𝓔𝓼𝓹𝓲𝓸𝓷𝓳𝓮 | Miguel O'Hara x reader (t/n) one shot 🔥

𝓔𝓼𝓹𝓲𝓸𝓷𝓪𝓳𝓮

Fui encomendada a realizar una misión de espionaje a The Spider-Society para obtener información clasificada, así que tuve que infiltrarme y tratar de aparentar ser parte de ella. Pude conseguir un traje hecho a medida y un par de traidores dispuestos a hacer lo que sea por dinero, así que no fue nada complejo llegar hasta ahí a través de sus portales.

Me gané la confianza de muchos siendo colaboradora de misiones importantes, manteniendo mi identidad encubierta por la máscara y me asigné en un rol de tecnología para tener acceso a los datos de la organización en un lapso de casi dos años. Para este punto ya no era sospechosa y conocía bastante sobre el modus operandi de los miembros de esta sociedad secreta, así que con gran esfuerzo logré acceder a tener una reunión privada con el líder, Miguel O'Hara (quien me parecía extremadamente atractivo) para compartirle una serie de mejoras de seguridad para su sistema de control.

Realmente, no pienso mentir diciendo que Miguel me era indiferente, puesto que demostraba superioridad con el simple hecho de mirarlo. Su rostro reflejaba cansancio y seriedad, eso le otorgaba un aspecto desafiante y que lograba dejarme un poco nerviosa.

Ente a la habitación en donde se encontraba este líder, saludé con cortesía y le mencioné sobre las fallas en el sistema de localización, a lo que él respondió con gran seriedad "Solamente te concedí esta audiencia porque sé que llevas tiempo espiándonos, es inútil que lo ocultes, no estás en el sistema". Mi cuerpo retrocedió y sentí una punzada fuerte en el pecho, al igual que comencé a notar la pesadez de mis extremidades. "No intentes engañarme T/N, no soy estúpido" dijo en voz baja, mientras bajaba las escaleras de su plataforma, con pasos firmes, para llegar hacia mi. "Sabes que puedo hacer que te maten y aún así tienes la valentía de venir aquí y jugar sucio, creo que necesitas ser un poco más inteligente"

Para este punto, estaba justo delante de mi, me sugirió retirarme y hacer como que nada había pasado, aconsejándome destruir completamente mi evidencia; pero yo me negué.

"No puedo hacerlo, o me matas tú, o me matan ellos. Pero no van a tener piedad con mi familia" exclamé titubeante. Miguel escuchó estas palabras y sonrió suavemente, él ya tenía un plan de reemplazo para la información y me lo dijo en la cara; al parecer, estuve trabajando durante dos años con datos inservibles que fueron proporcionados por sus mismos compañeros que fingieron estar de mi lado y apenas me daba cuenta de que este era mi fin.

Tenía tanto miedo de las represalia, así que le dije que no importaba lo que me pasara, solo que necesitaba huir. Él fue amable y piadoso, sugiriendo darme asilo y ayudarme a esconderme siempre y cuando cumpliera con una pequeña cláusula de su contrato: tener sexo con él.

Lo pensé por un momento, en realidad el me parecía bastante atractivo y aceptar el trato me aseguraba protección para mi y para mis seres queridos hasta nuevo aviso. No tendría que preocuparme por escapar ni por pelear contra mis propios compañeros de espionaje, así que al final de todo, supongo que todos ganábamos...

"Acepto" pronuncié con firmeza. Una sonrisa se formó en su rostro al escucharme. Inmediatamente le pidió a su asistente digital que preparara su habitación y me llevó ahí.

El cuarto era bastante espacioso, había una cama grande en el centro de la habitación y un ligero aroma a perfume amaderado con notas de tabaco que llegaba suavemente a mi nariz. Ni él ni yo portábamos nuestros trajes, sino que ambos utilizábamos ropa formal por la seriedad que ameritaba nuestra anterior reunión.

Apenas cerró la puerta y me dirigí hacia el tocador del baño para quitarme las joyas que portaba. Estando frente al espejo tomó mi cadera con ambas manos y ejerció una presión increíble, haciéndome chocar bruscamente contra su cuerpo. Él se encontraba detrás de mi, y comenzó a tocar mi cintura y a dejar suaves besos en mis hombros cubiertos por ropa; a la par, se deleitaba con mi fragancia y mi respiración se volvía un poco agitada.