El miedo de vivir

416 26 0
                                    


Las sombras de los múltiples árboles que rodeaban la pequeña casa creaban un ambiente gris al igual que escalofriante, el ruido que generaba el viento al chocar con las ramas secas o con algún vacío en el aire creaba el sonido adecuado para tan tétrica escena: Zoro sujetaba de la mandíbula a Perona, quien apenas y lograba poner las punta de sus pies en el suelo, y la cual ya no tenia tenia la energía de hace unos segundos para intentar liberarse del agarre de este, su cara estaba paralizada del dolor y su cuerpo del miedo, una única lágrima salio de su cuerpo antes de que la bestia a la que le había ayudado y entregado su corazón de forma inocente la estrellara con furia sin soltarla, contra el tronco de un árbol. Una sonrisa y una mirada de cinismo fue lo último que vio, antes de quedar sin vida, siendo despedida por una fría brisa y el sonido de un crillo.
Zoro soltó la mandíbula de la pelirosa, dejando que el cuerpo sin vida cayera a la fría tierra, como si de una muñeca vieja se tratase, no le daba importancia a lo sucedido, quería concentrarse más en lo que haría, más ahora que había descubierto que Nami empezaba a sospechar de él.

"Esto esta por acabar, tan solo tengo que esperar un poco mas" se dijo a sí mismo mientras por un pequeño sendero entre los árboles arrastraba el cuerpo sin vida de la pelirosa, hasta un viejo pozo que estaba lleno de maleza donde descanso por unos segundos, no pasaron más de cinco cuando empezó a examinar el pozo, retiro unas cuantas yerbas que cubrían su entrada, arrojo una piedra para comprobar su profundidad, quedando satisfecho con el tiempo en que tardo esta en chocar con lo que parecía ser un fondo de piedras o cemento. Miro el cuerpo que residía junto a sus pies y sin hacer mucho esfuerzo logro cargarlo en sus brazos como si se tratase de una princesa, miro al fondo luego al rostro pálido de Perona, sus labios se habían puesto algo morados y sus ojos aún seguían abiertos, por lo que zoro puso una cara de desagrado al verla con más detalle, y con la misma expresión la tiro al pozo de piedra, puso las yerbas que había retirado para cubrir mejor el pozo pero sabía que nadie iría a estar allí aparte de él por lo que no se tomó la molestia de dejarlo tan oculto, sacudió y acomodo su yukata

-no fue como lo tenia planeado pero no esta tan mal apresurar las cosas, verdad?-miro al pozo - si tan solo te hubieras quedado de mi lado, habrías podido vivir un poco más, muy mala elección mocosa.

SANJI

Un fuerte dolor de cabeza me estaba molestando desde que zoro se fue, no sabia a donde ni por que, pero tenia un mal presentimiento de que lo que estaba pasando era realmente malo, dure más de cinco minutos parado frente a la puerta quizás esperando algo que nunca llegó, mis piernas se empezaban a congelar al igual que las plantas de mis pies, ahí me di cuenta de como estaba vestido... una burla para quien creía ser. Camine hasta la pequeña mesa que estaba enfrente del sillón, me di cuenta de las bolsas, mire su contenido; habían frutas y varía clase de comida en latas, nada saludable, lo único con buen aspecto eran unas cuantas botellas de un fino licor que en poca ocasiones había visto.
Cargue las bolsas hasta una pequeña cocina que apenas contaba con una mesa, una lacena y una estufa unida a un fregadero, todo tenia un mal aspecto parecía cómo si hace mucho tiempo no se hubiera utilizado, todo está limpio pero se podía notar que la limpieza era reciente.

Empecé a ordenar el contenido de las bolsas, las botellas de licor las dejé sobre la mesa, me sentía cansado y muy bajo de ánimo no sabía que hacer, escapar sonaba tentador pero aún no tenía claro si zoro era una persona tan poco confiable, no sabía que sucedía afuera y el solo hecho de pensar que el germa podría estar esperando mi aparición me aterraba. Necesitaba calmarme pero no sabía muy bien cómo dejar de pensar, mi atención calló de forma precisa en las botellas de licor, no me gustaba mucho la idea de tomar hasta olvidar pero ahora era lo que más necesitaba. Sin pensarlo dos vece tomé una de esas botellas junto con un pequeño vaso de vidrio que estaba en la lacena, camine hasta el sillón de la sala para sentarme en el, empezando a servirme un buen trago estaba apunto de tomarlo cuando el sonido de la puerta principal me alertó,
Deje de forma rápida el vaso aún lleno encima de la mesa, y antes de que pudiera dejar la botella en la cocina la puerta se abrió, dejando que una brisa nocturna invadirá el espacio, me tense un poco y mi cuerpo tembló al pensar que podría tratarse de alguien más que no fuese zoro, pero mi corazón volvió a mi pecho al ver los cabellos verdes de el asomarse por la apertura de la puerta, entró tan rápido como salió y cerró la puerta de la misma manera.

Quedo mirándome en silencio, su expresión era sería, empezó a caminar hacia mi de forma lenta, me cara comenzó a arder por alguna extraña razón, su apariencia de cierta forma me ponía intranquilo

-planeabas beber sin mi?- se acercó hasta la mesa tomado uno de los vasos en sus manos, me miró fijamente- eres tan predecible jejeje

Quede como estatua, el parecía estar más relajado de lo que yo hubiera podido imaginar, sirvió con tranquilidad en los dos vasos un poco de licor, en su rostro se dibujo una sonrisa, me tendió uno de los vasos

-quieres beber conmigo?

La forma de actuar de zoro ya no me asustaba, me empezaba a irritar ¿cómo podía actuar tan campante con todo lo que pasaba?

-Dime que es lo que esta pasando- tome el vaso y lo deje sobre la mesa- tengo derecho a saber que paso con Luffy y los...

-eres muy molesto- se dejo caer en el sillón a pocos centímetros de mi, me miró fijamente al mismo tiempo que tomaba un poco de su vaso- pero tienes suerte, me encuentro de muy buen humor

-no me importa si estas de buen humor o no, dime donde esta Luffy?

-nada es gratis en esta vida, sabes?

-a que te refieres

Aun sonriendo como un estúpido el jugaba moviendo el vaso

-te diré lo que quieras, pero necesito algo a cambio de ello- debió notar mi confusión por lo que dijo- te doy mi palabra de espadachín, que te diré la verdad si tu me das lo que quieres

No me gustaba el rumbo que empezaba a tomar la conversación, me bastaba recordar lo que había pasado unas horas antes para creer lo que el hombre que aún no podía creer era zoro quería de mi, pero aún así tenía la esperanza de estar equivocado por lo que pregunte

-No tengo nada de valor, ¿que quieres de mi?

El tomo todo el contenido de su vaso y como si fuera algo normal, con tranquilidad me confirmó lo que temía

-quiero tener sexo contigo, acuéstate conmigo una vez y cantaré como pajarito- río-que dices?

Aun si lo venia venir, me impacto escucharlo de él, con quien había tenido una rivalidad por mucho tiempo y ahora... ¿que carajos se supone que estaba pasando?

-por que conmigo?, no te entien...

-si o no?- su tono de voz y expresión se volvieron serios - dame una respuesta ahora, antes de que me arrepienta y no te tome en consideración

Me estremecí "el germa está cerca, necesitas de zoro y los demás... estas solo si tu respuesta es un no... El germa te atrapará... te volverán a encadenar"
Yo mismo me hundía, mis miedos me lo hacían más fácil

-me acostare contigo- dije resignado- pero me tendrás que decir todo lo que esta sucediendo ahí afuera

-no me lo tienes que repetir dos veces- se acercó aún más a mi, su cuerpo rozaba con el mío- entonces que tal si empezamos?



















CAP 8

GRACIAS POR LEER... PERDON NO ACTULIZAR , NO TENGO MUCHO TIEMPO LIBRE 🥲.








Lo Necesito, Lo Deseo...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora