𝐧𝐢𝐠𝐡𝐭

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─ Si hubiera sabido que la película iba a terminar de esa forma, me hubiera ahorrado todo lo que gasté esta noche.

─ Jamás había visto una película tan mierda en mi vida.

Silencio, solo aquello reinaba fuera del cine en el que nos encontrábamos. Tanto Jiwoong como yo estábamos enfadados con la película que vimos; jamás pensamos en que terminaría de esa manera. Fue un total desperdicio y no exagero.

Él se quedó pensando y noté como su rostro se volvía más rojo sin siquiera hacer algo. Al principio pensé que se trataba por el enojo del filme, pero lo descarté ya que él no era de los que se enfadaban por algo poco importante.

Luego pensé que sería por el café que bebía, pero ya se había enfriado hace rato; no sabía a que se debía. Quise reír ante su típica cara pensativa que cargaba, sus expresiones eran divertidas.

─ ¿Jiwoong? ─solté rompiendo el silencio, sacudiendo mi mano sobre su rostro.

─ Matthew... ─llamó cuando salió de sus pensamientos hasta que hice un sonidito para afirmar que lo escuchaba.─ ¿Vamos a mi casa?

─ ¿Estás seguro? Siempre vamos a la mía...

Estaba algo sorprendido, ya que siempre íbamos a mi casa luego de una salida, pero él empezó a asentir dandome una sonrisa.

─ Si, estoy seguro.

─ Entonces vamos.

Tras un recorrido de media hora en el que hablamos de la película y sus detalles tontos, Jiwoong condujo hasta su casa en esa hermosa camioneta negra que tanto adoraba.

Llevábamos alrededor de cinco meses saliendo y siempre todos nuestros encuentros terminaban en mi casa viendo alguna serie hasta caer dormidos en el gran sofá.

Pero hoy era distinto. Por alguna razón todo se percibía más extraño de lo usual, con la diferencia de que se sentía bien. Jiwoong estaba emocionado sin razón aparente, no se notaba mucho pero si lograba reconocer la 'alegría' en su mirada.

Cuando se estacionó en su cochera y salimos del auto, vi su apartamento totalmente oscuro; al parecer nadie se encontraba dentro, ni siquiera su hermano mayor.

Entramos y dejó las llaves en la mesa, pero aún así no encendió luz alguna. Tomó mi mano y me llevó a su habitación sin decir nada, dejándome más sorprendido.

─ ¿Qué sucede? ─pregunté al ver como se dirigía a otro lugar, mientras yo no sabía que hacer.

─ Voy al baño. Si quieres siéntate en la cama. ─comentó con voz baja.

Antes de salir por la puerta encendió una lámpara que brindaba luz roja. Era inusual, pero no dije nada. Jamás había entrado a su casa, así que no sabía como vivía él en realidad.

Por lo poco que vi, era un apartamento pequeño pero elegante. Todo se veía muy moderno; las sábanas blancas y las paredes grises daban el toque perfecto para la sutileza. Simple pero encantador, al igual que Jiwoong.

Y hablando de él, Jiwoong entró por la puerta dejándome babeando. Tenía la camisa abierta, mostrando su pecho trabajado, el cual abrazaba todos los días y su piel húmeda que brillaba con la luz de la habitación.

─ ¿Quieres dormir?

Estaba inmóvil, no sabía que responder. Me miraba y yo ni cerrar la boca podía por su semejante belleza. ¿Lo hacía para molestarme?

─ Acuéstate, Matthew.

Obedecí como nunca antes y no supe porque. Mi cuerpo actuó por su propia cuenta. Estaba perdido ante su presencia.

Iba a preguntar pero una oleada de calor me cubrió. Su cuerpo estaba sobre el mío, con los brazos a los lados de mi cabeza, volviéndome prisionero debajo suyo.

Seguía sin reaccionar; sin embargo él iba acercándose a mi oído, respirando y besando. Fue bajando a mi cuello y yo solo podía cerrar los ojos mientras mis latidos se aceleraban.

─ No sabes todo lo que esperé para que llegara este momento. Nunca podía hacerlo por culpa de tu hermana.

─ ¿Por eso me pediste venir hoy aquí?

─ Si no lo hacía nunca hubiera podido probarte como estoy haciendo ahora.

Besó mis labios y comenzó a quitarme la ropa con rapidez. Definitivamente no esperaba nada de esto. No sabía que hacer, jamás había experimentado esto con alguien.

─ Jiwoong...no sé qué hacer.

Me miró, sonrió de lado y se acercó a mi oreja a la par que tocaba mi zona baja. Moldeó mi muslo a su gusto y yo me dedicaba a soltar sonidos obscenos que nunca en mi vida hice frente a una persona.

─ No te preocupes, solo déjate llevar

Y prosiguió con lo suyo, tocando todo de mi así como yo tocaba todo de él en aquella noche oscura.

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Me había olvidado de subirlo, fue gracias a una personita que me hizo recordar.
Enfin, gracias por leer <3

𝐎𝐍𝐄𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 ✻ 𝐦𝐚𝐭𝐭𝐰𝐨𝐨𝐧𝐠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora