Todas las personas tenían un sueño; un sueño que querían cumplir sin importar las dificultades. Algo que deseaban y anhelaban, querían cumplir ese sueño sin importar los comentarios ofensivos de la gente.
Federico tenía un sueño, un sueño que se hiciera realidad. Quería ser un gran modelo de revista, modelar marcas de lujo muy famosas. Era algo complicado de lograr, no sabía ni como actuar frente a
una cámara.
Ian también tenía un sueño, era un sueño un poco estúpido; casarme con el amor de mi vida, quería ser felizmente con alguien que lo amara sinceramente.
Ian término casándose "fielmente" con Samantha la mujer de su vida. Aunque fuera un sueño tonto y estúpido logró cumplirlo, ni siquiera se esforzó por conseguirlo.
9 de octubre del 2010
Ian y Federico se volvieron inseparables, siempre querían estar juntos; Mientras pasaban más tiempo juntos más se tenían confianza. Ambos no sabían de los sentimientos que sentían, apenas tenían diez años no sabían ni el significado de la palabra del amor.
Estaban sentados en una banqueta de concreto, mirando el cielo nocturno estrellado. La media luna teniendo un esplendor hermosamente luminoso.
—Ian... —Habló Federico—
—Dime, ¿pasa algo? —Contestó Ian—
—No, no pasa nada...
—¿Seguro?, si tienes algo que decirme dimelo.
—¿Vez el cielo llenó de estrellas? —Pregunto Federico haciendo contacto visual con Ian—
—Si, esta muy bonito...
—Tú siempre serás la más bonita entre todas ellas, y la más brillante de todas. —Federico sonrió mostrando un poco sus dientes—
Ian no supo que responder, seguían manteniendo el contacto visual. No sabían cómo reaccionar, el viento movía el cabello de ambos y movía un poco sus prendas. Ian acercó un poco su rostro admirando los labios de Federico, beso sus labios con suavidad sin despejarse de él.
—Yo miraba solo a la Luna por que me enamoré de ella pero la Luna miraba a las demás estrellas. —Dijo Ian separándose de aquel beso—
Federico no sabía cómo reaccionar, ni siquiera pudo pronunciar una palabra. Pero le gustó mucho ese beso que le gustaría volverlo a repetir.
