15. Tú Y Yo Ya No Existimos. [Final]

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"Todo acabó, no queda más, seremos dos extraños."

"Eres la estrella que busco cada noche, cuando todo se oscurece tu siempre estás ahí

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"Eres la estrella que busco cada noche, cuando todo se oscurece tu siempre estás ahí. Patito."

La voz de Luzu era como un eco lejano resonando en un vacío oscuro, también podía escuchar un pitido constante que comenzaba a tornarse molesto. Su cuerpo se sentía demasiado ligero como flotara sobre agua tranquila, ¿estaba en el pasaje al descanso eterno?

De pronto la incesante nada se convertía en un pasaje tranquilo, pasto verde y el sonido de las aves trinando felices en las copas de los árboles. Un aroma fresco proveniente del estanque que estaba más adelante. Su vista era borrosa en momentos mientras miraba a sus alrededores confundido porque de pronto el panorama parecía distorsionarse y se transformaba en una gran mancha oscura en la pared y muchas luces blancas aparecían en el cielo, para después regresar a esa imagen de un paraíso tranquilo y familiar: su propio hogar.

No había grandes murallas que lo protegieran y le impidieran ver más allá o sentimientos abrumadores, solo él recostado en el suelo y a su lado una sonrisa compasiva y unos ojos marrones cariñosos lo recibían. Ni él ni Luzu parecían poder moverse, aunque algunas veces agarró el césped bajo sus palmas con anticipación.

"Sigue hablando, me encanta escuchar tu voz."

Su voz sonaba en el aire sin que su esposo pronunciara palabra alguna, le tomaría la mano con cariño y lo acariciaría con el pulgar como aquella vez cuando inauguraron el estanque para sus patos. Quackity entiende a que se refiere, siempre estaría hablando de todos los planes que tenía para él y los que compartirían como pareja.

"Incluso cuando tenga que moverte en tu silla de ruedas por lo viejo que serás, Lusu."

La sonrisa de Luzu se amplió con ganas antes de que el panorama cambiara una vez más, esta vez con luces blancas en el techo y la imagen de Luzu intubado en aquella camilla del hospital respirando con ayuda de una máquina y finalmente llegando al momento que más temía recordar.

La gran mancha oscura en el muro apareció frente a él. Se acercó a ella con cuidado, pero el muro parecía alejarse a cada paso que daba con aquellos pitidos volviéndose cada vez más molestos.

"Sigue hablando, me encanta escuchar tu voz."

"¡Está despertando!" escuchó una voz en las lejanías. Sumiéndose de pronto en una oscuridad que le hizo sentir pánico.

Abrió los ojos abruptamente encontrándose con los rostros sorprendidos algunas personas que tomaban sus signos y suministraban medicamentos en una sonda conectada a su brazo. Los asistentes del médico salieron corriendo de la habitación para anunciar que ya había despertado mientras él vaciaba el poco contenido de su estómago en una cubeta que el médico se apresuró a tenderle.

"¿Cómo te sientes?" le preguntó con cautela.

"¿Dónde estoy?"

La puerta de la habitación se abrió violentamente con un Rubius apresurándose a apresarlo en un fuerte abrazo, apretándolo con fuerza casi con miedo de que se desvaneciera en contra de las indicaciones del médico quien se veía ofuscado por lo tosco que trataba al paciente aturdido y que recién había vomitado.

Disasterology | Luckity AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora