𝐒 | ❛ You and I'll be safe and sound ❜
❛ Donde Violet Harmon se encuentra perdida en un mundo apocalíptico que cree haberlo perdido todo, decide sobrevivir por su cuenta sin ningún rumbo y sin saber que el hombre del caballo cambiaría completamente...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
˗ ˏˋ CHAPTER ONE el oficial amistoso . . . !
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
───────────────────────
AQUÉL hombre no paraba de verme fijamente, supongo que analizando todo lo que había sucedido. Mentiría si dijera que no me incomodaba su mirada.
- ¿Has estado todo el tiempo aquí? - preguntó el hombre por tercera vez y por tercera vez asentí con la cabeza.
- Sí, y evite tu suicidio, no hace falta que me agradezcas. - únicamente agachó la cabeza
- Dios santo. - no dijo nada más, solo se limitó a colocar sus manos en su cabeza y se quedó así durante unos segundos hasta que otra vez el radio volvió a emitir sonido. Pensamos que había dejado de servir.
- ¿Oye, me escuchas? ¿Sigues vivo? ¿La niña sigue contigo?
El hombre se aproximó a tomar el micrófono que estaba lado mío y apartandome de ahí.
- Que grosero.
- ¿Hola? ¿Hola? - fue lo primero que preguntó el hombre a la persona que se encontraba afuera.
Me pare de mi espació ya que fue invadido por un hombre que ni siquiera me ha dicho su nombre. Que poco cortés.
- ¿Estás afuera? ¿Nos puedes ver? - no genio, está aquí con nosotros.
- Si los puedo ver. - aseguró el tipo para después soltar un gran suspiró y volver hablar - Están rodeados de caminantes. Esas son las malas noticias.
- ¿Hay buenas? - preguntó ingenuo.
- No. - respondió él.
- Esto me pasa por creerme la Madre Teresa de Calcuta. - dije golpenado mi frente con mi mano y sintiendo c omo mi perro daba vueltas sobre mi pierna como si de un gato se tratase.
- Escucha, quien quiera que seas, no me importa decirte que estoy algo preocupado.
- ¿De verdad? Yo pensé que tenías todo bajo control. - me miró mal y yo voltee hacia arriba silbando cómo si yo no hubiera dicho nada y dirigió su atención de nuevo a la radio.