Sus suaves cabellos rubios estaban siendo mojados por el agua que provenía desde la regadera de su baño, sus manos se dirigen al jabón para luego ser restregado por todo su delicado y delgado cuerpo, hacia todo esto mientras que sus ojos no hacían nada, no se movían ni pestañaban, solo se mantenían quietos mirando los azulejos del suelo, estaba tan perdido en sus pensamientos que cuando logró reaccionar se dio cuenta de que el agua estaba a una temperatura mayor, sentía todo su cuerpo ardiendo como si estuviera en llamas.
—— ¡Au, au, diablos! —— cerraba con rapidez la llave de la regadera y notaría como su piel antes blanca y pálida era ahora de un color rojizo, ¿que fue lo que pasó? Sale de la regadera y cubre su cuerpo con una bata de baño y fijaría sus ojos en el reflejo de si mismo en el espejo, se miraba detalladamente y notaría que su cabello estaba más largo de lo habitual, tal vez sea tiempo de córtalo, pero eso será para otro momento.
Iría caminando descalzo hacia su cuarto dejando algo húmedo el suelo, cierra la puerta detrás suyo aún que esto no era algo necesario nadie estaba viviendo ahí aparte de él pero ya era una costumbre suya cerrar la puerta siempre, solo por si acaso.
Da un salto que va directo hasta su cama y cae sobre las suaves sábanas de color blanco y mientras en el proceso podía sentir como la calidez y comodidad de estas lo envolvían en un cálido abrazo, hasta podía jurar que se sentía como el abrazo de alguien, era demasiado agradable volver a sentir esa sensación, como cuando sus padres aún todavía vivían lo llenaban bastante de abrazos y besos cariñosos, eran reconfortantes cuando tenía un mal día que eso era casi siempre, sentir el cariño de sus padres le traía felicidad por lo menos estando con ellos se podía sentir amado y querido, es una lastima que la vida lo odie tanto.
—— como los extraño... —— dijo sintiendo algo de cansancio, quizás dormir un poco no le vendría mal.
♡
En la casa de los Cartman se encontraban los cuatro amigos jugando videojuegos en la sala del castaño, todos riendo y soltando uno que otro insulto cada que uno perdía por culpa del otro.
—— Mierda Stan ¡aprende a jugar!
—— ¡Cállate Cartman!
—— Callense los dos mejor que por su culpa vamos a- —— accidentalmente todos salieron de la partida
—— ¡¿Que carajo?!
—— Uh, perdón chicos, fue mi culpa —— decía el rubio del grupo con un tono algo tímido y bajo pero intentaba mantenerse calmado como siempre, como la vez que le hicieron la broma a Pip en la escuela.
—— ¿Que carajo te pasa Kenny? actúas como si no supieran jugar
—— No es nada solo es qué... siento que él no se merece nada de eso —— alza un poco la mirada, pero costandole un poco mirar las caras de sus amigos
—— ¿De que carajo hablas?
—— Hablo de Pip, siento que lo que le estamos haciendo esta mal, él vive una vida difícil y ustedes lo han visto, deberíamos disculparnos con él ¿no creen? —— Después de que aya terminado de hablar el rubio todos se quedaron un minuto en silencio para después estallar todos en risas, Kenny no hizo nada más que solo ver a sus amigos con el ceño algo fruncido.
—— Dios, Kenny esa fue.. la mejor broma que ayas hecho en tu vida ¡Jajajaja!
—— ¡Sí Kenny, deberías ser comediante por qué eso sí que fue gracioso!
—— Hablo en serio chicos, creo que deberíamos parar —— Diría esta vez con un tono serio y seguro de lo que dice, causando el silencio de todos en la habitación.
—— Enserió eres bueno para la comedia Kenny pero no sé que pretendes con ese chiste llamado "dejar a Pip en paz", lo mejor sería que ya no lo vuelvas a contar porque ya no es gracioso —— Decía el castaño mirando fijamente a los ojos azules del rubio, casi en modo de amenaza
—— Bien, me voy a casa mejor —— Decía mientras caminaba hasta la puerta —— Los veo al rato —— Dijo antes de salir por la puerta y cerrarla detrás suyo, luego camina por el pavimento cubierto de nieve casi en su totalidad alejándose cada vez más de la casa de los Cartman
—— idiota... —— Dijo el castaño después de mirar al rubio irse
Seguiría caminando por ahí hasta que se detiene para sacar su teléfono de su bolsillo y empezar a buscar en sus contactos el número de quizás de la persona que pueda ayudarlo en este problema, empezó a marcar a la otra persona hasta que este por fin respondió casi de inmediato
—— Hola, Butters, uhh.. me preguntaba si podíamos vernos en.. no sé ¿a donde quisieras ir? ... ¡Bien suena genial, te veré allá! —— Cuelga la llamada y camina hasta el lugar donde acordaría verse con el pequeño Stocht.
Un pequeño rubio se encontraba postrado en su cama con una cara de indiferencia y aburrimiento solo teniendo su vista fija en el techo de concreto, se permanecía así hasta que la imagen de su amigo siendo humillado de la peor forma regreso a su cabeza, tenía planeado hablar con él pero cuando iba a hacerlo Pip ya se había ido, se lamentaba mucho el no poder haberlo seguido, se sentía como el peor de los amigos pero justo en ese momento donde se sentía la mayor basura del mundo es cuando su celular comienza reproducir la intro de un show infantil llamado Hello Kitty, era su tono de llamada y no tardo tanto en responder al ver que se trataba de su buen amigo Kenneth McCormick, amigo cual siente un profundo amor por él.
—— Hola Kenn, ¿que pasa? —— decía animadamente como si hace unos instantes no se sentía como la mierda del mundo —— Suena genial, ¿que tal si nos vemos en la cafetería de los padre de Tweek? ... ¡Esta bien, nos vemos! —— Cuelga y se hecha para atrás en la cama soltando un leve chillido de alegría y pataleando sus pies en las sábanas, iba a tener una cita con su gran amor ¿como no iba a emocionarse?
De un salto se levanto de su cama y camina hasta su armario para cambiarse de ropa a una más adecuada para la ocasión; un overol de color negro, un suéter celeste con cuello de tortuga, unos zapatos de color igual a su overol y uno que otro accesorio como pulseras negras y una de color rosa con una hello kitty que simplemente no pudo evitar usar
Una vez que termino de arreglarse se despidió de sus padres y salió de su casa caminando muy alegremente a su cita con su rubio esperando tener una linda tarde junto a él y conversar de lo que sea que quiera hablar.
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