The Squad

CAPÍTULO 27: ENVIDIAME TODO LO QUE QUIERAS

Mi cuerpo había dejado de responder repentinamente, pero no de una manera en que yo al menos pudiera sentir mis extremidades, no, no sentía absolutamente 

nada, solo sentía una pesadez en mi cabeza mientras sentía como todo mi cuerpo se dormía y caía al suelo, también veía como Henry pasaba por lo mismo a pesar de no tener cuerpo; yo la verdad ya deje de intentar buscarle lógica a la magia demoníaca o lo que fuera que provocara las reacciones fisiológicas que Henry y Freddy no deberían sentir porque literalmente no tienen cuerpo, pero en fin, ya no me quiebro mas la cabeza con eso

Apenas caímos al suelo, fuimos interceptados por miles de demonios monstruoso y verdes que inmediatamente nos tomaron y apresaron 

- Acaso pensaban que no tendría nada preparado para ustedes? Me da envidia su inocencia- 

- Podrías dejar de decir que te da envidia todo reafirmando tu pecado principal?- Dijo Henry forzando todo lo que podía a su mandíbula para poder pronunciar sus palabras

Al parecer esto hizo enojar bastante al tipo, ya que lo vio a los ojos directamente con una furia incontrolable, pero no solo eso, sino también que de repente sentí como si todo bajo nuestro se estuviera derrumbando, lo que no era pero para nada una buena señal. Efectivamente y como me lo temía, termino todo el suelo por derrumbarse y cayendo absolutamente todos al vacio; Yo en ese momento no podía pensar con claridad, estaba sujetada por 2 demonios, cayendo al vacío y con el cuerpo todo dormido, y aunque me separase de mi cuerpo en forma de alma, no puedo volar ni nada por el estilo, así que no habría muchos buenos resultados, sin embargo ni el propio leviatán ni los demonios se veían asustados por esto, así que ya pensaba yo que tendrían alguna especie de método de salida o algo por el estilo

Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando sentí como me sumergia en el agua, sorprendentemente había caído en lo que parecía ser una especie de profundo mar, e inmediatamente cuando caímos, sentí como me soltaban los demonios, por lo que aproveché para intentar salir a la superficie, pero  fue todo en vano, aún no sabía nadar, y tuve que esperar a la ayuda de Henry para que al menos me sirviera como soporte. Al salir a la superficie pude apreciar un brusco oleaje en el mar en donde estábamos, haciendo que fuera casi imposible mantenerse 100% con la cabeza fuera del agua o evitar tragar una bocanada de agua salada, pero lo peor vino cuando las aguas literalmente comenzaron a calentarse y a crear muchos remolinos, llevándonos cada vez mas hacia adentro del mar, y finalmente las aguas comenzaron a crecer y a formarse una especie de montaña de agua, de la cual emergió una serpiente gigante de más de 1 kilómetro de color verde, con más de 8 aletas en los costados, tentáculos parecidos a los de un pulpo saliendo de su espalda y en su mandíbula tenía miles de colmillos acompañados de ojos completamente rojos y animales

Esa serpiente se abalanzaba sobre nosotros tirando mordidas y tentáculos con la intención de atraparnos, y si, esa serpiente era leviatán, no solo es el demonio encargado de la envidia, sino también es uno de los demonios principales encontrados en los mares, aunque yo había leído que su forma era una especie de kraken y no una serpiente marina, pero posiblemente solo haya sido una variación como en las diversas leyendas que se cuentan sobre los diferentes demonios

Si ya era bastante difícil pelear en tierra firme, ahora en el agua, y sin saber nadar, sería casi imposible, así que ya me estaba esperando lo pero para esta pelea. No comenzó tranquilo, ya que el oleaje generado por el movimiento del monstruo hacia que no pudiéramos movernos mucho, asi que henry tuvo que recurrir a usar uno de los ganchos que usamos en el volcán de las almas para poder engancharnos directamente al monstruo gigante, encajándose el gancho en la parte más baja del pecho, ocasionándole un dolor punzante al parecer debido al alarido que soltó al ser técnicamente apuñalado. Con ayuda del gancho pudimos acercarnos, pero fuimos alejados nuevamente gracias a los tentáculos de pulpo de Leviatán, que eran tan largos que fácilmente podría habernos arrojado a más de 10 metros de distancia o hasta mas sin problema alguno, pero al ser un pulpo, tiene ventosas, así que las aprovechamos para poder mantenernos al menos en los tentáculos y avanzar lentamente