Te Perdono 💔【NamJin】【Jimsu】

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Había pasado dos semanas desde la pelea que tuvo con Jungkook, lamentablemente aquella discusión no solo les afectó a ellos sino que también recayó sobre sus hijo. Yoongi no entendía por qué su papá Jin ya no quería llevarlo a la casa de su "novio" se sentía triste pues ya se había acostumbrado estar los fines de semana con él, pero ahora su vecina lo cuidaba, aunque no se quejaba ya que ella le daba golosinas, él prefería estar con Jimin.

— papá, ¿hoy puedo ir a la casa de Jimin?

— ya te dije que no bebé, no insistas

— pero no entiendo porque no quieres que vaya, si siempre iba a su casa, quiero ver a Jiminie

— entiende Yoongi, no es no — se masajeo el puente de la nariz

— pero papi, por favor — junto sus palmas de sus manos en forma de suplica — por favor, por favor, por favor

— ¡KIM YOONGI! ¡YA YE DIJE QUE NO! ¡QUE PARTE NO ENTIENDES!

Yoongi bajo la cabeza, era la primera vez que su papá Jin le alzaba la voz, se le aguaron sus ojos y con un ligero temblor en su voz respondió sus papá

— l-lo siento — sorbio su naricita — no quise q-que le enojaras conmigo — dicho eso salió corriendo hasta su habitación, se tiró en su cama y soltó sus primeras lágrimas, en ese momento desaba tanto tener a Jimin junto a él.

Jin cerró sus ojos por un segundo, jamás le había gritado a su hijo, Yoongi siempre fue un niño muy tranquilo y obediente por eso es que nunca tuvo la necesidad le levantarle la voz.

Cuando estaba apunto de ir a pedirle disculpas a su hijo, el sonido del timbre impidió ir con él. Fue hasta la puerta y se sorprendió al ver quien era la persona parado delante de él.

— Hola Jin

— Jungkook, ¿que haces aquí?

— Jimin quería ver a Yoongi

— no creo que sea un buen mome- — la voz del pequeño niño lo interrumpió

— señor Jin, ¿podría ver a Yoongi? Hace mucho que no lo veo y... — se quedó un minuto en silencio y bajo la cabeza — y lo extraño

Jin sintió algo en su pecho, ver a su hijo y a Jimin así, era algo que sobrepasaba su orgullo.

— está en su habitación

Jimin con una gran sonrisa levantó su mirada y corrió hasta la habitación del menor, Jin y Jungkook miraron justo el momento cuando Yoongi habría la puerta y con una gran alegría, se lanzó a los brazos del azabache.

— ¿puedo pasar? — preguntó Jungkook una vez que vieron a los niños entrar a la habitación del castaño

— claro pasa — se puso a un lado para luego cerrar la puerta una vez que Jungkook ingresó

— Jin- — se quedó en silencio al estuchar a su amigo llamarlo por su nombre justo al mismo tiempo.

— empieza tu — le sedio la palabra

— yo... yo quiero pedirte una disculpa, se que lo que dije no estuvo bien, estaba muy ofuscado y molesto, yo se que eso no justifica mis palabras, pero... no quiero que vuelvas a sufrir, odiaría volver a verte a si, tu eres muy importante para mi Jin, eres mi hermano y yo te quiero mucho — sus ojos se llenaron de lágrimas — en verdad lo siento, ya no quiero estar peleado contigo. Todo esto sobrepaso los límites, nuestro hijos se están viendo afectados, Jimin sufre mucho por no estar junto a Yoongi y yo... sufro porque no te tengo a ti.

— ven aquí — abrió sus brazos en señal de que Jungkook se acercara, este entendió y se aferró al cuerpo de su mejor amigo — tu también perdóname, los dos dijimos cosas hirientes, yo se que quieres protegerme, pero yo ya soy un hombre adulto, aunque eso no signifique que haga las cosas bien — le acarició el cabello — para mi no es fácil, criar a Yoongi prácticamente solo, tengo que estar mucho tiempo alejado de él, pero... no se que hacer — comenzó a lagrimear — como quisiera que todo esto sea un sueño y aunque no te guste, Namjoon fue el único hombre que amé en mi vida, no fue ni es fácil para mi lo que me hizo, yo se que te molesta la idea que tenga en mente perdonarlo, pero mi amor por el siempre fue muy fuerte, aunque no era reciproco

— yo lo se y te entiendo Jin — se separó del abrazo — porque yo amo a Tae como tu amaste a Namjoon, pero eso no justifica que perdone cosas malas que él me haga — le limpió las lágrimas — todo tiene un límite Jin y él las cruzó todas, yo no puedo decidir por ti ni pensar por ti, pero si puedo apoyarte.

— gracias Jungkook y creo que tienes razón, debo dejarlo ir, no puedo seguir aferrado a un amor falso y lleno de mentiras — le sujetó las manos — iré a terapia, por mi y por mi hijo

— ese es el Jin que conozco, mi hermano fuerte y decidido

— y tú mi hermanito menor, siempre diciéndome la cosas tal y como son

— ¡hey! Solo eres cinco meses mayor que yo

— aún así soy mayor que tu

— te quiero Jin

— yo te quiero más — aunque solo pasó dos semanas, ellos se abrazaron como si no se hubieran visto en años.

Mientras eso pasaba en la sala, dos pequeñas cabecitas sobresalían de la puerta de unas de las habitaciones, al ver aquella escena, cerraron la puerta con mucho cuidado para que no los escucharan.

— ya se arreglaron — dijo el castaño

— ya no estaremos alejados — lo sujetó de la cintura para abrazarlo — te extrañé mucho

— yo también te extrañe mucho Minie, mucho mucho — pasó sus brazos por su cuello dándole un fuerte abrazo.

— te quiero Yoonie

— yo también te quiero Minnie — beso su mejilla y se quedaron en esa posición por un largo rato.