Educando a Emma [Viper's #1]

Capítulo 23

Emma se sintió mareada. Se las había arreglado para olvidar todo lo que había pasado con su ex, así que, de alguna manera, la idea de que Logan actuara como guardaespaldas era mucho más impactante de lo que debería haber sido. Una parte de ella quería rechazar su ayuda, pero había leído suficientes periódicos para saber que el mundo no era el lugar seguro en el que intentaba creer.

Si Greg no había terminado después de destruir su dormitorio, entonces agradecería toda la ayuda que pudiera obtener. Pero al mismo tiempo, no quería arruinar las vacaciones de Logan. El hombre tuvo muy poco tiempo libre. Debería estar haciendo algo más divertido que seguirla al trabajo.

"No", dijo Logan incluso antes de que ella abriera la boca. Ella frunció el ceño, pero fue a hablar de nuevo. No era como si pudiera leer su mente.

"No", dijo de nuevo, disolviendo por completo las palabras que había planeado decir. Volteó la tortilla de olor delicioso en la sartén y luego la apuntó con la espátula. "Planeo protegerte, lo quieras o no. Así que puedes quejarte y gemir y ser infeliz, o aceptar que estaré cerca sin importar lo que quieras y disfrutar de nuestro tiempo juntos".

"Oh." Miró a Jace, esperando una opinión más razonable, pero el hombre estaba sonriendo ampliamente.

Molesta porque parecían estar uniéndose a ella, a pesar de la admisión silenciosa de que realmente quería su protección, Emma trató de enumerar sus preocupaciones más prácticas.

Necesito ir a casa alguna vez. No puedo ir a la oficina vestida así.

"Ya se está organizado", dijo Jace casualmente. "Llevé la mayor parte de tu ropa a la tintorería ayer por la mañana".

"Sí, bueno... um... qué hay de los zapatos y... y... la ropa interior".

"Desafortunadamente, cariño, no querrás saber qué le hizo a tus zapatos, pero basta decir que ninguno de ellos se pudo salvar. Te llevaremos de compras después de desayunar.

"¿Compras?" preguntó, sintiéndose un poco abrumada. Ya se había estado preocupando por cómo pagar una cama nueva, pero tener que reemplazar todos sus zapatos no era un gasto que esperaba.

"En cuanto a la ropa interior", dijo Logan con una gran sonrisa, "decidimos no hacerlo".

"¿Ustedes decidieron?" preguntó ella con una obstinada inclinación de su barbilla. "Bueno, decidí que no voy a ir a ningún lado como un comando, y de ninguna manera voy a trabajar sin sostén y bragas".

"Pequeña sumisa testaruda" dijo Logan mientras rodeaba el banco y la tomaba entre sus brazos. "¿Qué tal un compromiso?"

"Está bien", dijo con cautela. Logan había pasado los últimos dos días y noches dándole órdenes. No estaba segura de que él supiera lo que era un compromiso.

"Puedes ir sin ropa interior y no tendré que azotarte".

Ella resopló. "Eso no es un compromiso".

"¿Qué tal esto como un compromiso?" dijo Jace, interviniendo en la conversación. Parecía obvio que estaba tratando de no reírse. "Emma usa tanga para ir al trabajo y Logan la azota por ello. ¿Eso los haría felices a ambos?

Emma se mordió los labios para dejar de reír. Podía arreglárselas con una tanga, y los azotes serían divertidos. En cuanto a los compromisos, fue bueno. Ella le sonrió a Logan, y él le golpeó el trasero. Se frotó el aguijón y logró hacer un puchero exagerado. Él suspiró.

"Está bien, pequeña sub, pero puedo elegir la tanga".

"Umm esta bien."

"Excelente", dijo Jace mientras Logan regresaba a la cocina y servía las tortillas en los platos. "Comer hasta. Tenemos algunas compras que hacer.