Runaways »m.c.

weightless.

Después de que ellos cruzaran un par de palabras en el autobús el chico de cabellos azules tuvo que bajar y Jenna se reprendió a si misma por ser tan estúpida y no haberle preguntado su nombre.

Ella sabía que ambos asistían al mismo colegio porque siempre tomaba el autobús en el mismo lugar y a la misma hora, pero por algún motivo nunca antes lo había visto por los pasillos.

Así que durante toda la mañana ella se dio a la tarea de buscarlo en los alrededores de la escuela y para su deleite finalmente lo encontró a punto de entrar a la segunda clase del día, al parecer el motivo por el cual no compartían ninguna clase juntos era porque él pertenecía a un grado mayor. Si Jenna tenía 17 el chico debía tener 18 años.

Y cuando él la vio, sonrió.

Y ella le regresó la sonrisa.

—Hey –le saludó antes de entrar a su clase, faltaban dos minutos para que los profesores cerraran las puertas y ella debía correr en busca de su salón que se encontraba al otro lado del pasillo.

—Hola –ella murmuró y entonces un silencio raro se instaló entre ellos. Jenna moría por volver a escuchar su voz. —¿Qué tal están las cosas con Jalex?

Para sorpresa de Jenna, el chico soltó una tremenda carcajada y ella disfrutó ver cómo sus mejillas se tornaban coloradas.

—Oh, creo que las cosas entre Alex y Jack están bien, son perfectos juntos –él murmuró y sonrió. Jenna lo observó rascar nerviosamente su cabeza y contó en su mente los segundos que le quedaban para llegar a su clase y no quedarse afuera del salón. Necesitaba saber el nombre del chico. —Soy Michael.

—Soy Jenna.

Las palabras salieron apresuradamente de la boca de ambos y entonces empezaron a reír por lo gracioso y raro de la situación. Ellos habían hablado al mismo tiempo y no se entendieron en lo absoluto.

—Dale, esta vez digámoslo sin que nuestras palabras se enreden –él propuso y ella asintió con una sonrisa en los labios. —Soy Michael.

—Jenna.

—¡Como la vocalista de Tonight Alive! –Michael dijo entusiasmado y ella frunció el ceño con confusión. Él notó lo perdida que ella estaba y volvió a reír. —Tonight Alive es una banda, una gran banda.

—Oh.

Un silencio incómodo se instaló entre ellos otra vez y Jenna comenzó a contar los segundos que faltaban para que el profesor cerrara la puerta de la clase. No quería quedarse a fuera, pero tampoco quería moverse de donde estaba.

43... 42... 41... 40...

—Así que –él habló de nuevo, Michael mordía nerviosamente su labio inferior y Jenna se sintió ruborizar, ese chico la tenía completamente atrapada. —¿Tomarás el autobús hoy?

26... 25... 24... 23...

—Uh, sí, eso creo.

—Entonces nos vemos ahí.

Jenna lo vio sonreír y al siguiente instante ya estaba desapareciendo dentro de su salón. Ella miró a lo largo del pasillo y calculó el tiempo que le tomaría llegar a su grupo.

11... 10... 9... 8...

Ella corrió lo más rápido que pudo y se encontró con el profesor de química mirándola acusadoramente, ella se encogió de hombros a manera de disculpa y con un suspiro cansado el hombre se hizo a un lado para dejarla pasar. Jenna sonrió complacida cuando tomó asiento.

Omg, no sé a ustedes pero a mí Michael y Jenna me dan mucha ternurita, se me hacen bien bonitos o no sé ;-; Btw, si viven en Monterrey... Nos vemos mañana en Fundidora, dd.