Lee MinHo y Han JiSung son mejores amigos que están perdidamente enamorados del otro, sin embargo, tienen un miedo terrible a confesar sus sentimientos por miedo a arruinar su hermosa amistad. Para desgracia de ambos, justo cuando iban a dar el prim...
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Tres años después
JiSung mordía su labio con nerviosismo, golpeaba constantemente su pie contra el suelo y cada cinco segundos miraba la hora en su celular, esperando recibir algún mensaje de MinHo.
—Me pegas tus nervios, ¿podrías quedarte quieto, Sunggie?—pide SeungMin, su primo.
—No—le sacó la lengua y siguió haciendo lo mismo. Golpeando su pie contra el suelo una y otra vez.
Tal vez creyeran que estaba exagerando, sin embargo, lo único que él quería era abrazar a su alfa, dejarse envolver por su aroma y no soltarlo nunca. La familia Lee había ido de vacaciones a Japón y Sung se vio en la obligación de pasar tres semanas, casi un mes, sin su pareja. A él lo habían invitado a las vacaciones dado que lo consideran como un integrante más, pero la familia Han ya había organizado un viaje a Estados Unidos en la misma fecha, por ende, no pudo ir.
Está de más decir que la pareja se hablaba todos los días, sin excepción, se enviaban fotos y mensajes cargados de cursilería y amor, no obstante, el omega con aroma a vainilla lo extrañó demasiado y lo único que quería era verlo, besarlo, abrazarlo y nunca más soltarlo.
Pasaron tres años desde que Lee MinHo y Han JiSung comenzaron a ser novios bajo la luz de la luna y de las estrellas de Seúl y deben decir que han sido unos años maravillosos, claro, con altibajos como cualquier pareja normal, sin embargo, lo importante es que pudieron superar cada uno de ellos, aunque todos saben que su altibajo más grande fue la pérdida de la memoria del omega. Con el pasar del tiempo, Sung ha logrado recuperar varios recuerdos pero jamás fue capaz de recuperar la memoria por completo, fue difícil para él aceptar que puede que eso nunca pase, no obstante, MinHo siempre ha estado ahí para calmarlo, darle ánimo y recordarle que tenían la posibilidad de crear recuerdos nuevos y que eso era lo más importante, puesto que todos son conscientes de que el accidente automovilístico podría haber tenido un fatídico final.
Actualmente, ambos se encuentran estudiando en la universidad. JiSung estudia medicina para después especializarse en pediatría dado que ama a los cachorros y MinHo estudia arquitectura porque desde niño le gustó armar Legos y construir cosas con bloques. Sabe que es una justificación medio absurda, pero de todos modos le gusta su carrera y eso es lo que importa.
—Su vuelo tendría que haber llegado hace diez minutos—hizo un adorable puchero, notando que su lobo se puso triste porque su alfa todavía no llegaba a Seúl.
—Tranquilizate, Hannie. Ya verás que en cualquier momento lo tendrás frente a ti y lo agarrarás a besos todo el día.
Escuchar a su primo decir eso hizo que se sonrojara, aunque no sabría explicar bien por qué.
—Ya, no me molesten—pidió en voz bajita.
—¡Mira, es MinHo hyung!—HyunJin apuntó hacia un lugar detrás de él.
