La nueva escuela

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- Buenos días, mi nombre es la Sra. Lisa y seré su maestra de Ciencias para el décimo grado. Ahora como no los conozco, quiero que cada uno de ustedes por orden se levante diga su nombre y su edad, bueno comencemos con usted señorito.

- Mi nombre es Orlando y tengo 15 años.
- Mi nombre es Christian y tengo 16 años.
- Mi nombre es Stephanie y tengo 16 años.
- ¡Siguiente!
*Dijo la maestra un poco molesta, debido a que el estudiante al que le tocaba el turno, tenía sus audífonos puestos y estaba mirando de reojo a Stephanie.*
- ¡Señorito! Es su turno.
- Emmm perdone Sra. Lisa, mi nombre es Alec. Actualmente tengo 16 años y vengo del Instituto Chester Mills.
- Mucho gusto Alec, para la próxima no entre con audífonos o se va del salón de clases.
*Suena el timbre"
- Bueno estudiantes pueden retirarse, mañana se podrán terminar de presentar y comenzaremos nuestras clases de manera regular.

*Todos los estudiantes salieron del salón pero Alec se quedo sentado y no fue hasta que salieron todos que el se levanto para salir. Alec es una persona muy sufrida, no tiene muchas amistades, tiene una novia por la cual no siente ya nada, pero por miedo a que ella sufra como sufre el, no le a dicho nada. Alec a fracasado ya en el amor y siempre a sido el típico chico que esconde sus miedos detrás de los audífonos*

- ¿Alec? Al Alec escuchar a alguien hablarle se asustó porque no conocía a muchas personas en esa escuela, pero al voltearse a ver, se sintió más cómodo, porque el que lo llamaba era un viejo amigo de su escuela Intermedia, se llamaba Antonio.
- Hola Antonio ¿como esta todo?
- Bien, no se si te has fijado pero aquí hay unas chicas hermosas, y creo que debo ir a echar un vistazo hablamos luego Alec.
- Dale, Cuídate Antonio.

Alec se puso sus audífonos y comenzó a caminar hasta su clase de historia, al llegar se percató que era de los últimos en llegar al salón y la única silla que quedaba disponible era de espaldas a Stephanie. La maestra comenzó su clase y Stephanie no hablaba con nadie, al igual que Alec que tenía sus audífonos puestos. Fue entonces cuando Stephanie cojio un papel y se lo tiro a Alec. Alec reaccionó mal creyendo que era cualquier persona, pero cuando vio que era Stephanie, le sonrió y se quedo callado. Pasados los segundos Stephanie le hablo.

-¿Alec verdad?
- Si.
- Mucho gusto, me llamo Stephanie.
- Si lose, en la clase anterior escuche tu nombre, bueno y ¿dime que necesita la Señorita tira papeles?
- Ay nada, nada solo quiero hablar porque esta clase me tiene aburrida.
Ambos comenzaron a reírse y la maestra los miro y les llamo la atención.
-Bueno mejor hablemos mas tarde Alec, no vaya a ser que la maestra nos regañe nuevamente.

El amor ¿Una tortura?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora