Dalía siempre fue una niña la cual amaba ser querida y adorada por su familia. Después de que se mudará junto a su madre a España todo cambio y nada volvió a ser igual, deseaba volver a México junto a sus abuelos, y que todo fuera como antes, pero a...
En que momento te das cuenta que el amor no es lo que parece y que no todas las personas están listas para recibirlo. Que por mas que te esfuerces por llamar la atención de alguien no lo conseguirás y aferrarse a alguien, lo vuelve aun mas complicado.
Tras el paso del tiempo descubres que el amor y la muerte te destruyen de la misma manera, que no todo es lo que aparenta y que ya no queda nada por lo cual seguir aferrándose a la vida. Dalia nunca fue la excepción de nada, ya que, a su corta edad ya había resistido mucho, ella es el claro ejemplo que por mas que tu familia tenga todo el dinero del mundo, la felicidad, el aprecio, el amor, y poder evitar la muerte, no se puede comprar con nada, así pagues millones de euros por conseguirlo.
La familia Greco Beltrán- Relish Siempre fue una de las adineradas de toda España, pero también, la que mas aparentaba algo que no era, siempre salían a dar la cara siendo una familia unida, amorosa y tranquila, la cual se podían costear muchos lujos, esto ultimo no era mentira, pues en verdad el gran señor Bastián Greco siempre trabajo y no descanso hasta lograr construir todo su imperio y la gran fortuna que posee, fue el fruto de todo ese esfuerzo, pero nunca pensó Dalia y el daño que le causaba todo esto.
En cambio Mariella Relish Beltrán, la madre de Dalia y esposa de Bastián, fue todo lo contrario, ya que ella se dejaba influenciar por su esposo, adoraba y atendía como si del mismísimo rey de Inglaterra se tratara, Bastián siempre fue así, egocéntrico, manipulador y un grandísimo hijo de puta.
Pero no todo acaba ahí, Dalia conocerá al que pretende ser el amor de su vida, ¿Habrá un felices para siempre?
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