El pequeño grupo de chicos, aunque recién se conocieran, comenzaron a caminar algo lento hacia al árcade, las clases habían sido ligeras, pues recién era su primer día, esto no quitaba el gran estrés que esto ya causaba. Realmente no conversaban entre ninguno, de vez en cuando Asher señalaba piedras o alguna lombriz diciendo que ''era Shiloh'' este solo le decía que cerrara un poco la cola. Kame se mantenía callada, tampoco era como si ella hablara siempre, y Kurumi intentaba no caer en la locura. La chica de cabello oscuro intentaba concentrar su clara incomodidad y mientras pensaba en casi cualquier cosa logro hacer pasar el tiempo, finalmente se encontraban frente al árcade.
—Finalmente, aqui, wow, no habia venido a uno en años. — Dijo Shiloh intentando formar un poco de conversacion.
—Nunca he venido a uno. — Respondio Kame, rapidamente todos se le quedaron mirando de manera extrañada pero ella decidio ignorarlos. —Era una perdida de tiempo... — Intento sonar menos fria.
—¿COMO NUNCA HAS VENIDO A UN ARCADE? — Grito Shiloh sosteniendola de los hombros, rapidamente noto su cara de insatifaccion y la solto. —Acaso tu...—
—¿Eres pobre y por eso nunca pudiste conocer un arcade? — El silencio los rodeo rapidamente, todos miraron rapidamente a Asher esperando a que retirara lo que dijo, como si hubiera dicho la mayor barbaridad jamas vista, Kame rio bajo y se tapo la boca, extrañamente le habia causado gracia. — ¿Que? Capaz era eso... —
—Ah... Eso es extraño ¿Porque nunca fuiste a un Arcade exactamente?... — Kurumi intento endulzar un poquito la situacion.
—Ah... Mis padres decian que era una perdida de tiempo. —Rapidamente todos la miraron como si tuvieran pena de ella, aunque, a Asher no le importó.
—En fin, yo no jugaré nada.— Dijo el azabache con tal de cambiar el tema.
—¿Por qué? Se supone que vamos a jugar todos juntos sin excepciones. —Shiloh parecía que le quería dar una reprimenda.
—Tienes razón, si Asher no juega entonces habremos venido aquí en vano.— El pequeño dúo extrañamente se estaban juntando en sinfonía pese al poco tiempo que llevaban de relación. Esto sería una molestia para el pelinegro.
—Agh, que fastidio, separados son molestos, pero juntos se complementan. — Se burlo el más alto, una pequeña risa contenida de parte de Kame se escuchó en el fondo, extrañamente evitaba tentarse con los comentarios algo hirientes y aveces sarcásticos de Asher. También se complementaban pero a su manera.
—Bueno chicos, dejen de ser tan gays y entremos. — Dijo Shiloh con algo de ego en su tono, Asher le pegó un golpe en la cabeza.
—¿Que me dices gay? Hijo de tu puta madre. — Dijo a nada de comenzar una discusión que probablemente los termine vetando de por vida del Arcade. Kame rápidamente paso caminando entre medio de ellos y se dirigió hacía el mostrador para pedir monedas. Asher y Shiloh decidieron calmarse, pero su discusión no se quedaría ahí.
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Una vez terminado de comprar todas las fichas que querían comenzaron a ver a que juegos podían jugar. —Pido jugar a uno de carreras. — Pidió Kurumi. —¿Vamos a uno? Kame. — Agarró una de sus manos mientras la arrastraba en contra de su voluntad.
—Tu y yo. — Asher señaló a Shiloh. — Tenemos mucho de que hablar. — Rápidamente lo llevo a rastras de la mano hacía una mesa de hockey sobre hielo.
—Oh...~ Con que asi jugamos ahora, Asher. — Dijo agarrando un mazo, rápidamente comenzaron a llevar de aquí a haya el disco por sobre toda la mesa, parecía que ninguno realmente tenía emoción de embocar el disco, más bien tenía la intención de que el disco golpeara a su contrincante. Kame los observo con los ojos levemente fruncidos ''infantiles'' penso, continuo viendo a Kurumi la cual intentaba agarrar un peluche de Hello Kitty en una maquina. Simplemente suspiro.
—¡Agh! ¡NO PUEDE SER QUE NO PUEDA AGARRARLO, YO LO AGARRE, LO VI! — Kame la miro seria, rodeo los ojos en claro enojo y con un movimiento extraño de dedos le entrego una Hello Kitty —Emm... ¿Esto es legal? —
—Tu lo tienes, la unica culpable aqui serias tu. — Kurumi la miro con clara desesperacion. Kame casi explota en carcajadas. —Oye, el peluche ni siquiera es de aqui. — La cara de Kurumi se volvio a transformar a una con un notorio miedo.
— Kame, ¿Tu robas? ... —
— CLARO QUE NO. — La miro con claro enojo.
— Entonces... —
— Alguien me lo dió, no lo uso. — Dijo quitándole importancia a la situacion.
— ¿No te gusta Hello Kitty? — Musitó a punto del llanto.
—Emm, no lo sé, nunca lo vi. —
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