Cuento: Creación de amor V. 2.0

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Una vez, en ningún lugar.
Antes del dia y de la noche, antes del sol, antes del viento, antes de cualquier pizca de existencia cómo nosotros la conocemos existieron dos entidades sobrenaturales, casi divinas que se dedicaban a vivir dentro de una esfera gigante que flotaba en medio de la nada absoluta.

Ésta esfera fué creada por el, una de las dos entidades, en el pasado decidió arbitrariamente crearla con el fin de poder cuidarse a sí mismos y a su poder creacionista.

Sin embargo Ella, la otra entidad sentía que éste poder les había sido otorgado con un propósito, constantemente cuestionaba por qué pensaba cómo pensaba y de dónde venía.

Con frecuencia se encontraban en discusiones debido a la actitud conformista y desinteresada de El, quién afirmaba que no tenían ningún propósito y no le interesaba su origen, sencillamente prefería disfrutar su poder para el mismo.

Pero no se quedaba ahí dicha actitud, constantemente limitaba y controlaba las capacidades de creación de Ella, Visiblemente a pesar de ser semejantes uno contenía la emoción contraria al otro, eran tan iguales y al mismo tiempo tan diferentes.

Ella se encargó de algún modo poder crear cosas que ella anhelaba compartir, pero en ese momento ella se preguntó a quién se los podría compartir.

Entre todos esos artículos había a una caja de un material brillante que por dentro eran una serie de ruedas dentadas del mismo material las cuales movían dos agujas a través de una circunferencia.
Ella decía que era un objeto para medir la realidad y y cómo iba transcurriendo.

Un artefacto bastante complicado que le había costado más de la mitad de su existencia escondiéndolo y guardándolo como un tesoro que algún día serviría para algo importante tal como ella lo pensaba de sí misma.

En alguna ocasión, ella en una de las casi rutinarias discusiones con él muchas cosas fueron reveladas.

Pero la más importante fue que aquella esfera que los protegía o en este caso los recluía había sido creada por él. Ella no lo sabía.

Por alguna razón él apareció primero y se dio cuenta de todos los dones con los cuales podría contar Y cómo los podía aprovechar así que decidió encerrarse para tenerlos para él solo y un tiempo después apareció ella.

Ella visiblemente molesta lo confrontó le dijo que era un egoísta que era una persona miserable rencorosa y que no era justo que la arrastrara a ella a todo el odio que había en su corazón.

Inmediatamente él le propinó un golpe tan fuerte que la hizo salir volando hacia una de las paredes de la esfera la cual se quebrantó.
Al mismo tiempo que ella golpeaba la esfera cayó de su túnica aquel artefacto al cual ella le dio el propósito de medir la realidad, mediante el paso del tiempo.

El, eufórico y cegado por la ira se dio cuenta que no solamente estaba siendo confrontado, sino también las leyes que él había impuesto eran rotas constantemente por ella.
Después de maldecirla y maldecir sus acciones azotó fuertemente el instrumento creado por ella pero en el momento que lo hizo toda la esfera comenzó a temblar.
De algún modo el artefacto sí tenía un propósito ya que en cuanto se rompió en pedazos fuera de la esfera donde no había absolutamente nada apareció un suelo verde tan largo que no se podía ver el final y sobre este suelo verde una manta azul que la recubría.
Y en lo más alto de esa sábanas azul había una bola de fuego que al parecer era tan pequeña como una uva sin embargo fue suficiente para llenar de luz todo el lugar y de calentar aquel suelo verde del que inmediatamente comenzaron a surgir enormes estructuras cafés las cuales eran coronadas con más con más objetos de la misma naturaleza que recubría el suelo.

A su vez estructuras las cuales eran coronadas con vivos colores.

Él quedó maravillado por La hazaña que ella había logrado incluso estando él en contra, en ese momento se le salieron las lágrimas y se dio cuenta de que estaba completamente equivocado que la vida no es un sin sentido y que sin embargo todos tenemos una misión sea muy grande, muy pequeña y haberla ignorado efectivamente fue egoísta de su parte.

