Capítulo 1 La llegada de Opposite Wally al vecindario.

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-Sabía que cualquiera de tus decisiones me iban a afectar de alguna manera, solo me aferré a la idea de que podías escogerme a mí, sabía que en el fondo de tu corazón gritaba "Wally, quiero estar el resto de mi vida contigo" pero se que también gritaba "Opuesto, quiero quedar el resto de mi vida contigo", no me aferraba a la idea de que podrías elegir tu tercera decisión, simplemente no podía, no tendría aquel valor de verte marchar y no volver a verte jamás, pero, después de todo, es tu decisión y espero que la decisión que vayas a tomar sea la correcta para ti.





...

-Era un día nuevo, tenía una gran sonrisa en mi rostro, estaba felíz, sabía que hoy día llegaría mi hermano al vecindario. ¡Hoy es un gran día!, mi hermanito por fin estará aquí, ¡lo espero con muchas ansias!

-Como era de costumbre, me levanté de la cama, arreglé mis sábanas, mis almohadas, fuí al baño a hacer algunas necesidades, pasaron varios minutos, me peine mi hermoso cabello azúl, me puse mi lazo rojo en el cuello, me miré al espejo con una gran sonrisa en el rostro, procedí a ponerme la ropa casual pero elegante que siempre me ponía, baje por las escaleras de mi casa llegando a la planta baja dónde se encontraba la cocina y la sala de estar.

¡Buenos días Home!-Saludé con una gran sonrisa en el rostro a Home, Home solo movió una de sus ventajas respondiendo a mis buenos días.

Home, adivina, hoy llega mi hermano, ¡se que te caerá bien!, aunque aveces suele ser gruñón como Frank pero es un buen chico, se quedará a vivir conmigo, espero que no sea una molestia para ti, Home. -Dicho eso Home abrió la puerta para poder salir, así que simplemente salí de casa, me di la vuelta y lanze un beso a Home para luego seguir con mi camino a dirección de la entrada del vecindario que se encontraba en medio del bosque. ¡Espero y mi hermanito llegué pronto!, estoy muy ansioso, hace años que no lo veo, ahora que lo recuerdo, la última vez que lo ví fué...cuando ambos teníamos 10 años, debió de haber crecido mucho...

-Sabía que a su hermano no le gustaba mucho el contacto físico así que simplemente al llegar al camino que era la entrada del vecindario se sentó en una banca que había en aquel lugar, sabía que en cualquier momento un autobús iba a llegar y así fue, ví como un autobús llegó y se estacionó cerca de donde me encontraba, de aquel autobús bajó alguien pelirrojo con un carácter todo malhumorado, ví como aquél chico se acercaba a mí con su maleta en mano, ya sabía que se trataba de mi hermano, me levanté rápidamente de aquel banco y con una sonrisa en el rostro quise decir algo pero el habló primero.

...Haci que hermano, te vuelvo a ver después de mucho tiempo...-Al oír lo que dijo aún sonreía pude ver qué tenía su ceño fruncido, pero eso era de menos. Opuesto, ¡que bueno verte de nuevo!-Quise abrazar a mi hermano pero éste impidió el abrazo.

...Cero abrazos "hermanito", sabes muy bien que no me gusta el contacto físico. -El rodeó sus ojos. Al parecer tú sigues igual de enano que siempre...-Soltó una leve risa burlona.

Oh...porfavor, no te burles de mi estatura, opuesto, serás más alto que yo pero no soy tan rabioso como lo eres tú. -Vi como el frunció más su ceño, me encantaba hacerlo enojar, lo veía algo gracioso, desde pequeño solía molestarlo.

Querido hermanito, ¡mejor te enseño el hermoso vecindario en el que vivo y vivirás conmigo!-El solo asintió con la cabeza frunciendo aún su ceño, agarré su maleta y caminé por la entrada del vecindario, podía sentir como el traía mal humor, pero ya era cuestión de acostumbrarse, siempre fue así y lo quería, era mi hermano después de todo.






...

-No me agradaba la idea de ir al vecindario donde vivía mi hermano, solo hacía caso a lo que mis padres me dijeron de pequeño antes de tener aquel accidente, "Supongo que será lo mejor", no lo creo, mi hermano suele ser más felíz, amigable, pero yo, yo era todo lo contrario, la última vez que lo ví fué hace muchos años, cuando apenas teníamos 10 años, supongo que seguirá igual de enano.

