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-Oye te veo tenso desde hace un rato
-Oh? Si amor, solo es un pequeño dolor
-En tu pierna?
-Algo asi, como un calambre
-Oh! Ya entiendo, puedo... Darte un masaje?
-Eso no va con alguna intención?
-Solo ser un buen novio

Un desconfiado rubio asintió siendo guiado al sillón de la cocina por un peli-negro que lo sentó sobre el sofá, sanji quitó sus botínes negros y Ace detuvo las  manos del cocinero
-Yo lo haré
-Traigo ligueros
-Entonces quítate los pantalones
-NO! estamos en la cocina
-Oh vamos! No hay un alma cerca, usa tu haki de observación
-Cariño, estamos jugando en terreno peligroso
-Solo está vez...Si?
-Ugh...Solo por esta

El menor quitó su pantalón negro dejando sus boxers junto a los ligueros que sostenían sus calcetines, se volvió a recostar apoyando su espalda contra el sofá, Ace jalo un pequeño sillín y se sentó quedando con la cara lo suficientemente alta como para llegar al abdomen de sanji sin problemas

Las manos del pecoso comenzaron a tiritear sobre los ligueros viendo la forma de corazón en la hebilla de estos, de la misma forma el elástico apretaba al Rubio marcando sus fuertes pantorrillas, paso sus dedos debajo del elástico negro y lo bajo lo suficiente para que no estorbara, quitándolo junto con el calcetín, Ace calentó un poco sus manos frotando una contra la otra y froto sus palmas calientes contra los tensos músculos de sanji

-Mierda...- Se limitó a decir el rubio cuando sintió aquel tacto, si bien nunca había puesto tanta atención a sus piernas dándoles masajes o algo, sabía que un masaje no se sentía como lo que el pecoso le estaba provocando

Este paso sus manos ásperas desde la rodilla del joven hasta sus tobillos, frotando y amasando, el de cejas extrañas tiro su cabeza sobre el sillón cuando sintió a su pareja tomar con fuerza su pierna, este mismo saco una pequeña crema y la puso sobre sus manos

- Tenias preparado eso en tu bolsillo?
-Te mentiría si te dijera que no había querido hacer esto

Ambos rieron en calma y los movimientos del mayor se extendieron frotando sus manos de arriba a abajo sobre la pierna del menor, dejo está sobre su regazo y coloco la otra imitando sus acciones

Masajeó sintiendo como se ablandaba la carne debajo de sus manos, cuando termino con eso miro a sanji que estaba jadeando suavemente, sus piernas estaban tan sueltas que no sabía si el mismo podría controlarlas

-Terminaste? -Pregunto ganándose una risa del otro, el cual negó con la cabeza antes de colocar las piernas de su novio sobre sus hombros
-Faltan los muslos

Antes de que pudiera reprocharle algo las manos de Ace subieron sin aviso alguno hasta tomar con fuerza uno de los muslos del cocinero, se acercó un poco más y paso sus manos por debajo mientras se aseguraba de levantar al rubio dejando solo su espalda y una pequeña parte de su trasero apoyada en el sillón, los labios del tatuado se acercaron a morder el interior de sus piernas mientras masajeaba con calma, su piel caliente y su respiración alterada combinada con esa estúpida crema estaban haciendo al cocinero ver estrellas sin necesidad de algún tipo de penetración de por medio

Usando sus nudillos junto a un poco de fuerza las piernas del contrario flaquearon y un suave gemido salió de sus labios, con una paciencia de los mil demonios, el pecoso siguió sus acciones a pesar de lo que sería la creciente erección en su ser, cuando el muslo derecho del cocinero estaba rosado de las atenciones continúo con el izquierdo, manteniendo la pierna de sanji elevada por encima

Comenzó con un poco de fuerza usando sus nudillos y palmas para palpar y amasar aquella extremidad, escuchando los jadeos y las respiraciónes pesadas de su novio, el cual intentaba mantener la calma, pero... como era eso posible? Ace sin camiseta con su abdomen pegando directamente contra el trasero de sanji, el mismo con una pierna sobre el hombro del contrario y la otra estirada sobre su cabeza mientras el portador le daba besos y mordiscos a su muslo

El pirata detuvo sus acciones y sonrió reacomodando a su novio en el sofá, luego sonrió y se levantó

-Mi trabajo terminó! -Dijo orgulloso y dejo a su novio con una necesitada erección mientras el se iba a lavar las manos
-TONTO! -Fue lo que alcanzo a gritar el rubiales y dejo caer su cuerpo contra el sillón

¡TONTO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora