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—Ryujin me pidió ser su novio —Beomgyu dijo mientras pasaba la esponja por uno de los platos con restos de ramen.

Yeonjun y Beomgyu habían ido a la casa de este último para ver alguna película, específicamente Yeonjun se lo había pedido y Beomgyu aprovechó y aceptó, pero el mayor tenía pensado en preguntarle a su Beomie por su orientación sexual al tener una charla con Yuna esa tarde; charla que tenía "Homosexual" y "Beomgyu" en la misma frase.

Así que, aquella confesión que acababa de lanzar Beomgyu le había tomado por sorpresa.

—¿Ah, sí? —inquiere Choi, no tan seguro. Sinceramente no pensaba que Ryujin fuera una chica apresurada, tampoco esperaba que Beomgyu pensara aquella propuesta, ¿por qué de cierta manera se sentía decepcionado?

Beomgyu asintió con su cabeza mientras dejaba el plato ya limpio sobre el mueble. Caminó hasta el sofá para poder sentarse al lado de Yeonjun mientras pensaba.

A decir verdad, no estaba en los planes de Ryujin ni de Beomgyu el decirle a la otra persona, pero ambos tenían una mínima esperanza que el contrario les dijiera algo o incluso quizá que mostraran un mínimo indicio de celos... Como si esas cosas pasaran; pero nunca estaba de más intentar.

—¿Y qué esperas para decir que sí?

El menor miró al pelinegro algo desilusionado, pero mostrando un semblante normal ante aquella situación. Soltó un "hmm", dando a entender que sí lo estaba pensando, pero en realidad lloraba por dentro por el simple hecho de que Yeonjun parecía normal e incluso restándole importancia al asunto; ¿tan poco le importaba?

Aún recordaba la noche anterior en la que un Yeonjun borracho lo abrazaba y le pedía que no se alejara, que lo odiaba por hacerle sentir cosas tan raras y por confundirlo de esa manera.. Tal vez había pensado que él había sido Yuna o algo por el estilo, pero ahora se sentía un tonto por pensar en todo momento que Yeonjun se refería a él.

—Creo que le diré que sí mañana.., —dijo desviando nuevamente su mirada hasta el televisor. Realmente había estado ilusionado con aquello, aunque no sabía qué más esperaba, puesto que no le gustaba a Yeonjun y nunca iba a gustarle, lo que había pasado la noche anterior solo había sido un error y confusión de papeles, era todo.

[...]

Había pasado justo una semana desde aquel día en que Beomgyu había aceptado la propuesta de Ryujin. Ahora ambos estaban tomados de las manos mientras estaban sumergidos en sus pensamientos; nada, literalmente nada estaba pasando como ellos querían. Yuna y Yeonjun demostraban cada día más ser más cercanos, Beomgyu seguía recibiendo comentarios ofensivos de ciertos amigos de Yuna, Yuna casi no hablaba con Ryujin y Yeonjun había estado dedicando más tiempo con su –ahora– pareja que a prestarle atención a Beomgyu.

—No entiendo qué estamos haciendo mal —la femina habló y suspiró rendida.

—Sinceramente he hecho tantas cosas mal que se me ocurren mil y un razones —Choi dijo y Ryujin rió casi sin ganas, dando leves palmaditas en el hombro de su lamentable pareja.

Yuna y Yeonjun aparecieron en donde estaban ambos, tomados de la mano. Yeonjun tenía sus labios más rojos, casi rozando el tonto del brillo labial de su pareja y eso hizo poner los pelos de punta de Beomgyu. Ryujin no se había fijado en ella, sólo se había fijado en lo diosa que se veía su amiga.

—¿Qué tal les va? —inquiere Yeonjun mientras apoyaba su cabeza sobre la de Yuna.

Beomgyu tensó su mandíbula mientras pensaba en una respuesta que no fuera "Deja de mirarla a ella y fíjate en mí de una vez por todas, te he estado esperando casi diez años"

—De maravilla, ¿y a ustedes?

—Genial —Yeonjun sonrió triunfante. —Yuna pensó que tal vez podríamos tener una cita doble pasado mañana, ¿qué les parece?

—De maravilla.. —Ryujin y Beomgyu dijieron al unísono.

De maravilla.

B O Y S? | YEONGYUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora