Ícaro

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"Ícaro se sintió dueño del mundo y quiso ir más alto todaví­a, sin embargo, se acercó demasiado al sol..."

Durante el embarazo el feto se encuentra sumergido en aproximadamente 600 a 1000 ml de líquido amniótico, pero al nacer el cuerpo genera una sustancia llamada factor surfactante, la cual recubre las vías respiratorias y genera el recambio respiratorio de agua a aire, es interesante pensar que alguna vez durante 9 largos meses el humano, en teoría, es capaz de sobrevivir bajo el agua, el origen de la vida encontrándose dentro de la misma, mientras que una vez lejos del vientre materno, el origen de la muerte también puede encontrarse en esta.

Jeon Jungkook es la clase de persona que pasó sus días en la escuela primaria incendiando hormigas con una lupa bajo la luz del sol y sacando a los peces del estanque de agua cerca de su hogar para verlos perecer sobre las rocas, las pobres criaturas boqueando y mirando al vacío con sus húmedos ojos plateados, luchando por sobrevivir en un ambiente que no había sido diseñado para su especie, Jungkook atravesaba los ojos de las criaturas muertas con una navaja y los partía en dos, buscando en sus viscosas entrañas el secreto de su respiración acuática.

Por lo que no es de extrañar el camino que eligió para su vida, no es extraño que Jungkook haya disparado a su primera víctima a los 17 años, como tampoco lo es el que tome agresivamente la nuca del último señuelo enviado para entregar un pedido y le sumerja la cabeza dentro del recipiente de agua dispuesto dentro de la habitación de hotel, los brazos y pies del hombre moviéndose espasmódicamente en su intento de liberarse y recuperar oxígeno.

—Haz memoria bastardo —repite Jungkook sacando la cabeza del hombre del agua luego de poco más de medio minuto.

El hombre se queja, escupe el exceso de agua y busca recuperar el aire, sus vías respiratorias ardiendo ante la intrusión del líquido, luce como uno de esos peces que Jungkook sacaba del estanque, boqueando y con la mirada perdida, tan ridículo.

—Ya les he dicho todo —suplica el hombre, sangre y agua mezclandose en su golpeado rostro, pintando su camisa de un deslavado color rojo.

—Respuesta incorrecta —sonríe Jungkook complacido con la réplica obtenida —, recuerda como respirar idiota —agrega y vuelve a sumergirlo.

La puerta de la habitación se abre, atrayendo la atención de todas las personas en la habitación excepto de Jungkook, quién sabe perfectamente de quién se trata, vuelve a sacar la cabeza del hombre del agua, la punta de su navaja acercándose a un hinchado ojo del mismo, sus comisuras se curvan imaginando la sangre y espesa sustancia cristalina que caería al piso de enterrar el filo, sin embargo, suelta al hombre tirándolo contra el piso, cierra su navaja y se levanta hasta llegar junto a la persona que ha entrado, quién de cualquier forma lo iba a detener de abrir el rostro del hombre.

—Se acabó la diversión —bromea Jungkook a modo de saludo.

Kim Taehyung es el líder del grupo por muchas razones, es tan cruel como cualquiera de sus súbditos pero también está mucho más cuerdo que la mayoría de ellos, es leal y firme, egoísta y, por sobre todo, astuto, a diferencia de Jungkook, pocas veces malgasta su tiempo en torturas, pues mientras que Jungkook disfruta de ser cruel, Taehyung decide serlo, Jungkook quemaría largas hileras de hormigas para luego reír ante el rastro achicharrado de insectos que dejaba detrás, pero Taehyung vertería vinagre hirviendo e insecticida en el centro del hormiguero que estaba acabando con sus plantas de fresa en el huerto de la escuela, exterminando a todas las hormigas en una sola oportunidad.

Por lo que a pesar de la actitud ligera con la que le ha hablado Jungkook nadie más se atrevería a hablarle así a Taehyung, y que ambos sean amigos desde la primaria es la única razón de que lo tenga permitido.

icarus meets an angel (vmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora