Nos acomodamos uno al lado del otro en el sillón, cubriéndonos con la suave manta que anteriormente acobijaba mi cuerpo. Él estaba sentado normalmente, mientras yo estaba acostado sobre su pecho y su brazo pasaba por detrás de mis hombros.
Estuvimos así unas cuantas horas, hasta que Minho se fue al baño mientras yo seguía viendo la serie. Cuando volvió, los dos nos sentamos normalmente, hasta que de repente siento una gran mano posarse en mi muslo, masajeandolo y proporcionándome caricias sin ninguna otra intención, más que amor. De repente agarra el control de la tv y pausa la serie mientras me mira fijamente, con esa mirada que hace que mi alma se derrita completamente, las mariposas revoloteen dentro de mi estómago, mi corazón vaya a mil por hora, llevando por mis venas una única sensación, amor.
- Jisung, tengo que decirte algo muy importante que vengo pensando desde hace mucho tiempo.-
Me quedo mirándolo fijamente esperando su respuesta.
- Siempre que estoy contigo, me siento completamente satisfecho, siento que no me falta nada más el la vida, nada más que tú. Cuando te veo, en mi pecho se siente una presión tan hermosa que nunca quiero que se termine. Cuando te toco, nuestro tacto me genera una sensación de ardor, un ardor que parece el mismísimo cielo.
Mientras Minho me decía eso, de mis ojos empezaban a brotar lágrimas que nublaban la vista, pero las saqué rápidamente para que mis ojos puedan seguir apreciándolo.
- Desde que te conocí, mi vida se ha vuelto espectacular, sólo porque estás tú en ella. Sin tí, yo no despertaría todas las mañanas con una sonrisa y un brillo en mis ojos. Por tí, entregaría mi cuerpo y alma. Escondería todas tus inseguridades en un baúl sin fondo, para que se pierdan en un abismo sin fin. Por tí, entrego todo de mí.
En ese momento Minho agarra con suavidad mis mejillas, besa cada parte de mi rostro, sin dejar parte sin la sensación de calidad que sólo él me transmite. Y luego, besa mis labios tan suavemente, que por un instante, creí que estaba en el mismísimo cielo.
- Jisung, ¿Puedo darte mi alma, mi cuerpo y mi corazón, a cambio de pasar toda mi vida entera junto a ti?
Por un segundo no reaccioné, hasta que vuelvo en mí y abrazo a Minho por el cuello, y luego uno nuestros labios en un pacto de amor que nunca acabará.
- ¡Claro que sí! - dije emocionado y con lágrimas en mis ojos a la vez.
Luego de finalizar esa oración, nuestros labios comenzaron una danza, en donde se encontraron nuestras almas perdidas, en donde por millonésima vez se encontraron, para no volverse a separar nunca más...
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Soy lágrimas 😭 Espero que les haya gustado tanto como a mí, y que disfruten tanto de la lectura como yo de escribirla y ver que a ustedes les gusta. Muchas gracias a esa personita que está atenta a mis actualizaciones y siempre me ayuda dejando su preciado voto 💘💘
