La gran colombiana se colocó de pie y miro dónde escucho el ruido, el imperio se paró y sobó su cabeza, los sudamericanos al mirarse fruncieron el seño con molestia
Comenzare a explicar este odio: Imperio se encaminaba en usar la guerra como un medio de política exterior, gran Colombia estaba en contra de esto y ella siempre apoyaba los derechos en sus tácticas diplomáticas. Desde que se conocieron, no fueron más que discusiones y no han tenido charlas calmadas.
-¿Era necesario lanzarme una rama?-dijo sobándose la cabeza.
-No sabía que estaban tirado en el piso...además-se acercó poco a poco hacia el- ¿Que haces en mis tierras? ¿Acaso no quedamos en algo, imperio?
-si, quedamos en algo, pero a usted la necesito con urgencia- la colombiana achicó los ojos dudando del más alto- mire, no disfrutó para nada su presencia, así que seré lo más sensato posible.
La mujer se cruzó de brazos y desvío la mirada. El imperio suspiro y se trago su orgullo, miro con atención a la más baja.
-Necesito que me acompañe a Francia.
La libertadora alzó la mirada sin creerse lo que dijo aquel molesto imperio, la mujer sonrió de forma burlona.
-No puedo- respondió la latina. Se dió la vuelta comenzando a caminar alrededor de los frondosos árboles.
Imperio abrió los ojos al escuchar la respuesta, nadie le había negado algo en su vida.
-per-
-Adios imperio, le recomiendo que salga lo más pronto posible de aquí, puede que le pique alguna serpiente- hablo la mujer, desde lejos, hasta que el hombre la perdió de vista.
-¡Oye! ¡No me puedes dejar aquí sólo!
No hubo respuesta, el brasileño miro su alrededor con una pizca de miedo, este frunció el seño y bufo fuertemente, derrepente escucho un pequeño movimiento en las hojas secas del suelo, este miro el piso con una expresión de sorpresa y comenzó a caminar rápidamente.
-No, no fue una serpiente imperio, son inventos de ella...
Gran Colombia limpio sus manos en su vestido, soltó el machete poniéndolo en su lugar y después, ato su cabello, agarro el canasto llenas de cacao y se encaminó hacia su casa, ese día había recogido bastante y pues las manos le fallaron, todo lo que cosechó se disperso en la entrada de su casa, dió un gran suspiro y se agachó, agarro uno por uno y los acomodo en el canasto de paja, derrepente una mano también ayudaba, pero la mujer pensó que era uno de sus hijos ya que siempre estan en el campo jugando y ayudando con varias de las cosechas, pero al verla fijamente se dió cuenta que no era un niño de 9 años, está alzó la mirada encontrándose a el imperio mirando con curiosidad el fruto, la mujer rápidamente se colocó de pie, este con sus ojos avellanas la observó atentamente.
-¿Que haces aquí?-pregunto, molesta la mujer.
-Ayudando a recoger lo que dejaste caer- respondió obvio, dejo de mirarla y siguió poniendo todo el cacao dónde estaba- me han hablado mucho de este fruto y de la semilla que posee ¿Me regalas uno para así darle un uso comercial en mi nación?
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𝑴𝒊𝒏𝒊 𝒆𝒔𝒄𝒓𝒊𝒕𝒐𝒔 (𝒄𝒐𝒖𝒏𝒕𝒓𝒚)💫
RomanceSolo son algunos escenarios con otros países :v Este libro es principalmente para historia cortas, especiales de otras de mis historias, para escenarios +18, etc. También le saco provecho a este libro para desarrollar ideas, tener inspiración o para...