-Solté una risa burlona mientras miraba por la ventana de aquel autobús que me llevaba a aquel vecindario "colorido" dónde vivía mi hermano, talvez estar aquí me ayude a superar varios problemas que tengo, después de todo, no pierdo nada intentándolo.

-Pasaron varios minutos desde el viaje, me desperté de golpe porque el autobús había parado, estaba durmiendo, el ruido de las personas que estaban aparte de mi en aquel autobús me causaba estrés, bajé felíz de aquel autobús ya que por fin no iba a oír a los demás pasajeros ruidosos, pero, al bajar noté a mi hermano sentado en un bando cerca de allí, estaba sonriendo. Genial, me olvidé por un segundo que mi hermano iba a venir por mi, no se va a callar durante el camino, que estrés.

-Solo fruncí el ceño y me acerqué a él con mi maleta en mano, el quería decir algo pero yo hablé primero. ...Haci que hermano, te vuelvo a ver después de mucho tiempo... -Aún mantenía mi ceño fruncido, el solo sonrió y su sonrisa de alguna manera me causaba rabia.

Opuesto, ¡que bueno verte de nuevo! -Después de lo que dijo quiso abrazarme pero lo detuve, el sabía perfectamente que no me gustaba el contacto físico. Cero abrazos "hermanito", sabes muy bien que no me gusta el contacto físico. -Solo rodeé mis ojos. Al parecer tú sigues igual de enano que siempre...-Solte una leve risa burlona.

Oh...porfavor, no te burles de mi estatura, opuesto, serás más alto que yo pero no soy tan rabioso como lo eres tú. -Fruncía más mi ceño al oír lo que dijo, me molestaba mucho que siempre me molestara, pero por más que me acostumbré seguía molestándome.

Querido hermanito, ¡mejor te enseño el hermoso vecindario en el que vivo y vivirás conmigo! -Solo asentí con la cabeza mientras mantenía mi ceño fruncido, el agarró mi maleta y solo lo seguí, iba hablando y hablando por todo el camino, sabía que no iba a dejar de hablar, solo lo ignoraba mientras caminaba.

-Pasaron algunas horas y mi hermano seguía hablando mientras me mostraba todo el vecindario donde iba a vivir por un largo tiempo, hasta que finalmente se detuvo y me mostró su casa donde me iba a alojar con el, solo observé su casa, al parecer su casa tenía ojos y vida propia, no era para nada raro para mí, después de todo, mi hermano siempre fue raro.

Muy bien, Opuesto, está es Home, mi casa donde siempre vivo y soy felíz!, saluda, Home. -Vi como la casa de mi hermano hizo un chirrido como si estuviera saludando, solo me crucé de hombros y la casa de mi hermano solo abrió la puerta indicando que ambos teníamos que entrar dentro y eso hize, luego ví como mi hermano entró y la puerta se cerró, miré a todo lados, su casa por dentro era muy colorido, me daban ganas de vomitar al ver mucho color, solo ignore todo.

Entonces, Wally, ya que estamos aquí, en tu casa, ¿Dónde se supone que voy a dormir?, vives solo, amenos que me vayas a hacer dormir en tu sofá. -Rodeé los ojos, mi hermano era demasiado orgulloso para dejarme dormir en su cama, ya sabía que me iba a decir que dormiré en el suelo o en su sofá pero lo que dijo me sorprendió. Oh hermanito, no te preocupes por eso, tengo otro colchón que podemos poner en el suelo para que estés más cómodo. -El solo sonrió y solo lo mire con seriedad, después de todo, tenía que aceptarlo, no quería dormir incómodo en las noches.

Oh si prefieres...puedes dormir conmigo en mi cama, ¡podemos alcanzar los dos! -Al escuchar eso sentí como mi cuerpo se estremeció, no me gustaba esa idea de dormir con mi hermano, iba a ser incómodo, además, el se mueve demasiado y terminaría tirado en el suelo. No, estoy bien en ese colchón en el suelo.

-Vi como mi hermano solo asintió y fue a su habitación a arreglar todo, yo solo me senté en su sofá y me quedé a esperarlo.











Continuará...

¡Hasta aquí el
primer capítulo,
espero les guste
mucho!

¡Tomen agüita y
cuidense!

¡Una Decisión..! [Wally Darling, Opposite Wally]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora