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Heeseung bajó el libro que sostenía con sus manos hasta la altura de su mejilla, dejando sólo ver sus ojos,y sus cejas subiendo y bajando.

Sunoo vió en su dirección, y rió por el gesto del pelinegro.

A decir verdad, la única razón por la que
estaba haciendo eso, era por Hee.

El mismo estaba a unas mesas frente a él
dándole ánimos, y vigilando en caso de que algo llegara a pasar.

Sunoo estaba nervioso, nunca le había gustado eso de tener citas, claro, a excepción de Heeseung Lee.

La campana que se encontraba encima de la puerta sonó, dando a entender que había un nuevo cliente.

La mirada de Sunoo pasó hasta el alto
pelinegro que recién había entrado,
cautivándose con su belleza, llevándolo a
parpadear varias veces seguidas.

Devolvió su atención hasta la mesa donde estaba Heeseung, y lo vió sonreír levantándole los dos pulgares, en señal de ánimos.

El alto sonrió cuando vió a Sunoo, dirigiéndose a su mesa, y sentándose frente a él.

Heeseung puso más atención, y el pecoso comenzó a entrar en pánico.

— Hey, hola — sonrió, vaya jodida hermosa sonrisa — Soy Jake.

— Sunoo — se apropió a decir nada más.

— Lo sé, te he visto en la escuela — le dedicó una tímida mirada, mientras jugaba con sus dedos debajo de la mesa.

— Oh — sólo pudo decir con una pequeña sonrisita.

Segundos después, y antes de que todo
pudiera caer en un silencio incómodo,
una mesera se acercó hasta ellos, para
preguntarles por lo que pedirían.

Jake pidió un americano, y Sunoo un
mocca.

Realmente el que no cayera en un vacío
silencio les duró muy poco.

— Oh, supe que participarás en la
presentación anual — comentó el pelinegro.

— Ah, sí — sonrió con simpleza — Es mí
primera vez.

— La mía también, yo igual participaré — los ojos de Sunoo conectaron con los de él. A lo lejos Heeseung sonrió por ello — Mi profesor de canto quiso que participara este año.

— Seguro lo harás genial.

— Seguro tú también — sonrió, nuevamente.

Sunoo mordió su labio internamente,
conteniéndose.

Sentía la garganta seca nuevamente, su
corazón comenzar a latir con más fuerza, su respiración comenzaba a ser más agitada, haciéndosele dificil respirar, y el sudor comenzaba a aparecer.

Sin darse cuenta comenzó a rascarse su brazo derecho, y eso llamó la atención de Heeseung.

Comenzaba a ver a sus alrededores, en busca de paz, llegando hasta chocar su vista con los ojos preocupados del pelinegro en la mesa del fondo.

Poco a poco sus ojos comenzaban a picar,
sintiendo como probablemente en unos
minutos estallaría.

No podía estar teniendo un ataque de pánico, no ahora.

— Sunoo... — Jake llamó su atención,
viendo sus ojos preocupados. Y claro, no sé había percatado de su situación ahora — ¿Estás-?

— L-Lo siento, n-no puedo.

Dicho eso se levantó de la mesa, saliendo del lugar, dejando solo y confundido a Jake.

Heeseung salió automáticamente luego de él, tratando de llegar hasta él lo más rápido posible.

— ¡Sunoo! — gritaba viendo cómo chocaba entre tantas personas.

Sunoo necesitaba llegar a su casa, esconderse bajo las sábanas.

Era el único lugar donde se sentía seguro, porque guardaba el olor de Heeseung, y eso era su paz.

Quería llegar, necesitaba llegar, y sabía que detrás de él, venía Hee.

Él se lo había dicho.

Mientras él le acompañe, nadie podía
lastimarle.

Mientras él le acompañe, nadie podíalastimarle

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Keyhoon_

⿻  𝐓alking 𝐓o 𝐓he 𝐌oon  𝇁𝇃𝇂  𝐇𝗲𝗲𝘀𝘂𝗻 ‹𝟹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora