Terminamos de comer y continuamos con el resto del turno.
Antes de levantarme de la mesa se acercó Roberto.R: Bueno, nos vemos pronto-sonrió-Creo que aún tienes mucho trabajo.
Tú: Bueno ya solo que queda un rato más, ayudo con unos trastes y traer unas charolas de pan y listo, gracias al cielo-mire hacia arriba y levante las manos-
R: Oh... ¿Segura? Podría esperarte si gustas-se quedo esperando una respuesta-
Tú: Pe-pero, ¿no llevas prisa, y él? - dirigí la mirada hacia Topo-
R: No te preocupes el irá a otro lugar y yo solo quiero pasear un poco antes del ensayo con la banda en el estudio.
Tú: Si gustas puedo acompañarte a dar la vuelta en agradecimiento por esperarme.
R: ¿Harías eso? Me encantaría.
Tú: Claro, ¿quieres algo más en lo que termino?
R: ¡No! Ya estoy bastante lleno, comí muchísimo-rio-
Tú: Dame 20 y ya salgo.
Corri a la cocina gritando.
Tú: ¡Mirandaaaaaaaaaaa!
Miranda: ¡Calmate qué pasó!
Tú: Roberto, Roberto, Roberto.
Miranda: ¿Qué, qué, qué?
Tú: Dijo que me esperaría para que salgamos a dar la vuelta juntos.
Miranda: ¡No puede ser! ¿Será que le gustaste?
Me detuve de pronto mientras me ponía el delantal de plástico para lavar los trastes.
Tú: ¿Cómo crees? Solo soy una simple fan y el esta haciendo un acto muy caritativo al brindarme su compañía.
Miranda se quedó mirándome y sonrió.
Miranda: Si tú lo dices...
Continue lavando los trastes, definitivamente no era porque le gustaba, al menos no me ilusionaba pensar en eso porque sabía que no podía pasar nada entre nosotros.
Él una persona famosa y yo una simple fan eso solo s eve en las películas, ojalá mi vida fuera una.
Termine con las últimas tareas y me vestí, teníamos un locker en el trabajo así que siempre lo tenía con ropa para no cargar de un trabajo al otro.
Me vesti con unos jeans negros y un top morado, era muy lindo, me peine con una media cola y me maquille un poco casi imperceptible.
Salí con mi mochila, me despedí de Miranda y me dirigí a la mesa donde se quedó Roberto.Miranda: ¡Suerte! - grito desde la parrilla-
Tú: ¡Gracias!
Llegue con Roberto mientras se ponía de pie.
R: ¡Pero que linda! ¿Estás lista?
Tú: Gracias-dije bajando la mirada mientras me sonrojaba- Lista.
Nos dirigimos a la salida, firme las hojas de turno y esperamos a que revisaran mi mochila.
Una vez afuera sabía a donde llevar a Roberto.Tú: ¿Estas listo para recorrer la ciudad? No será mucho por el tiempo, pero te llevaré a un lugar muy lindo.
R: Bien soy todo tuyo-sonrió-
Me quede quieta admirando su belleza, era mayor, pero tenía algo... Simplemente se sentía sincero con sus emociones y eso me hacía sentir en confianza, tranquila, enamorada...
Tú: Te llevaré al centro de la ciudad, es muy lindo y conocerás un poco más de México, siempre está lleno de gente, pero lo lindo del lugar lo amerita.
R: Perfecto-sonrió -
Tomamos un taxi, para no exponer tanto a Roberto a la gente, cuando llegamos compre unas mascarillas el escogió una rosa para mi y yo una naranja, nos sentamos en una bardita, yo me sente dando un brinco.
Saque unos plumones de mi mochila y le dibuje a su mascarilla una sonrisa con una lengua de fuera y en la lengua un sol y un iglú.Tú: Y... Listo, ahora parece que llevas la lengua de fuera-reímos juntos-
R: No se me habría ocurrido dibujarles muecas a las mascarillas ¡incluso pusiste el sol y el iglú en la lengua! -dijo poniendosela y tomando la mía- Me toca.
El dibujó una mueca preocupada, tapó el plumón, se bajó de la barda y se paro delante de mi, chocamos miradas y me sonroje de inmediato.
Corrió mi cabello y me puso la mascarilla.R: Muy bien, ahora parece que vas preocupada por todo-rió-
Tú: ¿Tú crees? - dije y también puse mis ojos preocupados para que se viera la expresión completa-
R: Jajajaja, totalmente, ¿vamos?
Tú: Claro.
Iba a dar un brinco para bajar de la barda, pero en ese momento sentí sus manos en mi torso para cargarme y ayudarme a bajar.
Tú: No era necesario- dije sonrojandome -
R: Claro que si, no te vayas a lastimar. ¿Bueno, ahora a dónde vamos?
Tú: Primero caminaremos por aquí, para llegar ahí y luego a la explanada para que conozcas el Palacio Nacional.
Mientras íbamos caminando hablábamos de muchas cosas.
R: ¿Qué es el Palacio Nacional?
Tú: Ahí vive el presidente, es el único del que sé que ha vivido ahí, todos habían habitado en una parte que le dicen "Los Pinos". La verdad es que no sé mucho, pero el Palacio es la sede del poder y la soberanía del pueblo mexicano, ya sabes muy histórico el asunto-rei-
R: Entiendo.
Caminamos otro rato mientras Rober me preguntaba cosas del país y la ciudad, se iba oscureciendo, pero ni siquiera lo notamos hasta que empecé a sentir frío.
Tú: Vaya que ha pasado un buen rato, ¿tienes hambre, quieres beber algo?- dije mientras buscaba mi chamarra en la mochila-
R: Nop, estoy bastante bien. Muy entretenido con todo lo que me has hablado. ¿Qué buscas?
Tú: Mi chamarra, la había puesto... Rayos.
R: ¿Qué pasa?
Tú: La deje colgada en la silla de los vestidores. Soy muy distraída disculpa.
R: ¿Tienes frío?
Tú: No, solo quería ponérmela.
La verdad es que si tenía frío en mi estómago, ya comenzaba a soplar el aire y yo no estaba tan acostumbrada a usar esas blusas cortas, me gustan pero no creí que fuera a cambiar el clima de pronto.
Rober se quito la chaqueta que tenía encima y sorpresa abajo traía un suéter, creí que era solo una playera.R: Toma-comenzó a ponermela-
Tú: ¡No! No es necesario, no te hubieras moles... - me interrumpió-
R: No es molestia, úsala tal vez comience a darte frío porque ya hay mucho viento.
Tú: Gracias - me sonroje-
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Que les digo muchacheeeeees.
Jajaja, estoy bien emocionada de leer mi historia porque me imagino que soy yo. :')
Espero les vaya gustando, la verdad que le estoy poniendo todo mi amor y trato de describir todo para que se lo imaginen bien. 🤭Gracias a las personita que votan y comentan, no me siento tan solitaria en mi obsesión con Roberto. :')
Las imágenes son referencias a alguna parte de la historia, por fis comenten si les va gustando. :')Sofúl™
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Enamorado Tuyo.
Teen FictionTodo comienza en el aeropuerto, quien diría que te cruzarias con quien siempre admiraste y deseaste que estuviera ahí para ti y sobre todo que se enamoraría del mismo modo del que estabas enamorada tú.