Desde que tengo memoria he tenido heridas, heridas que siempre curé por mi cuenta, eran de todo tipo, leves, no la gran cosa pero había otras que eran graves, dolían mucho, de todas ellas me ocupé yo, pensando que las había curado bien.
Pero como cuando una persona pierde una extremidad, sintiendo dolor aunque esta ya no está, en mi caso son las cicatrices fantasmas que curé, pero siguen doliendo, pensé que se habían curado por completo, quizás las curé mal, después de todo lo hice todo por mi cuenta, sin que nadie pudiera supervisar.
Y no es porque nadie no haya querido, es porque no doy la oportunidad de que lo hagan, siempre que quiero hacerlo no puedo, las heridas ya no están por fuera, por dentro continúan pero no quiero que tengan que acceder tan profundo en mí para curar algo que todo este tiempo acostumbré a cargar.
Aún así anhelo que alguien me cure, alguien que vea la profundidad de la herida, que se de cuenta que tiene que tomar su tiempo para cuidarla, paso a paso, después de todo, todas las heridas graves fueron las ocultas, pero me da miedo, ¿ven? Ni yo soy capaz de entender que quiero, pero creo que "necesito" y "quiero" cosas distintas.
Me da miedo que la pomada y el alcohol en la herida arda, porque lo hará, me he acostumbrado a tenerlas tal cual están por más de una década, sin embargo eso es lo que no quiero que pase pero necesito, después de tanto tiempo, las cicatrices fantasma facturas cobran.
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✒Cαrtαs de un ıncomprendıdo corαzón ❦꧂
PoesíaDonde simplemente público escritos sobre mis sentimientos, nada más, sentimientos que se sitúan en el fondo de mi corazón, que solo puedo expresar escribiendo, de antemano disculpen faltas ortográficas.
