Condemnation

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"¿Estás listo?" Se miró en el espejo del auto acomodando su corbata.

"Si padre". Habló el castaño desganado y girando los ojos.

"¡Cambia esa maldita actitud Chris! Ya es hora de que sientes cabeza, tienes treinta y dos años".

"Ya sé padre, ya sé, pero ahora sabes que hay mucho trabajo en la empresa y..."

"Precisamente, tenemos buena racha, así que no cambies nuestra suerte".

"No lo hago, pero sabes que no podré casarme por lo menos en seis meses".

"Pero lo harás, así que ya cierra la boca, no vas a arruinar esto. Cuando yo no esté, tú estarás al mando y después ¿qué?, vas a necesitar herederos, así que comportáte a la altura. Ya se acabaron las fiestas y los excesos, ¿quedó claro?"

"Si padre".

"Perfecto".

El alfa mayor y el alfa menor, llegaron a la propiedad de Payne, aparcando el vehículo en la entrada principal. Bajaron y tocaron la puerta, está se abrió dejando ver al padre de familia.

"Un gusto conocerlo al fin señor Malik, no sabe el honor que nos hace su presencia en esta casa, Chris, un gusto verte de nuevo, pasen, los estábamos esperando".

Después de varios cordiales saludos y algunos cumplidos, finalmente se adentraron a la propiedad, sentándose en la sala. Los padres hablaron de temas triviales sobre sus hijos y su futuro, necesitaban al omega presente que no tardaba en llegar de la escuela.

Cuando Liam finalmente llegó y volvió a olfatear ese asqueroso aroma, lo supo, todo se había acabado, no era una broma, realmente estaba perdido.

Inmediatamente buscó a su prometido con la mirada, lo vió sentado al lado de un alfa mayor, intuyó que se trataba de su padre, este olía un poco a pino, miró la cicatriz que adornaba su ojo derecho, su ojo bueo era miel, y tenía el cabello canoso, probablemente tendría unos sesenta o setenta años el viejo, era raro que no se pareciera casi nada a su primogénito.

"Liam cariño, te presentó al señor George Malik, y ya conoces a Chris".

El castaño saludo a ambos de mano y con cordialidad fingida, después se sentó aparte, no quería por ningún motivo estar cerca de nadie, menos de sus padres, en este momento los detestaba y no pensaba en hablar con ellos en lo que restaba de su miserable existencia.

"Liam, sé que esto es muy difícil de asimilar, todo tan pronto, pero después, verás que esto es lo mejor". Hablaba el hombre mayor, serio, sereno, como si fuera lo más fácil del mundo, y extrañamente, hizo que sintiera algo de confianza.

"No nos casaremos tan pronto Liam". Chris tomó la voz. "Ahora hay mucho trabajo en la empresa que dirigimos mi padre y yo, pero en seis meses más o menos lo haremos, mientras tanto, quiero que vengas a vivir conmigo a Londres".

"¿Qué?" Habló con sorpresa, toda su vida había vivido en el mismo lugar, sus amigos incondicionales estaban ahí. Las miradas de todos se posaron en él esperando su respuesta, y él solo quería gritar que lo dejaran tranquilo.

"Es lo mejor pequeño, así, conocerás mejor a mi hijo para que la situación de casados no sea incomoda. Dejaremos que te despidas de todos y mañana por la mañana vendremos por ti".

Entonces si, eso era todo.

"Bien". Habló indiferente fingiendo no importarle la situación, pero por dentro, gritaba, lloraba, pataleaba, se quería morir. "Si me disculpan, tengo que hacer maletas". Se levantó y sin mirar a nadie, camino con dignidad hasta su habitación cerrándola con llave.

It's Always Been You // ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora