CAPÍTULO III

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Han se encontraba en el baño empapándome bruscamente el rostro, mientras Minho aún lo esperaba en el cuarto

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Han se encontraba en el baño empapándome bruscamente el rostro, mientras Minho aún lo esperaba en el cuarto. Mirando los alrededores encontró la misma escena de siempre; y se dispuso a hacer algo al respecto, como siempre lo hacía. La ropa esparcida encontró su lugar en el clóset y algunas en el cesto para lavar. Las mantas fueron dobladas, y los empaques vacíos de snack y golosinas terminaron en la basura. Como debía de ser.

El joven llegó a su habitación con una toalla alrededor de la nuca, recorrió la habitación con la mirada, soltó un suspiro y se dirigió al clóset para buscar un cambio de ropa.

-No te pedí que ordenes mi cuarto, ¿lo sabes verdad? - dijo dándole la espalda y moviendo las prendas mientras buscaba alguna que le siente a su ánimo del día. En lo primero que pensó fué en un hoodie oversize que tape toda la culpa que estaba sintiendo en ese momento. Miró de reojo a Minho, tenía una camisa, un suéter y un pantalón de jeans. Su estilo era casual y limpio, todo le sentaba bien. Y eso a veces a Han le daba algo de envidia.

-Pasamos más tiempo aquí que en mi cuarto, así que lo siento mío - respondió sonriendo - además ningún cuarto mío puede estar desordenado. - añadió satisfecho

-Ah me estás diciendo que lo hiciste por ti y no por mi? - el menor volteó levantando una ceja desafiante esperando la respuesta del contrario.

-Sí, es eso lo que digo, ¿por qué? ¿Crees que eres el centro de mi universo Han Jisung? - esquivó la mirada y siguió revisando su celular. Han hizo bola la camiseta que tenía entre sus manos y se la tiró al mayor; para suerte, o mala suerte suya, esta aterrizó en la cabeza del contrario. El otro lo miró sorprendido, soltó el celular en algún rincón y fué directamente a atacar. Comenzó a picar los costados de sus costillas arrinconándolo contra el clóset, Jisung gritaba mientras trataba de defenderse, empujó a Lee tan fuerte que este cayó a la cama, "lo siento" logró decir aun riendo a carcajadas, y trató de escabullirse rodeando el cuarto para salirse por la puerta, no llegó ni a mitad de camino cuando Lee lo estiró del brazo e hizo que este cayera al colchón junto a él.

En una maniobra rápida, el mayor quedó sobre Jisung apresándolo entre sus piernas. Seguía con las cosquillas y si tuviese un calcetín o papel al lado de seguro ya podría haberle tapado la boca al menor. Un lastimero Jisung suplicaba por su vida, ya le dolían las costillas de tanto reír.

-Pídeme perdón - repetía Minho sobre el otro - más fuerte pídeme perdón

- Hyung por favor , por favor - el aire le faltaba - perdóname, no lo volveré a hacer - algunas lágrimas desfilaban por sus mejillas y su risa no podía ser más contagiosa.

Lee se detuvo, y esperó que el menor se calmara y vuelva a respirar correctamente; Jisung abrió los ojos y aun sonriendo, se encontró con la mirada del mayor. Soltó un hipido.

-Que tierno - añadió; aun arriba del menor se acercó más a este, miro a lo largo el cuerpo aprisionado que yacía bajo suyo y se acercó lentamente al rostro del más joven - Jisung, ya no quiero salir ¿Y si pedimos a domicilio y vemos una película?

La curiosidad mató al gato - MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora