse, es verano así que tomó una playera de manga corta color turquesa y unos pantalones negros, escogió los primeros pares de tenis que encontró y se los puso, a pesar de haberse puesto lo primero que vió tardo un poco más de lo habitual por lo cansado que estaba.

Miró el reloj y se exaltó, eran las 6:00 a.m, ni siquiera desayunó, salió corriendo y cerró la puerta principal de la casa.

Corrió lo más rápido posible a la estación del metro, llegó a tiempo.

- ¡6:10! - Celebró internamente y pagó su pasaje con la tarjeta, subió y para su sorpresa había un asiento solo, a pesar de que sea temprano por la mañana es difícil encontrar un espacio.

Dudó en si sentarse en aquel asiento ya que había dos personas a los costados y sería algo incómodo ya que regularmente se duerme durante el viaje.

Al final lo hizo, estaba agotado y quería verse realmente bien en su primer día en el instituto.

Prometió no quedarse dormido pero su cuerpo decía otra cosa, poco a poco sus ojos se fueron cerrando hasta al final quedarse completamente dormido.
No cayó en cuenta de que ya había pasado una hora y el viaje había terminado.

- Disculpe joven - Escuchó una voz suave, abrió   sus ojos algo exaltado al no ver a ninguna persona en el metro además de aquella mujer.

- Está es la última estación, ¿Es la suya? -
Miró a todos lados buscando en que estación estaba, para su suerte no era en la que debería de estar pero no quería quedar en ridiculo.

- Sí, está es la mía, gracias por avisarme - Se levantó e hizo una reverencia en forma de agradecimiento, salió casi corriendo de la pena y pudo ver su reflejo en una de las ventanas, estaba totalmente rojo.

Miró el reloj y eran las 7:15 a.m, por suerte conoce esta ciudad como a la palma de su mano así que sabía para donde ir, corrió lo más rápido a la universidad, no quería ser un impuntal.

Corrió y corrió durante más de 15 minutos hasta que por fin llegó, miró su reloj para ver la hora, 7:40, todavía faltaban 20 minutos para el inicio de las clases, después de unos minutos sintió unas miradas juzgadoras y volteó a ver para confirmar, efectivamente lo estaban juzgando con la mirada, salió rápidamente de ahí y buscó el baño.

- Este instituto es demasiado grande - Pensó mientras recorría los pasillos rápidamente intentando pasar desapercibido, encontró los baños y entró a ellos azotando bruscamente las puertas, no pensó que fueran tan fáciles de abrir, era un total desastre.

Solo se peinó un poco y se esparció un poco de perfume que traía en su mochila, salió del baño y se puso a buscar su respectivo salón, el día anterior le habían mandado el comunicado de sus áreas de estudio, pero todo era tan grande que por poco se perdía.

Llegó más rápido de lo esperado y se sentó en la primer mesa, como todos los años, hasta el frente, no le gusta el desorden que se arma atrás, suena absurdo que universitarios aún lo hagan pero hasta cierto punto es real, además, no alcanza a ver estando hasta atrás.

(Seungmin / mañana )

- Seungmin - Escuchó su nombre levemente, pero decidió ignorarlo para seguir durmiendo.

- Seungmin... - Pudo captar esa voz por segunda vez y ahora con una pequeña sacudida de hombros a lo que solo respondió con un "mmmmh..."

- ¡OH SEUNGMIN LEVANTATE YA! - Aturdido por el grito se levantó.

- ¿QUÉ PASA? -Desconcertado miró a su mamá, había pensado que era su hermano. se retractó inmediatamente por su forma de expresión.

- QUIERO DECIR -Fué interrumpido por su madre.

-¡¿CÓMO TE ATREVES A CONTESTARME DE ESA MANERA?! MIRA LA HORA SON LAS 7:30, LEVANTATE - Salió completamente ofendida del cuarto de su querido hijo.

Seungmin se bañó lo más rápido que pudo, agarró lo primero que vió, pero, para ser lo que tuvo al alcance era realmente bueno, ese chico tiene un gusto muy bueno para la moda, se puso un poco de perfume y arregló su cabello.
En seguida bajó a la cocina buscando a su madre, al encontrarla preparando un desayuno para su hermano la abrazó.

- ¿Qué quieres? - Molesta lo apartó y rodó los ojos.

- Vamos mamá no te enojes, pensé que eras Min - Rogó a su madre para que no se molestara con él, estos dos parecían niños.

- Como digas - Simplemente lo ignoró.

- Vamos, eres la mejor madre ¿Lo sabes? - Siguió insistiendo.

- No te puedo odiar Seungmin, eres realmente lindo, pero ya ve a la universidad - Voltea a verlo y le regala una sonrisa.

- Te amo mamá, ya me voy - Sonríe a punto de irse.

- Espera - Lo detiene y lo abraza - Cuídate, recuerda que estoy muy orgullosa de tí - El chico corresponde al abrazo hasta que su madre lo suelta y hace una señal de que es hora de que se vaya.

- Byee, te amo - Mencionó Seungmin antes de salir.

- ¡No olvides desayunar! - Sonríe mientras vió por la ventana a su hijo alejarse lentamente.
- Creo que ya sé quien es el favorito - Dijo el hermano menor, Min.

- No digas eso cielo - Rió la mamá.

( Seungmin )

Seungmin fué de lo más relajado al instituto ya que le queda a tan solo 10 minutos caminando, ni siquiera se percató de la hora, va tarareando una de sus canciones favoritas mientras la escucha en sus audífonos.
Este llegó de lo más confiado al instituto, conocía ese lugar gracias a que era amigo de varios estudiantes ahí, no se le dificultó encontrar su aula.

- Buenas tardes señor Oh, ¿Qué tal su siesta? - Escuchó Seungmin proveniente de una voz un tanto familiar haciendo que levante la mirada al llegar al salón, su profesor lo miraba de una manera un tanto burlona - Tome asiento, por favor - a Seung le dió algo de vergüenza, por alguna razón un recuerdo vino a él y se quedó helado en la entrada del salón.

- ¿No me ha escuchado? - Dijo el profesor en un tono algo imponente.

- Ah, sí, una disculpa - Exclamó Seungmin haciendo una reverencia por su poca educación, mientras sus compañeros reían de la situación .

El chico buscó asientos con la mirada pero el único disponible era uno ubicado hasta el frente del salón, donde se encontraba un pelinegro mirando la ventana, Seung es una persona demasiado social por lo cuál ya conocía a casi todas las personas del salón, pero a ese chico no lo reconocía de ninguna parte, para él era una nueva oportunidad de amistad así que feliz se acerca.

Dejó sus cosas y se sentó mientras el profesor empezaba a hablar sobre algo que a este le importaba en lo más mínimo, solo quería hablar con aquel misterioso chico que miraba la ventana.

- ¡Hola! Mi nombre es Seungmin - Dijo alegre y feliz mostrando su mano en señal de saludo.

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.•º Este es mi primer proyecto haciendo un fanfic, me sería de mucha ayuda que me dieran su sincera opinión acerca de él o algunas recomendaciones ya que no soy experto en esto, muchas gracias por tomarse el tiempo de leerlo ¡Espero que les sea de su agrado! º•.

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¡Esto a penas comienza!

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