Waste it on me -Heesun

Tres

Habían culminado una primera semana experimental en una relación un poco extraña, pero que les sirvió a ambos para poder entenderse un poco más y discutir ciertas normas al respecto de cómo querían llevar su noviazgo

— ¿Lecciones? —le cuestionó Sunoo sin entender porque Heesung mencionaba esa palabra en la charla

Estaban hablando de su relación, no de la escuela

— Si lecciones, las necesitas tanto como yo —se explicó Heesung

— No te entiendo Hee

El cuatro ojos suspiró recordando que no salía con ningún genio, que muy por el contrario su novio era un idiota con quién debía hablar las cosas de forma clara

— Quiero que tu me enseñes a ser un mejor novio y yo te ayudaré a aprobar matemáticas —sugirió

Sunoo lo miró indignado y quiso reclamar al escuchar el último punto

— ¿Por qué crees que no soy capaz de apr—

Pero fue detenido por un directo Heesung quién no se detuvo a considerar lo brusco de sus palabras

— Eres un asco en matemáticas Sunoo

— No lo digas tan brusco... —le reprochó sintiéndose avergonzado

Si bien nunca le importó mucho su promedió y aprobar era ya un logró para él, ahora que salía con el mejor promedió era un poco incómoda la muy importante diferencia entre ambos

— ¿Quieres que use un sinónimo de asco? — sugirió al ver el rostro molestó del rubio delante suyo

Esa expresión que hace poco había descubierto que lo hacía sentir incómodo

— Si eso me hace ser bueno, si

Heesung se rió del rubio idiota una vez más

— Eso sería un antónimo

— ¿No eran lo mismo? —preguntó un despistado Sunoo

Luego de esa conversación se creó una breve rutina. Heesung acompañaba a Sunoo a almorzar a una mesa lejana en el patio, decidieron que fuera una del patio porque ambos querían privacidad, mientras el rubio almorzaba también respondía preguntas que el cuatro ojos de su novio tenía y es que a lo que se refería el amor, Heesung tenía demasiadas preguntas

También se agregaban a ellas las preguntas sobre Sunoo, Heesung al estar saliendo como el rubio no quería darse el lujo de cometer errores como el primer día y una forma que encontró para combatir ese disgustó fue también aprender sobre Kim Sunoo, aún cuando aveces le pareciera la tontería más grande del mundo

Pero volviendo a la nula idea de Heesung sobre el amor, muchas cosas básicas y que Sunoo las veía como coherentes, Heesung no las entendía y aún cuando debían tenerse paciencia mutuamente, Sunoo aveces se exasperaba por las respuestas sin vida que le daba su novio

— ¿Por qué tienes que ser tan serio? —le cuestionó al oír una de esas respuestas vacías que le daba Heesung— solo tienes que seguir a tu corazón

— Pero no se lo que me está diciendo —le contó, siendo sincero

Heesung no se entendía a si mismo, los sentimientos cálidos no eran su especialidad y lo ponían incómodo porque siempre se caracterizo por entender todo de forma sencilla

— Aveces no necesitas saberlo todo, solo sentirlo

Sunoo era un especialista en eso de los sentimientos, después de todo salía con la persona que siempre le gustó, sentía todos los sentimientos del mundo solo al intercambiar palabras con Heesung y por eso es que sabía que podía ayudarlo a entenderse

Porque lo mismo había sido para él, Sunoo entendió lo que era gustar de alguien con la ayuda de ese cuatro ojos que lo miraba disgustado por esos mordiscos enormes que le daba a su sandwich de pollo, aún si nunca se enteró de que lo había ayudado

— Sunoo quiero que repasemos
 
El nombrado asintió, dándole permiso

— Entonces ¿Que aprendiste sobre mí hasta ahora?

Heesung se humedeció los labios y pensó un momento su respuesta

— No defines tus sentimientos, los dejas actuar y eso me pone nervioso porque desconozco la teoría —comenzó— entiendo ahora tus reacciones, existen algunas de ellas que me molestan y me hacen sentir incómodo, pero son naturalmente tuyas  

— ¿Qué reacciones? —le cuestionó Sunoo, buscando que especificara su respuesta

— Cuando te molesta algo aprietas los puños, si estás triste haces una expresión demasiado específica en tu rostro que intentas ocultar, haces preguntas tontas más veces de las que me gusta responder y cuando...

— ¿Cuando?

El mayor de ambos se sintió tan incómodo al admitir lo mucho que le había prestado atención para poder explicarle aquello, pero tragándose todo su orgullo siguió explicando su punto

— Cuando te saludo en la mañana sonríes de una forma particularmente agradable

— Osea linda —indicó un sonriente Sunoo

— Se podría catalogar de esa forma

Lo que siguió del día se pudo ver a un rubio insoportablemente feliz, su sonrisa parecía tan radiante que Heesung quería golpearlo para que dejara de brillar de esa forma, un poco se quiso golpear a si mismo por dejarlo ganar con ese cumplido

Pero una parte de él le divertía ver a Sunoo tan feliz, porque a su alrededor creaba un ambiente tan cómodo y alegre como él mismo lo era

Cuando las clases se dieron por finalizadas ambos esperaron a que todos se fueran del salón, Heesung porque odiaba las multitudes y Sunoo para esperarlo a él y poder salir juntos del establecimiento. El cuatro ojos tardo un poco más en dejar ordenados sus útiles en su silla por lo que Sunoo se quedó sentado en la mesa de al lado mirándolo con paciencia y en un cómodo silencio

— Termine —aviso, parándose con la mochila colgada en su hombro derecho y volteando en dirección a Sunoo quién estaba demasiado cerca de su rostro y tomándolo por sorpresa dejo que sus labios se posaran en la mejilla del mayor, quién a través de sus anteojos se vio notablemente sonrojado— ¿q-qué fue eso?

Sunoo le sonrió de forma cariñosa

— Se le llama beso

— Se lo que es un beso Sunoo —dijo de forma irónica— ¿Por qué me diste uno?

— Porque las parejas se saludan así —le explicó

Sunoo había comenzado a jugar con sus dedos al sentirse nervioso bajo la mirada penetrante de su novio, aún detrás de esos cristales lo hacía sentir pequeño

— No lo sabía —respondió un pensativo Heesung, quién acepto esa respuesta—tenías que enseñarme eso

— Te lo explicaré mejor la próxima clase, ya vámonos Hee