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AITANA

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AITANA


Cuando llegamos a casa de Sebas, estaba demasiado nerviosa. No sabía como me recibirían, solo se que su casa es súper grande y hermosa por fuera.

- tranquila, si me agradas a mi. Les gustaras a
ellos... - me dijo Sebas intentando tranquilizarme mientras tocaba el timbre.

Salió Maria, la madre de Sebas a abrirnos..

- hola! Tu debes ser aitana no? - me dijo la madre de Sebas saludándome.

- Si, un gusto señora Maria - dije yo muy nerviosa ya que no quería llevarme mal con ella.

- A mi no me digas señora Maria, solo dime Mari. Que si haces así de feliz a mi hijo ya te tengo confianza - me dijo la madre de Sebas mientras ambas nos reíamos.

En eso llego Clara a la entrada. Yo ya le conocía a ella por esa vez que nos dijo que Sebas estaba raro en la escuela. Pero no dije nada ya que ella nos pidió que no se lo dijésemos.

- bueno aitana, ella es Clara, mi hermana pequeña. Clara ella es aitana - dijo Sebas presentándonos.

Yo salude a Clara y ambas sonreímos ya que sabíamos que ya nos conocíamos pero no dijimos nada.

Luego Sebas me presento a su padre, que también era muy majo. El estaba haciendo la barbacoa fuera mientras nosotros entrábamos.

- voy a ayudar a mi padre, vienes? - me pregunto Sebas.

Yo iba a decir que si pero Clara dijo que no, que se quedaría conmigo.

- hola! - me dijo ella sentándose conmigo en la terraza.

- hola! - dije yo riendo ya que era divertido la forma en que ambas habíamos disimulado antes.

- Gracias por ayudarlo. Se que sabes a qué me refiero, porque me recuerdo muy bien de quién eres - me dijo Clara mientras hablábamos.

- Tranquila, créeme que cuando dijiste que el estaba raro yo ya lo venía notando hace un tiempo, pero no sabía que hacer - dije yo mirando a Sebas como ayudaba a su padre.

- jo! Me gusta mucho como te vistes - me dijo Clara viéndome como venía vestida.

Yo llevaba una chaqueta de jeans negros, una camiseta roja, y luego unos jeans negros tiro alto con un cinturón afirmándolo.

- Gracias, a mi me gusta cómo vistes tú eh - dije yo mirando a Clara ya que se vestía igual de bien que Sebas.

Nos quedamos hablando por un rato con ella en la terraza, nos reíamos a veces ya que la conversación fluyó rápidamente

Ella me contó algunas cosas que había hecho Sebas mientras yo no estaba, nos reíamos de el, luego me contó como eran sus amigos, amigos se refería a los que no eran de la escuela, ya que Sebas tenía otro grupo de amigos pero yo no les había conocido aún.

- a ver, de qué tanto se ríen ustedes dos - dijo Sebas sentándose entre medio de nosotras.

- pues de ti la verdad, señor astronauta - le dije yo a Sebas riéndome junto a Clara.

- jo der! Clara ya le contaste cosas de cuando era pequeño tia - dijo Sebas sonrojándose.

Me provoco tanta ternura que yo lo abracé y le di un pequeño pico en su mejilla.

- te quiero eh - me dijo el mirándome a los ojos y mientras ambos sonreíamos.

La madre de Sebas comenzó a poner la mesa, por lo que yo me ofrecí a ayudar.

- le ayudo? - pregunte yo viendo como ponía algunos platos.

- bueno, si quieres ve poniendo los cubiertos a los lados. - me dijo mari pasándome los cubiertos

Yo los fui poniendo de uno en uno, en cada puesto hasta que ya estaban todos los platos con sus respectivos cubiertos.

Luego Sebas puso una tabla, y enzima de ella su padre puso la comida.

- a comer se ha dicho - dijo Sebas sentándose y luego me dijo que me sentase a su lado.

- Aitana acércame tu plato para servirte primero, antes de que los sebastianes se coman todo - me dijo Mari empezando a servirme en mi plato.

Una vez ya estábamos todos con los platos servidos íbamos a empezar a comer. Pero primero la madre de Sebas dio las gracias.

- señor muchas gracias por darnos la oportunidad de poder servirnos esta comida, gracias por traer a Aitana a la vida de Sebas y que logre que el sea igual de feliz como lo era hace años, gracias también por ayudar a que Clara no fuese tan borde con una invitada, amén - dijo la madre de Sebas y todos nos reímos un poco.

Clara estaba sentada frente mío así que le pregunté porque decían que era borde.

- porque siempre que Sebas traía a alguna chica aquí, pues a mi simplemente no me terminaban de convencer, llegando aquí diciéndome que soy muy mona y que esto y lo otro, cuando a mi si no me caen bien a la primera pues no me llevo nunca - dijo Clara muy seria.

Yo me quede mirando con ambas cejas levantadas, ya que yo le había dicho antes que era mona, por lo que quizá era una de las chicas que le caía mal.

- Pero tranquila que tú si que le haz agradado - me dijo Sebas mientras se reía.

- Si, eso es cierto. Me encantaste, si algún día terminas con Sebas. No te alejes de mi y yo te ayudo a odiarlo - dijo Clara y mari le miro feo, al igual que Sebas.

Yo me rei con ella y luego seguimos todos comiendo.

- Aitana piensas estudiar algo? O no? - me preguntó el padre de Sebas.

- pues para regalo de graduación mi hermano me dio un puesto de prueba en un centro de música, que es como una universidad, pero si no quedo allí me gustaría entrar a diseño en la universidad - dije yo en respuesta a la pregunta de el padre de Sebas.

- ala! Cantas? - me pregunto Maria.

- bueno, no mucho pero a mi her... - dije yo pero Sebas me interrumpió.

- No mucho? Aitana cantas fenomenal, deberían de escucharla algún día - dijo Sebas mientras comía.

- Mira... no te gustaría cantar algo luego? - me pregunto Maria.

- bueno... - dije yo un poco nerviosa.

- hay un piano en la sala de arriba. Por si te gusta tocar también - dijo Clara.

- bueno eso si que lo hago, tome clases de piano por 2 años y me gusta un montón - dije yo un poco menos nerviosa.

- qué bien, tu Sebas ya tienes pensado que hacer o aún estás que no sabes? - le pregunto el padre de Sebas a Sebas.

- pues creo que si daré pruebas para actuación, pero no llegase a quedar, quiero estudiar comercio - dijo Sebas muy seguro.

Seguimos comiendo hasta que ya se acabó la comida.

Luego ayude a levantar los platos y luego una chica que trabajaba en casa de Sebas los lavo.

Yo me fui a sentar con Sebas a la terraza, junto a su familia...





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