capítulo 27

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Abro los ojos y estamos en un círculo, solo tengo una daga para defenderme no es suficiente pero lo bueno es que hay una distancia considerable como para correr aunque no se donde estamos parece un desierto pero no creo que estemos en uno seguro sea un escenario armado, en total somos cuatro mujeres y cinco hombres creo que con las dos mujeres que hay Ilse y yo nos podemos arreglar pero con los hombres no además solo pueden haber tres ganadores ¿me va a intentar matar? A esta distancia no puedo lanzar la daga y por el temblor de mi mano dudo que pueda lograr algo por otro lado tenemos prohibido defendernos en grupo, tres dos uno y empiezo a correr en dirección opuesta giro y veo que Valen Samil y otro desconocido forman un círculo ¿Por qué hacen equipo? Esta prohibido veo a Ilse y corre hacia mi pero no es la única también las otras dos mujeres corren hacia mi aunque Ilse esta última, tres contra uno no es justo pero no me molesta eso sino que ella venga hacia mi ¿me va a lastimar? No quiero llorar otra vez pero mis ganas de hacerlo están presentes como el nudo en mi garganta no se porque estoy tan sensible y no creo que sea porque me gusta Ilse, vuelvo a mirar al frente pero no hay nada no hay ni un solo árbol ¿Dónde estoy? Siento un dolor en la pierna y noto que está sangrando ¿Quién está practicando tiro al blanco conmigo? Me giro y veo que otra daga viene hacia mi así que me tiro al piso estuvo cerca las tres me rodean y aprovecho para sacar mi daga y tirársela en el cuello a una veo hacia la otra mujer tirarse sobre mi y cubro mi cara con mis manos pero me duele el pecho y no de manera emocional aunque quizá sea una combinación de ambas la mujer para de golpear pero sigue sobre mi veo que Ilse tiene sobre su cuello una daga y con la otra la agarra del pelo, maravillosa jugada, la miro y espero que haga algo pero no dice nada.
—¿Qué esperas?
—¿Queres salir conmigo?
—¿Una cita?
—Si. Dice Ilse.
—¿Qué pasa si digo que no?
—Dejo que te mate. Dice Ilse sonriendo.
—¿No lo vas hacer vos?
—¿Vas aceptar si o no?
—Si.
Ilse le corta el cuello y la tira sobre mí, es una hija de puta gracias a ella ahora tengo toda la cara y el cuello lleno de sangre me pongo de pie y antes de que le grite lo enferma que es Samil y Valen empiezan a gritar que corramos también están con otro hombre pero nosotras por si las dudas corremos ellos nos alcanzan y seguimos corriendo por varios minutos, ahora si puedo ver un poco de vida corro hacia dentro del bosque pero freno y le grito al resto que haga lo mismo.
—¿Por qué corremos?
—Porque somos cinco.
—Y ese quien es. Dice Ilse.
—Soy petrov.
—¿El resto murió?
—Si.
—¿A dónde vamos ahora?
—Con Aziel.
Seguimos corriendo pero no encontramos nada mas que arboles animales barro y ganas de comer ya esta oscuro y no sabemos ni donde estamos ni que va a pasar.
—¿Quién se anima a matar ese ciervo? Dice Valen.
—Nadie vamos a dormir mejor no estamos lejos. Dice Ilse.
—Yo hago guardia primero.
—Necesitamos fuego.
Samil y Petrov arman una fogata y todos se ponen a dormir, lo bueno del programa es que nos prepararon para este tipo de cosas además no es la primera vez que estoy en una situación así por otro lado el insomnio es buen aliado esta vez, miro hacia el grupo y veo que todos duermen relajados nadie se movió o ronco hasta ahora.
Dormir no es algo que me disguste considero que dormir es una perdida de tiempo y esta vez lo vuelvo a confirmar, Valen toma mi mano y me trae a la realidad empezamos a correr veo mi pierna y la flecha clavada en esta hace que se me compliquen mas las cosas el resto esta en perfecto estado excepto yo sin embargo creo que todos estamos vivos gracias a Petrov si el no hubiese matado a uno de los agentes no tendríamos esta oportunidad de correr, los agentes empiezan a cantar algo en un idioma desconocido y me rio a muchos les puede parecer algo aterrador pero las palabras suenan raras sigo corriendo pero tropiezo con algo y me caigo Valen me ayuda a levantarme y veo con lo que tropecé un cadáver no solo hay uno hay varios están bien ocultos, los agentes siguen cantando y esta vez sino no le encuentro la gracia, al fin veo una carretera y una camioneta pero no solo eso esta Aziel Dylan y Max están armados, cero grita que subamos y lo hago, me siento y grito del dolor Samil rompió parte de la flecha le agradezco y la camioneta se pone en marcha, miro hacia la ventana y veo como del bosque salen decenas de agentes ¿Por qué hay decenas? Solo somos cinco no es la gran cosa tampoco somos imposibles de matar ellos disparan hacia nosotros pero a Aziel no parece importarle.
—¿Quién es el nuevo? Dice Dylan.
—Soy Petrov.
—Dylan ¿sos un ruso real? O sos americano.
—Ruso.
—¿Tenes osos?
—Uno de mascota y otro como cazador.
—Deberíamos ir a rusia y ocultarnos ahí. Dice Dylan.
—No me gusta el clima. Dice Max.
—No vas a pasar frio conmigo. Dice Samil.
Esa no me la esperaba pero no digo nada no tengo ganas de participar veo a Ilse y noto que apoya la cabeza en el hombro de Valen, no creo en las palabras de Ian pero no creo que estos dos sean amigos además me pidió una cita ¿Por qué me invito a una cita? Me hubiese gustado que fuera un poco más romántica pero supongo que la próxima vez quizá pueda tratar de hacerlo si le digo sutilmente como no ser una puta mierda que juegue con mi vida ¿iba a dejar que me mate? Ian está equivocado en todo y se lo voy a demostrar.
—¿Qué música quieren escuchar? Tenemos un viaje largo. Dice Aziel.
—Que el ruso elija. Dice Max.
—Yo elijo. Dice Dylan.
—Rock en español. Dice Ilse.
—¿Sweet dreams?
Todos dicen al unísono si y Aziel pone la canción aunque tendríamos que acordar que musico dejar, mejor hubiese dejado que el ruso elija, miro a Valen y noto que le susurra algo al oído a Ilse dejo de mirarlos y decido dormir estoy cansada como para estresarme o ponerme celosa por estupideces sin sentido.

camino de sedaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora