Grace hermana melliza de Jonathan Byers y hermana mayor de Will Byers, una chica la cual no muchos conocían en la escuela y otros si, no era como si fuera igual que su hermano mellizo.
Grace y Steve no tenían ningún tipo de contacto hasta que sucedi...
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—¿Qué hace él aquí?
Grace estaba realmente molesta, no por ver a su madre trastornada sentada en el sofá es más aquello le preocupaba, sino por la presencia de Lonny en su hogar. Ese hombre no se cansaba de ser un completo hipócrita, Grace tan solo deseaba que él desapareciera de su vida nuevamente como ya había hecho anteriormente.
—Tu padre pasará esta noche aquí—responde su madre recibiendo una mirada incrédula de su hija—dormirá en el sofá. Grace cariño me preocupé por ti al ver que no llegaste con Jonathan.
—Lo lamento mamá, necesitaba despejar mi mente...
—Nada de "lo siento mamá" —regañó el hombre que se hacía llamar su padre, observó a la adolescente cruzándose de brazos con el ceño fruncido—estás siendo muy irresponsable Grace, piensa en tu madre y en Jonathan.
—Miren quien lo dice, el hombre que abondo a sus hijos por irse con una joven idiota—molesta la chica paso por el lado del adulto chocando su hombro con el de el—
—Mira, solo quiero ayudarlos—habló el hombre masajeando su cien en busca de algo de tranquilidad—
—No te necesitamos, hemos pasado por mucho nosotros solos y lo hemos superado—soltó molesta Grace mirando al adulto con clara furia en su voz—no es nada que no hayamos superado antes sin tu ayuda.
Molesta se encerró en su habitación, se sentía tan agotada física y psicológicamente que lo único que pudo hacer fue lanzarse a su cama, apenas tocó la almohada cayó en un profundo sueño.
—Y en momentos como este se pone en duda nuestra fe...
Grace no prestaba atención a ni una sola de las palabras que la persona encargada del funeral decía. No creía en dios, quizás se debía a los últimos acontecimientos que remecieron su vida, creía que si existía un dios este le había quitado a Will de su lado.
Cuando llegó el momento de despedirse de su hermano Grace no pudo evitar romperse, abrazó el ataúd como si su vida dependiera de ello, sollozó con fuerza mientras se negaba a soltarlo.
—Grace vamos—hablo su padre tomándola por los hombros—
—No...por favor no—sollozo luchando por quedarse abrazada al ataúd sin tener éxito alguno—
Ya sin fuerzas Grace se dejó guiar por el hombre, no tenía ánimos de seguir peleando con él. Cuando las personas se comenzaron a ir Grace se alejó del lugar, no quería escuchar sus pésames, se sentó en el suelo apoyando su espalda en un árbol, cerró sus ojos intentando dejar de pensar en el funeral, pero aquello era casi imposible.