Verwonding

2.

Narra Luz

Sobrepensar las cosas lleva a cometer errores que por instinto ni siquiera cometerias, yo suelo vivir mi vida al limite y no pensar ni un poco en las consecuencias que traerán esas decisiones, a los doce años comencé con esta doble vida, me gustaba escabullirme y pelear por dinero en algunos lugares ilegales que encontraba, era tan buena en esto que no me preocupaba por entrenar ni un poco, también comencé a juntarme con algunos pandilleros que vivían muy cerca de mi casa, mi madre siempre me regañaba por traer tantos problemas a casa, pero siempre se justificaban con el hecho de que era inmadura y pronto eso cambiaría, entonces fue ahí donde decidí que esta vida sería mucho mejor si la mantenía alejada de mis madres, no hacía nada más que preocuparlas todo el día.
Ahí fue cuando comencé con mi vida perfecta, las mejores notas, el mejor comportamiento, todo lo que el mundo quería ver de mi.
Era estúpido verlo así pero nadie sabia nada acerca de mi, hasta el día en que en una de las peleas callejeras me tope con un chico peli verde, todos decían que era el mejor peleador de este lugar, había estado invicto desde su debut, justo como yo, me animaron a combatir con él, mis amigos dijeron que le ganaría muy fácil Gus y Jerbo no dejaban pasar nada, si ellos lo decían era verdad, ellos eran los únicos en mi vida perfecta que conocían todo esto, pero al igual que yo estaban encantados con todo esto.
Luz: - Esta bien pelearemos - me levante del cofre del coche.
Tan solo tenía dieciocho años, para mi era una forma tan buena de ganar respeto frente a todos en mi grupo.
X: - Bien hagamoslo - sonrió.
El chico peli verde se veía tan confiado, en una orilla se encontraba una chica tan similar a él que le gritaba para darle ánimos, supuse que era su hermana, no había de otra.
La pelea comenzó con varios puñetazos míos acertando en su estómago, el aire no lo pudo contener y se alejo un poco de mi para tomar algunas bocanadas de aire, se vino de frente con un golpe directo a la cara, al momento de esquivar ya me esperaba una patada directo a una de mis costillas, el dolor se hacía presente era la primera vez que me sentía así, pero eso solo hizo que mi lado alfa quisiese seguir con la pelea, sin pensarlo más me fui contra él con toda mi fuerza, sin medirme lo golpe repetidamente en la cara tanto que al tercer puñetazo se encontraba tirado en el suelo, Gus y Jerbo me tomaron de ambos brazos para alejarme de él, un silencio abrumador inundó el lugar, era la primera vez que perdía los estribos, solo tomé mi chaqueta, arranque mi auto y sali de ahí, había sobrepasado el límite esta noche, así que no debía seguir más.
Jerbo: - Vaya que lo dejaste mal - río.
Gus: - Creí que lo matarias, por eso Jerbo y yo interferimos - sonrió.
Jerbo: - Pero esta bien, lo merecía, es un completo idiota, tan creído por haber ganado un par de pelas, si tan solo hubiera estado informado de ti, ni siquiera te hubiera retado - suspiro.
Luz: - Saben como se llama - la duda estaba en mi.
Por mi cabeza habían rondado recuerdos de haberlo visto en otro lugar además de esta noche.
Jerbo: - Claro, es Edric Blight -
Luz: - Lo sabía, ese chico irá de sapo con mis madres - golpee el volante.
Era la primera vez que me sentía así, no quería defraudar nuevamente a mis madres.
Gus: - No lo creo, lo más seguro es que él haga esto al igual que tu, si habla se va contigo -
Tenía razón, un chico de su estatus no pertenecía ahí, nunca lo había visto hasta ahora, era obvio que no iba a decir nada de lo ocurrido.
Y así paso el tiempo, la riña entre los hermanos Blight contra mi comenzó, en cada oportunidad que tenían para retarme lo hacían, aunque siempre terminaban humillandose frente a todos, en la escuela no era una excepción, me seguían a todas partes y buscaban meterme en problemas, pero simplemente no me dejaba llevar por sus provocaciones no debía bajar la guardia frente a personas como ellos.
La competencia con ellos se hacia más incomoda para mi, tanto que ya los comenzaba a evitar a toda costa, en todos los lugares posibles era más que necesario evitarlos a toda costa.
Como cada mañana me levantaba a desayunar con mis madres, mientras Eda me hablaba de los planes de esta noche, acerca de la cena con los diferentes inversionistas de la empresa Blight en la que éramos lo mayores benefactores, teníamos que estar si o si en esa cena, no podía evitar a los gemelos por nada del mundo, el problema es que ellos no sabían guardar sus modales frente a los demás inversionistas, siempre ocasionaban un alboroto al querer parecer mejores que yo, pero solo parecían dos idiotas.
Eda: - ¿Te pare bien? - me miró fijamente.
No tenía idea de lo que había hablado pero tampoco me interesaba volver a escuchar todo su discurso nuevamente.
Luz: - Si, nos vemos más tarde - deje un beso a mamá y me marche.
Subí a mi auto y maneje hasta casa de Jerbo y Gus, durante todo el camino hablaban de la fiesta de esta noche, a la cual claramente no podría asistir por la cena de negocios con mi madre.
Luz: - Hablando de eso no podré asistir, cena de negocios - suspire.
Gus: - Escogen las mejores fechas para hacerlas - sonrió.
Jerbo: - No te preocupes, nosotros disfrutaremos por ti - río.
Luz: - Gracias - comencé a reír.
Sabía que la pasarían de maravilla, pero no podía faltar a una cena importante de mi madre o estaría muy enfadada conmigo.
Tan pronto como llegamos a la universidad ambos se fueron muy rápido, yo solo baje tranquilamente, se que ya era algo tarde pero estaba entrando por la parte de atrás, no me costaría nada llegar.
Sabía que el entrar por la puerta principal conllevaría a verme con ese par de idiotas.
Al dar vuelta en una esquina alguien me golpeó, por la sorpresa caí al suelo.
Luz: - Vamos fíjate por donde vas - me talle suavemente la cabeza.
Me levante y me quede observando a la chica frente a mi, era tan frágil, pero su aroma a menta era tan cautivador y esos ojos dorados que me parecían tan irritantes, en ella hacían un contraste tan diferente, sin pensarlo extendí mi mano para que se pusiera de pie, la tomó y pronto se encontraba frente a mi, era más bajita de lo que pensaba.
X: - ¿Estas bien? - me observo.
Luz: - Si, ¿y tú? - la observe fijamente, pero mi cara de estúpida no podía desaparecer.
X: - Estoy bien, gracias, bueno tengo que irme, llegare tarde a clase, compermiso -
Sin más salió apresuradamente hacia su salón, no tenía ni la más mínima idea de quien era, pero no era tan difícil de identificarla su rico aroma no cualquier omega podría tenerlo.
Camine a mi clase, entre silenciosamente al salón y espere a que el profesor diera por terminada la clase, al salir Jerbo y Gus me interceptaron.
Gus: - Edric viene a buscarte - tomó algunas bocanadas de aire.
Luz: - ¿A mi? ¿Por qué? - suspire.
Nuevamente problemas con estos idiotas.
Jerbo: - Ni nosotros tenemos la respuesta a eso, ve ahí viene -
Un gran grupo de personas lo seguía, pronto todos se encontraban rodeandome, pero claro ninguno de ellos venía con Edric, todos venían preocupados por mi, la alumana modelo de esta maldita escuela.
Luz: - ¿Qué buscas? - suspire.
Edric: - ¿Qué buscas de mi hermana pedazo de mierda? - se veía realmente enfadado.
Luz: - ¿De que estas hablando? Sabes que no me interesa Emira - no sabia porque mierda me reclamaba por su hermana, si yo tenia más que claro que a personas locas como ellos no debía acercarme.
Edric: - Habló de mi hermana pequeña, esta mañana te vieron con ella - me lanzó un golpe.
Fácilmente pude hacerme aún lado, pero enserió que me estaba haciendo enfadar su actitud sin sentido.
Luz: - No se de que hablas, yo no conozco a tu hermana pequeña -
No tenía ni la más mínima idea de que los Blight tuvieran otra hija además de estos dos pedazos de idiotas, además si la tuvieran ni siquiera la conocía.
Edric: - No te hagas la estúpida - nuevamente lanzó un golpe.
Lo volví a esquivar, la situación se notaba cada vez más tensa, no sabia como acabar esto sin darle un golpe para que se cálmase, hasta que la chica de hace un momento con la cual había chocado, callo en medio de la pelea, Edric la miró tan asqueado que me sorprendí tanto por ello, pero solo presente atención en la chica en el suelo.
Luz: - Ey, ¿estas bien? - rápidamente extendí mi mano para ayudarla a levantarse.
Edric: - No la toques - golpeó fuertemente mi mano, apartandola de ella, eso me efado demasiado pero no podía perder los estribos tan fácil. 
Luz: - Tranquilo, no vez que puede estar lastimada - lo dije enojada.
Edric: - Vamonos de aquí Amity no necesito que estés de zorra resbalosa con esta mierda -
La tomó tan fuerte del brazo que pude ver una pequeña mueca de dolor que hizo la pequeña chica, solo pude quedarme viendo desde la multitud como se marchaba con ese idiota.
Jerbo: - ¿Esta todo bien? - se acercó muy rápido.
Ni siquiera preste atención y seguí a ambos, mi instinto me decía que lo hiciera y yo solo lo hice.
Se detuvieron en un pequeño pasillo solitario.
Edric: - Te dije que no te acercaras a esa idiota, ¿qué no quedó claro o no lo fui tanto? - levantó su mano.
Estaba a punto de darle un fuerte golpe, iba a salir en su rescate pero solo apretó su puño se dio media vuelta y se marchó.
Lo único que hizo Amity fue recargarse en la pared y sentarse, miró su reloj, se encerró en su pequeño mundo, me acerque lentamente, debía asegurarme que se encontraba bien, no podía dejarla solo así, mi instinto no me dejaba estar tranquila.
Luz: - ¿Te encuentras bien? - alzó la vista.
Sus ojos dorados me observaban fijamente, eran intensos pero enserió que justo ahora no me molestaban en lo más mínimo.
Amity: - Si, lo estoy - suspiro.
Luz: - Entonces tu eres la hermana pequeña de ese idiota - reí.
No podía creer que esos idiotas podían tener una hermana tan linda, se me hacía difícil pensar como había sido su vida junto a este par de idiotas.
Amity: - No es que tenga otra opción, ¿verdad? - río.
Luz: - Eres más amable que esos dos juntos, ¿puedo sentarme? - señale a un costado de ella.
Amity: - No quiero más problemas, solo por favor aléjate de mi - suspiro.
Estaba bien que me viera como un problema, además si sus hermanos eran violentos con ella, no podía ni imaginar lo que le hacían estando en sus casa, debía hacer algo.
Luz: - Lo entiendo, una disculpa, por cierto soy Luz, mucho gusto Amity, hasta luego -
Me di la vuelta y me fui, no quería meterla en más problemas, pero tampoco me iba quedar de brazos cruzada viendo como esos idiotas la lastimaban, así que tome mi celular e hice una llamada.
Esto lo arreglaría en un dos por tres, lo sabía y no había otra opción más que brindarle la protección de los Clawthorne.
Seguí mi curso con normalidad hasta llegar a la hora de comida, era extremadamente raro que yo fuera a la cafetería de la universidad, pero tenía curiosidad por saber si la pequeña Blight se encontrab en ese lugar, pero cuando llegue solo vi una escena que me hizo hervir la sangre, el estúpido de Will poniendo las garras sobre ella.
Se veía aterrada y sin siquiera voluntad para moverse de ahí, su estúpida hermana viendo todo eso, quería molerlos a golpes, lo deseaba más que nadie, pero justo ahora no podía, me acerque rápidamente a ellos.
Luz: - Ya basta idiota - la jale fuertemente hacia mi.
Quería que se sintiera a salvo y protegida, así que solté un poco de mis feromonas, lo que pareció calmarla. 
Amity: - Luz - suspiro mientras susurraba mi nombre, quería matar a estos sujetos.
Will: - Vamos Noceda déjame probar un poco, tu ya tienes suficiente -
Mi sangre hervía, como podía tratar a Amity como un maldito juguete.
Luz: - Si te atreves a si quiera pensar en ponerle otro dedo encima, te juro que no me contendre - firmemente dije, sabía que esto les haría temblar el cuerpo, mi voz de alfa era fuerte y atemorizate.
Emira: - Esto lo arreglaremos en casa, escuchaste -
Le grito fuertemente a Amity, quien solo se dejaba guiar por mi, la llevé con las chicas que se veían preocupadas por ella, una estaba a punto de golpear a los idiotas que la sujetaban para ayudarla.
X1: - ¿Estas bien? - la chica de tez morena y pelo grisáceo la abrazo.
Boscha: - Gracias - me vio, a ella la conocía, jugaba muy bien al Grudgby.
Solo asentí y me marche, no quería agobiarla con mi presencia, sabía que debía tomar venganza de esos idiotas por lo que habían hecho y esto no se iba a quedar así, iba hacer que se arrepintieran de siquiera volver a pensar en ella.
Continúe con mi día, sabía que esta noche sin duda alguna podría ver a Amity, iba a ser su primera fiesta, porque por la reacción de mi madre ni siquiera sabía que existía otra Blight.
Subí a mi auto, no debía esperar más, debía hablar bien sobre este asunto con mis madres.
No se porque, pero esta chica causaba estragos en mi que ni yo podía explicar, tenía la necesidad de protegerla.
Jerbo: - Ey Luz espera - corrió y subió.
Gus hizo lo mismo, ambos se veía que tenían algunas dudas pero sabían que no me encontraba de tan buen humor como para responder en estos momentos.
Simplemente los pasé dejando en sus casas y me marche a la mía.
Luz: - Madre - fui directo a su despacho.
Eda: - Ya hice la llamada, ella estará bien no te preocupes - sonrió.
Luz: - Gracias - suspire.
Eda: - ¿Acaso te interesa esta niña? -
Sabía que haría esa pregunta, pero debía responder de la mejor manera, no podía decir si si me interesa, eso podría formar una idea equivocada en mi madre.
Luz: - Solo quiero ayudarla, sus hermanos la tratan peor que basura, no podía quedarme brazos cruzada, y tú lo sabes - suspire.
Eda: - De acuerdo -
Siguió con su papeleo, sabía que esta noche debía estar más que lista.
No podía fallar y tampoco poner excusas, además podría ver nuevamente a esa pequeña chica.
Hasta se me hacia raro que fuera una Blight, en ninguna fiesta la había visto, era como si quisieran mantenerla oculta de todos.
Pero razones no había, era mil veces mejor que sus hermanos juntos, era una genio en potencia.
Tal vez, era una familia tradicional de alfas, lo cual era probable, puesto que sus padres ambos eran alfas.
Pureza en la raza, puras estupideces que hacen la vida tan complicada de los omegas en estos días.