Buscando placer en el calabozo

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Descripción: Jazmín lleva un año de casada con Aladin, ella creia que ya habia conseguido su final feliz con el hombre de sus sueños pero todo cambio entre ellos. Aladin se concentra mas en los problemas del pueblo, dejandola abandonada durante dias, lleva cinco meses sin tener relaciones con su esposo, autosatisfacerse ya no la ayuda asi que decide buscar a un hombre que le proporciono una noche apasionada hace muchos años. 


Jazmín se encuentra en el palacio, esa noche Aladin volverá a Agrabah después de un viaje largo, ella decide esperarlo con lencería nueva para poder disfrutar de una noche juntos. Escucha pasos acercarse a su habitación, se prepara para recibir a su esposo. Aladin entra a la habitación, pero no la nota acostada en la cama se dirige directamente al armario y comienza a sacar ropa. 

-Aladin, ¿Te iras nuevamente?-Le pregunto confundida, acababa de regresar.

-Oh amor, lo siento no te mire. Tengo que viajar al pueblo vecino para negociar más tierras-Le explico su esposo, mientras continuaba sin verla sacando más ropa y metiéndola en bolsas.  

-Pero acabas de regresar, no hemos pasado ni un día juntos-Le reclamo un poco molesta. 

-Esto es más importante que nosotros, sabes que desde que me convertí en sultán me prometí que mejoraría la ciudad-Le dijo Aladin molesto. 

-Lo has logrado, todos en el pueblo son felices, pero no lo has notado porque nunca estas aquí. Nunca notas nada porque no te tomas el tiempo de descansar-Le grito molesta 

-Basta de quejas, tengo que irme-Su esposo le grito molesto. 

-Al menos mírame antes de irte, ¿Cuánto tiempo estarás lejos?-Le pregunto. Su esposo por fin volteo a verla, espera que al menos sus ojos la recorran, pero no hace ningún movimiento. 

-Es por eso que estas molesta, ya te dije que luego buscare tiempo para darte un heredero y que tu padre no continue molestándonos por eso-Le dijo Aladin molesto. 

-No es eso, extraño pasar tiempo juntos, quiero pasear contigo como antes, disfrutar de una tarde juntos-Le respondió con voz afligida.

-Jazmín ya no somos aquellos jóvenes, tenemos que crecer para ser reyes, esto es más que un simple compromiso tenemos responsabilidades que cumplir-Le dijo su esposo con algo de irritación.  

-Se que tenemos responsabilidades, yo cumplo las mías aquí. Conozco mi pueblo y sus necesidades y busco la manera de solucionarlas, pero no me pierdo todo el tiempo en eso, también merecemos una vida. Si no puede dejar de ir a ese lugar, iré contigo, deja preparo ropa para el viaje-Respondió mientras se levantaba para buscar ropa.

-No puedes venir es un viaje largo, además que prefiero que te quedes aquí. No me contradigas no iras y se queda así. Nos vemos, a mi regreso hablamos-Le dijo Aladin, mientras salía de la habitación y la dejaba furiosa en su cuarto. 

Jazmín no podía creer que su esposo la dejara nuevamente, ni siquiera aprecio la ropa que tenía o le dijo que la extrañaba. Se sintió muy frustrada y triste, se recostó en la habitación mientras su cabeza comenzó a recordar distintos momentos de su vida donde fue feliz, donde su esposo la deseaba con una pasión intensa. Entre sus pensamientos le llego un recuerdo inesperado de ella y el antiguo visir Jafar, quien ahora se encontraba encarcelado en uno de los calabozos al querer conquistar Agrabah con hechizos y brujería.

Comenzó a recordar esa noche que prometió olvidar para siempre pero no podía controlar sus recuerdos. Jazmín se encontraba nadando en la piscina del palacio de noche, era el único momento en que los guardias se encontraban pendientes a los muros y las doncellas no la perseguían, se sentía tan libre que esa noche decidió nadar desnuda. Se encontraba tan relajada que no noto al visir real, entrando a la piscina, se trató de esconder bajo el agua, pero antes de sumergirse vio que al igual que ella Jafar estaba completamente desnudo.  

El palacio del placerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora