Corona Eterna

Capitulo 28

Entonces, resulta que olvidé que estaba destinado a estar en una boda hoy. Lo olvidé porque no me acordaba de ayer, pero mi amiga me llamó anoche para hablarme de lo emocionada que estaba, y casi le pregunté de qué se trataba hasta que me acordé. UI tiene que estar allí a la 1:00 p. m. para una boda a las 2:00 p. m., así que esto va a ser muy corto. Suerte que pedí el regalo de bodas hace más de un mes, así que no necesito entrar en pánico e intentar encontrar uno. Voy a tratar de apresurar tanto de este capítulo como sea posible. Tiempo de escritura rápida.

Sus opciones eran pelear o huir y pelear solo consolidaría su lugar como el próximo señor oscuro. Perder el dinero que había pagado por el pasaje era una pena, pero podía lidiar con eso. Tendría que lidiar con eso. Jaune entró en su camarote y recogió las bolsas que había dejado allí, se las echó al hombro y las empujó hacia la cubierta principal. Caminó hacia la barandilla, con la capucha puesta y tratando de parecer despreocupado mientras buscaba al Elegido. Todavía no estaban en el muelle, probablemente todavía buscando en el otro barco, por lo que tenía la oportunidad de bajarse y escabullirse antes de que llegaran aquí.

Tal vez pueda reservar un pasaje en uno de los que ya han buscado. Entonces puedo deslizarme más allá de ellos. Eso si no hubieran advertido a los capitanes que les dijeran si alguien que coincidía con su descripción lo intentaba. No puedo correr el riesgo. Voy a tener que volver tierra adentro y tratar de esconderme allí. Maldito seas, Ozpín. Esto es tu culpa.

Muchos de los hombres de Neptune estaban ocupados corriendo por la cubierta tecleando cuerdas y amarrando cajas. Ahora se movían más rápido de lo que lo habían hecho antes, con una urgencia que los hizo apartarlo del camino. Fue cuando Jaune se acercó a la rampa y descubrió que retrocedía hacia el barco que se dio cuenta de por qué, y luego Neptune salió corriendo de las cabinas y subió los escalones encima de ellos hasta la rueda. No gritó, pero agitó las manos con enojo hacia adelante, haciendo señales y señalando las velas. Su tripulación entendió y aflojó las cuerdas, haciendo que las velas blancas ondearan mientras descendían por el mástil central. Un momento después, el barco crujió y raspó contra el muelle cuando comenzó a avanzar.

El Trident huía del puerto. Lentamente al principio, pero una vez que pasaron el muelle, los marineros empujaron largos remos de madera y comenzaron a remar para aumentar la pequeña cantidad de viento que los impulsaba. Sun estaba en el mástil, golpeando un pequeño martillo de madera en la madera para crear un ritmo para que los hombres remaran.

"¡Detener!" alguien gritó desde los muelles. "¡Alto en el nombre de la Reina!"

No parecía que Neptune planeara hacerlo. Giró el timón para que comenzaran a moverse hacia el este, hacia Mistral, y Jaune pudiera ver los muelles por el lado de estribor. Fue una cazadora la que se quedó, demasiado lejos para distinguir su rostro, pero su ropa negra y su capa la delataron. La mujer seguía gritando, señalando, y luego el aire a su alrededor comenzó a brillar con un color púrpura intenso. Jaune dio un nervioso paso atrás.

Aura. Magia.

" Semblanza... " susurró Ozma.

El barco gimió al detenerse de repente, se detuvo en seco en el agua a pesar del viento y los remos. La madera crujía y se agrietaba mientras luchaba contra grandes estructuras parecidas a glifos superpuestas en el aire en la proa del barco. Era una barrera de luz violeta, un muro, que detenía su avance.

"¡Sigue remando!" Neptune rugió, girando la rueda para tratar de llevarlos alrededor. El barco no era capaz de girar en el lugar normalmente, pero con la barrera manteniéndolo en su lugar, pudo girar la proa a la izquierda, rozando la pared mágica y arrastrando el lado de estribor del barco contra ella mientras buscaba. sus limites