¡Una Decisión..! [Wally Darling, Opposite Wally]

Capítulo 2 ¡Camión de mudanza y nueva vecina!

-Sabia que en cualquier momento iba a tener problemas en esta ciudad, solo era cuestión de tiempo. Vaya, ahora que voy a hacer...¿Porque ahora tiene que pasar esto?, dejaré los problemas para después, tendré que buscar un lugar nuevo donde vivir por un tiempo...

-Agarré mi celular, busque ubicaciones de algún vecindario para mudarme, algo llamó mi atención, había una noticia sobre un vecindario colorido y muy amigable, tenía buena reseña, al parecer se llamaba "Welcome Home", sonreí y dejé mi celular en la mesa que estaba justo al frente mío. Bien, creo que ya encontré un lugar bueno, ahora, voy a contratar un camión de mudanzas.

-Había pasado varias horas desde que llamé a alguien que se encargará con lo de mi mudanza, llegaron justo a tiempo, me informaron que en una semana podía ir, iban a hablar con uno de los vecinos de ese vecindario anunciando que ya iban a preparar una casa para mí, estaba feliz, por fin me iba a salir de este lugar, me sentía encerrada aquí, sin mis padres me sentía sola, los vecinos de este lugar no son tan amigables por así decirlo, solo suspiré, ya estaba felíz, solo iba a esperar a que los encargados me dijeran cuando podría ir a ese vecindario dónde viviré, por ahora solo me puse a empacar algunas cosas de vidrio, cosas que eran frágiles y muchos más.

Solo espero con ansias el día en que me vaya a ir de este lugar, por fin, ¡ya puedo sentir la paz! -Sonreía felíz, solía hablar sola, ya era costumbre mío, subí a mi habitación y me puse poner algunos discos de canciones que me encantaban en una caja, esto obviamente tenían que venir si o si conmigo.

-Los días pasaron y hasta así llegar el día en que me iba a ir, me arreglé un poco, me puse un pequeño ganchito en el cabello con forma de arcoiris, agarré mi bolso con algunas cosas personales dentro, sobre todo mi celular.

¡Hoy es el día! Espero y el camión de mudanza este finalmente aquí. -Salí de mi habitación dirigiéndome a la planta baja de mi casa, me asomé por la ventana y ví que el camión finalmente había llegado, sonreí felíz, salí de casa, cerré la puerta con llave y me acerqué a uno de los choferes de aquel camión. ¡Buenos días! ¡Estoy lista para irme!

Buenos días, señorita, suba al camión y cuando usted me lo ordene podemos partir. -El chófer sonrió, asentí con ma cabeza y procedí a subirme en el copiloto de aquel camión, estaba felíz, sentía que mi corazón latía fuertemente, solo di un pequeño suspiro y miré a aquel chófer. ¡Podemos irnos ya, señor!, Todo está listo ya, en marcha, nuevo vecindario, ¡allí voy!

-El conductor de aquel camión soltó una leve risa y procedió a conducir a aquel vecindario, pasaron unos 20 minutos y así llegar al lugar, miraba pora ventana y el vecindario era muy colorido. ¡Oh vaya!, Si que es muy hermoso, espero que los vecinos de aquí sean muy solidarios!

-El camión se estacionó frente a una casa que estaba en remodelación, supongo que era la casa en donde me iba a alojar, baje del camión y di una mirada a todos lados.

Señorita tome la llave de su nueva casa. -El chófer me entregó una llave, la recibí y sonreí- ¡Muchas gracias!, puedes dejar las cosas que faltan aquí afuera y luego yo ya las meto adentro. -El chófer asintió y procedí a abrir la puerta de la casa en donde iba a vivir, al abrir la puerta, ví el lugar, era muy hermoso, pero claro, aún faltaba arreglar, pero de qué estaba muy bonito estaba bonito, puse mi bolso en una mesa que había, sentí una extraña sensación de que alguien estaba en mi tras, volteé a ver y vi a alguien quien tenía una gran sonrisa en el rostro, su cabello era azúl y tenía un peinado que me parecía extrañamente genial. ¡Buenos días! ¿Usted debe ser uno de los encargados de este vecindario, verdad?

-El chico que estaba parado frente a mí se quedó callado por un rato, pude notar que al parecer estaba nervioso, no se sabe el porque pero luego habló. Disculpe por no decir nada, señorita, que descortés de mi parte, soy Wally, Wally Darling, uno de los vecinos de este asombroso vecindario, no seré el encargado pero me encargaré de que tenga una cálida bienvenida.