Inmediatamente corrió hacia ella pero una de las paredes de esa gruesa esfera había quedado enterrada en su pecho.

Poco a poco los ojos de ella los cuales reflejaban esa Nueva luz se iban cerrando, solo pudo atinar a lanzar una sonrisa mientras él se disculpaba. Llorando y gritando para obtener el perdón, él no pudo hacer absolutamente nada y ella murió en sus brazos.

Inmediatamente la rabia Y el dolor lo hicieron comenzar a golpear ese piso verde el cual se dio cuenta que no le hacía tanto daño como él esperaba porque era suave y acogedor tal como ella.
Se dio cuenta que todo lo que había creado involuntariamente era completamente su imagen y su persona el calor del sol la sombra de los árboles, todo está pensado completamente para ser felices ahí, sin embargo él se dio cuenta que no era nada sin su contraparte, notó que siempre quiso estar solo pero una vez que lo estuvo y logró su cometido se dio cuenta de que no había nadie con quien compartir lo que estaba creando.

Con un enorme dolor en su corazón decidió excavar un agujero en aquel suelo verde y la puso a ella adentro con la esperanza de que algo sucediera.

Mirando la protuberancia del suelo donde había sido enterrada ella, él solamente atinó a decir nuevamente que lo sentía pero que ya podía descansar en un lugar que era de ella y que esperaba en algún momento volviera o floreciera como todas aquellas formas que saliendo del suelo lo cautivaban.

La palabra florecer pareció muy atinada para él nuevamente le pidió disculpas Ya que ni siquiera le permitió crearse nombre, no le permitió tener una identidad por el miedo de perderla, así que decidió bautizarla como Flor.

Lágrimas y más golpes caían al suelo por parte de él ya que a pesar de estarse redimiendo no podía con la culpa se dio cuenta que esos continuos golpes y esas lágrimas que caían al suelo inmediatamente formaron montañas y formaron enormes ríos de agua cristalina.

Finalmente vió que las mejores virtudes de cada uno surgen cuando las compartes con el otro, él gritaba constantemente de qué le servía este mundo tan bello Si no tenía nadie con quien compartirlo y nadie más que no viviera en él que no fuera un egoísta miserable.

Tomó uno de los pedazos de la esfera de su rencor y se lo clavó en el pecho en el mismo lugar donde uno de esos fragmentos le quitó la vida a flor.

El solo esperaba que ella lo pudiera perdonar no solo por todo lo que tuvo que pasar con él durante tanto tiempo sino por lo que estaba a punto de hacer. Él se quitó la vida justo al lado de flor y algo sucedió en ese momento las flores envolvieron los cuerpos de ambos y de ellos salieron dos pequeñas personas iguales a ellos pero estos eran niños, perpetuando su unión...

La maldad y la bondad no pueden existir una sin la otra, a veces quisiéramos que dejara de existir maldad en el mundo para dejar entrar solo la bondad y el perdón a la vida y a todas las virtudes que el mundo nos ofrece para ser felices.
Sin embargo hay que preguntarnos por qué todas esas cosas nos provocan felicidad, tal vez es porque luchamos por ellas constantemente, tal vez es porque si no hubiera cosas en el mundo que fueran malas no tendría sentido conseguir las cosas buenas porque siempre estaríamos felices.

Anhelamos a la vida pero tememos a la muerte sin saber que una le da sentido a la otra, de qué sirve llorarle la muerte si la vida te recompensará tarde o temprano. Y de qué sirve aferrarte a la vida si tarde o temprano la muerte también es inevitable.

Lamentablemente no somos ni flor ni él y no tenemos absolutamente todas las respuestas Y tampoco tenemos la capacidad de crear.

Somos una creación, de amor.

Delirios EfímerosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora