la princesa del invierno

oficial

- la mañana llegó y con ello los nervios de la rubia, aunque ya había hablado con sus madres el día anterior y ellas habían estado de acuerdo, aún así no podía controlar todas las emociones que llegaban a su pequeño cuerpo.

¿Y si los padres de Mina no la aceptaban?  Esa fue una duda que empezó a crecer cada vez más en su cabecita haciendo que la rubia se colocará un poco triste. En todo el camino hacía el sitio dónde había quedado en verse con Mina, la ojimarron iba sumida en sus pensamientos y preocupaciones, tanto así que no se había dado cuenta que ya había llegado hasta que la dulce voz de su amada la saco de su ensoñación

- Chaeyoungie, mi amor - exclamó la pelinegra pasando los límites de su reino y abrazando a la rubia - te extraño tanto

- Minari  - musito ya un poco más feliz - te vas a quemar - se separó un poco de sus brazos mirando la piel de la mayor algo roja

- cierto, pero es que moría de ganas de abrazarte - dijo la pelinegra mientras hacía que encima de ella empezaran a caer copos de nieve  - ven te presentaré a mis padres - Mina se coloco unos lindo guantes rosas en sus manos  que combinaban a la perfección con su vestido azul, para así poder tomar las manos de la rubia y no lastimarla - madres ella es Chaeyoung, mi prometida

- buenos días, es un placer conocerlos altezas - la bajita hizo una reverencia mientras sus mejillas se teñían de un tono rosa haciéndola ver más adorable

- oww pero Momo, es un encanto, mira sus mejillas, sus ojos, aaaa es muy linda, Mina tenía razón. Es una dulzura

- muchas gracias mi reina usted también es muy hermosa - exclamo la rubia ganándose un gritito de emoción por parte de Sana.

- así que usted es la jovencita que piensa robarme a mi niña

- mamá - la regaño la pelinegra mientras veía como Chaeyoung se encogía al lado de ella - la asustas

-perdón - exclamó apenada la otra regente - solo era una broma, pequeña eres bienvenida a la familia y ahora vamos hablar con tus padres para hacer todo oficial.