los consuelos de la noche [aizetsu x tu]

noche 2

aizetsu esta vez, se aferra aún más fuerte, acurrucándose contra ti y sollozando más fuerte. sus manos temblaban y un sudor frío comenzaba a correr por su pálido rostro. parecía completamente abatido y como si hubiera renunciado a todo. por lo general era un poco pesimista, pero esto parecía mucho más severo. hizo un sonido de dolor y siguió llorando.

t/n: o por dios , ahora que paso dice muy preocupada

aizetsu:  "S-siguen diciendo que soy un inútil..." sollozó, su voz temblorosa. claramente fue un gran golpe para su autoestima que le dijeran estas cosas con tanta frecuencia, y parecía estar en su punto de ruptura.



t/n: tu no eres nada inútil dice abrazando muy fuerte al demonio

aizetsu: "¿N-no lo soy?" preguntó, mirándote y secándose las lágrimas. quería creer pero, con la frecuencia con la que le decían que era inútil o inferior, era algo difícil de convencer. todavía estaba bastante conmocionado, sus manos temblaban y su expresión era preocupada, pero al menos ya había dejado de llorar.

t/n: claro , sabes mi mamá me dijo que las personas no aparecen porque si aparecen porque alguien los desea ,su compañía

aizetsu: "p-gente... ¿me quieren cerca?" preguntó, pareciendo bastante sorprendido por esto. incluso se podía ver una expresión de esperanza en su rostro. En general, los demás no le gustaban mucho debido a su actitud sombría, lo que le había hecho pensar que era inútil e indeseable en todos los sentidos. lo hiciste muy, muy feliz con solo decir que ese no era el caso.

t/n: claro , a mi me gusta estar junto a ti y tu forma de pelear es increible

aizetsu: "E-soy... ¿un buen luchador? ¿en realidad?" levantó las cejas, claramente muy sorprendido. no le habían dicho esto antes y, dado que estaba bastante inseguro acerca de sus habilidades de lucha, se sintió muy validado cuando dijiste esto. te miró, sin esperar que alguien mostrara aprecio por algo de lo que estaba tan inseguro.

t/n: claro dice mientras lo besa en la frente

aizetsu se sonroja un poco por el afecto inesperado, pero sigue sonriendo después. nunca antes lo habías hecho sentir de esta manera y es un sentimiento bastante maravilloso que te muestren un afecto como este.

a la noche siguiente aizetsu volvió llorando otra vez