FOURTEEN

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-Gracias por volver - Jimin le dijo agradecido. - Ese tipo me da miedo, no me agrada. 

-Nunca te quedes solo con el, no es de fiar - Jungkook por primera vez hablo con seriedad a ese chico.

-Todo esto es tu culpa, jamás debi aceptar este trato contigo - el rubio casi lloraba en ese auto - mi vida era tranquila, serena y....

-Y aun así te robaron los muebles, debías ir con tu familia a ser humillado. - El pelinegro aun estaba serio.

-Jungkook, creo que...

-No digas nada, seguiremos siendo prometidos, debes amueblar tu casa...

-Necesitas el dinero, - casi al borde del llanto Park hablaba - por cierto... Si es verdad que eres ese millonario director o gerente o que se yo de esa empresa ¿Por qué no pagas a ese hombre?

Ahora si estaba atrapado Jeon Jungkook....

-Me he estado preguntando eso desde el día que tu madre me dio el anillo - Jimin ahora no estaba más triste - Dime Jungkook, si tienes tanto dinero ¿Por qué debes?....

-Por que..... - Tragó saliva - si pago con dinero proveniente de la empresa, se prestaría a malas interpretaciones, pensarían qué uso la empresa para lavar dinero o que uso mal los bienes de la empresa.

-Entiendo, - respondió conforme Jimin - Entonces debes conseguir el dinero por tu cuenta.

-Así es, no me gusta ser el centro de atención.-  respondió aliviado. - si te fijas, mi fotografía no aparece nunca. Me gusta vivir mi vida tranquila, salir a pasear al parque a la calle, donde yo quiera y no ser molestado por gente que solo eso quiere. Molestar.

-Excelente, no eres nada de lo que yo creía - El rubio le expreso despintando su cabello.

-Vendré por ti para ir a nuestra primer platica con el sacerdote de tu madre - el falso prometido le dijo cuando si tío el auto estacionarse en la empresa del señor Min.

-¿podrías llamarme cuando vayas llegando? - dijo tímido Park - perdona si te molesto, cuando pasan cosas como estas, permanezco  días con un temor tal vez irracional, pero debo estar seguro.

-Te llamaré, no salgas antes, tienes toda la razón en ser cuidadoso - Jeon le respondió sintiéndose el mismo seguro si lo hacían de esa manera.

Cuando él auto salía del lugar donde bajaron al prometido del señor Jeon, el no tan distraído joven, vio a la distancia, en el estacionamiento, el auto de su hermana.

No había más autos al rededor, así que o ella había llegado más temprano que el mismísimo Park Jimin, o no fue nunca a dormir a su casa o.....

-Desgraciada, espero no sea la tercera opción - dijo en voz alta.

-¿Decia algo señor? - el chófer preguntó.

-No, disculpame, - amable le respondió - Solo pensaba en voz alta.

-Yoongi, aun tenemos una hora antes de irnos - Seductora Hanna incitó a su señor Min. - ¿Te bañarias conmigo?

-¿Puedo responder qué no? - Yoongi le dijo mientras levantaba su cuerpo desnudo de la cama y la llevaba directo a la regadera. - Creo que he creado un monstruo.

-Si amor soy un monstruo por tu culpa, soy un insasiable monstruo de tus besos, de tus caricias y de todo lo que puedas darme - agitada mientras sentía las manos juguetonas de amante, los besos pretensios y toda su hombría dijo al pálido chico.

Más tarde llegaron ambos a la empresa. Jimin los esperaba en la puerta con los brazos cruzados.

-Tú, - señaló a Yoongi, debemos hablar - y tu - dijo a Hanna - también debemos hablar te espero en media hora en mi laboratorio.

UN FALSO PROMETIDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora