Ámame a mi

Reencuentro

Aparte al chico de mi y le dije
-De que hablas?- dije sujetando sus hombros
-Todavía no te acuerdas de mí?- dijo,
Estaba apunto de volver a besarme cuando lo aparte de nuevo y le dije
-¿Quien eres?
El chico entendió la situación y dijo
-Me llamo Aaron Martínez, no me digas que no te acuerdas de mí?
Aaron Martínez, sus palabras resonaron en mi mente, entonces recordé a un ex novio que tuve en la primaria que se llamaba así
-Eres el gordito con el que salí en la primaria?
El soltó una carcajada y respondió
-Solo ese recuerdo tienes de mí- dijo mientras se reía
Me sonroje y dije
-Es que solo te recuerdo así - dije en voz baja
-Bueno entonces creemos más recuerdos juntos - dijo mientras sujetaba mis manos
Me sonroje tanto que lo único que podía pensar era salir corriendo de ahí, cuando el vio mi rostro respondió
-Si no quieres está bien, podemos ir lento.

Estaba en shock, mi novio me acababa de terminar pero mi primer amor de la primaria apareció de la nada, como se supone que debía reaccionar, lo único que recuerdo es que mi cuerpo se mando solo y se fue de ese parque dejando a Aaron sentado en el suelo y con un millón de preguntas, no sé como llegué a casa, solo se que llegue con la cara hinchada y con las rodillas llenas de curitas, mis padres me estaban hablando pero no hice caso y fui directo a mi habitación, me enredé entre las sábanas, mi madre entro a la habitación
-Sami estás bien?, Entraste tan deprisa que nos preocupaste - decía mi madre
-Te acuerdas de Aaron Martínez?- le dije
-El chico que estaba un poco subido de peso pero que era tu novio en la primaria?- respondió poniendo su dedo en su barbilla
-Ese mismo- dije mientras brincaba de la cama
-Por qué preguntas?, Apareció para conquistarte otra vez?- me miró con una mirada pícara
-N-no- dije mientras me sonrojaba
-Aja, cuando mientes tartamudeas, pero ya tienes a Yohan, así que rechazalo- dijo negando con la cabeza
-Sobre eso, Yohan y yo terminamos hoy - dije con la mirada baja
-Que?, Pero como es posible?- dijo sorprendida
-Por eso me cito hoy- estaba apunto de llorar cuando mi papá entro por la puerta
-Ya sabía yo que ese vago no te convenía, te lo dije pero nunca me hiciste caso- dijo frunciendo el ceño y saliendo de la habitación
Estaba apunto de estallar en llanto cuando entro de nuevo y me dijo
-Con pan las penas se arreglan
Me trajo un café y mis panes favoritos, se sentó a mi lado y me abrazo
-No importa pequeña, ya llegará el indicado - dijo mi padre
-El tiene razón cariño, quizas todavía no llega el indicado para ti
Ambos me abrazaron y sentí como la tristeza se fue poco a poco, en ese momento me di cuenta que solo necesitaba un poco de amor, que digo un poco, necesité hasta café y pan para sentirme mejor.